Limpiadores faciales vs. jabones: ¿cuál es más recomendable?

Uno de estos productos altera más el pH de su piel.

Foto: Pexels

La limpieza facial es una parte vital dentro de la rutina de cuidado de la piel, ya que de ella depende la vitalidad, la fuerza y resistencia que tenga el rostro después de años en los que el maquillaje, las cremas, el polvo y el sol, causen sus efectos.

A la hora de escoger los productos más adecuados para su rutina de limpieza, bien sea de día o de noche, se puede encontrar con millones de posibilidades y alternativas que pueden llegar a ser abrumantes, pero que, tienen un objetivo dentro de la rutina diaria, si se usan correctamente.

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Hablamos con Claudia Bolaños Arturo, especialista en dermatología de la Universidad Militar Nueva Granada con énfasis en cirugía dermatológica y enfermedades del pelo del Hospital Clínic Barcelona, quien nos aclaró varios aspectos de los limpiadores y jabones faciales y su uso en la piel.

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¿Cuál es la diferencia entre un limpiador facial y un jabón facial?

De acuerdo con Claudia Bolaños, la diferencia primordial entre estos dos productos y la forma en la que impactan en la piel están en que “un jabón facial normal tiene detergentes, alcohol, colores y compuestos que alteran el pH de la piel, un limpiador facial realiza un barrido de las impurezas preservando el agua normal que tiene la piel y cuidando el pH”.

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Lo recomendable para estos casos es que si bien la piel se debe limpiar con el fin de quitar las impurezas y la polución que la piel recolecta en el día, se debe hacer con productos que no sean agresivos o que aumenten la resequedad de la piel y produzcan irritación.

¿Cómo saber cuál limpiador facial escoger?

Existen cuatro tipos de limpiadores faciales que pueden tener diferentes reacciones en la piel, por eso, las recomendaciones de Claudia Bolaños es que “deben escogerse de acuerdo a cada tipo de piel y según recomendación dermatológica”.

Entre los productos limpiadores faciales que puede escoger está el limpiador facial en gel, limpiador facial en espuma, limpiador facial en leche y el limpiador facial de agua, todos con diferentes reacciones y hechos para adecuarse al tipo de piel de la persona y también, a las necesidades dermatológicas que presente.

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La clave para hacer una buena elección está en que se debe identificar que el limpiador hace correctamente su labor sin ser demasiado abrasivo con la piel. De acuerdo con la dermatóloga Claudia Bolaños, “un buen limpiador funciona haciendo un barrido de las impurezas de la piel y el maquillaje, manteniendo encapsulada el agua que tenemos para mantener hidratada la piel”.

Sobre qué marca se puede escoger, también la doctora recomienda que “deben escogerse las que tengan un soporte médico y científico en su elaboración y que sean controlados por organismos como la FDA o el Invima, así como las recomendadas por tu dermatólogo de acuerdo al tipo de piel o patología”.

Errores comunes a la hora de limpiar su rostro

Es recomendable que al momento de iniciar con su rutina de limpieza facial use la menor cantidad de productos que produzcan irritación, por lo que se debe evitar el uso de cepillos o materiales abrasivos en contacto directo con su piel, así como evitar los que tengan color u olor.

Lo ideal es que este proceso sea de forma cuidadosa y le genere un momento de relajación, por eso, se deben hacer masajes suaves que no causen efectos alternos a la aplicación del producto.

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*Esta es una nota informativa, que no representa una opinión o juicio de valor de El Espectador.