Noticias

Últimas Noticias

    Política

    Judicial

      Economía

      Mundo

      Bogotá

        Entretenimiento

        Deportes

        Colombia

        El Magazín Cultural

        Salud

          Ambiente

          Investigación

            Educación

              Ciencia

                Género y Diversidad

                Tecnología

                Actualidad

                  Reportajes

                    Historias visuales

                      Colecciones

                        Podcast

                          Opinión

                          Opinión

                            Editorial

                              Columnistas

                                Caricaturistas

                                  Lectores

                                  Blogs

                                    Suscriptores

                                    Recomendado

                                      Contenido exclusivo

                                        Tus artículos guardados

                                          Somos El Espectador

                                            Estilo de vida

                                            La Red Zoocial

                                            Gastronomía y Recetas

                                              La Huerta

                                                Moda e Industria

                                                  Tarot de Mavé

                                                    Autos

                                                      Juegos

                                                        Pasatiempos

                                                          Horóscopo

                                                            Música

                                                              Turismo

                                                                Marcas EE

                                                                Colombia + 20

                                                                BIBO

                                                                  Responsabilidad Social

                                                                  Justicia Inclusiva

                                                                    Desaparecidos

                                                                      EE Play

                                                                      EE play

                                                                        En Vivo

                                                                          La Pulla

                                                                            Documentales

                                                                              Opinión

                                                                                Las igualadas

                                                                                  Redacción al Desnudo

                                                                                    Colombia +20

                                                                                      Destacados

                                                                                        BIBO

                                                                                          La Red Zoocial

                                                                                            ZonaZ

                                                                                              Centro de Ayuda

                                                                                                Newsletters
                                                                                                Servicios

                                                                                                Servicios

                                                                                                  Empleos

                                                                                                    Descuentos

                                                                                                      Idiomas

                                                                                                      Cursos y programas

                                                                                                        Más

                                                                                                        Cromos

                                                                                                          Vea

                                                                                                            Blogs

                                                                                                              Especiales

                                                                                                                Descarga la App

                                                                                                                  Edición Impresa

                                                                                                                    Suscripción

                                                                                                                      Eventos

                                                                                                                        Pauta con nosotros

                                                                                                                          Avisos judiciales

                                                                                                                            Preguntas Frecuentes

                                                                                                                              Contenido Patrocinado
                                                                                                                              30 de marzo de 2016 - 09:21 p. m.

                                                                                                                              “Al escritor le conviene más el fracaso que el éxito”: Marco Tulio Aguilera

                                                                                                                              El novelista y deportista colombiano Marco Tulio Aguilera, quien está radicado en México, acaba de publicar “Poéticas y obsesiones”, un compendio con sus ensayos y conferencias.

                                                                                                                              Ángel Castaño Guzmán

                                                                                                                              “Breve historia de todas las cosas” fue la primera novela publicada por Marco Tulio Aguilera. / Cortesía

                                                                                                                              Novelista y deportista colombiano radicado en México, Marco Tulio Aguilera (Bogotá, 1949) acaba de publicar con la Editorial de la Universidad de Antioquia el compendio de ensayos y conferencias Poéticas y obsesiones. Bitácora de lecturas y experiencias, el libro de Aguilera contiene reflexiones del oficio narrativo hechas por un escritor diestro en las faenas de la ficción.

                                                                                                                              En el prólogo de “Poéticas y obsesiones” señala que el tema de su literatura es usted mismo, sus manías y pasiones. Luego de una larga carrera en las letras, ¿qué balance hace de su trabajo literario?

                                                                                                                              Puedo decir que estoy plenamente recompensado, no sólo porque haya conseguido algunos bienes básicos y algunos que podrían ser considerados como accesorios, sino porque he podido ejercer un oficio que me gusta y porque mis libros han sido publicados por editoriales de varios países con muy buena crítica, aunque en ocasiones con difusión insuficiente. A la altura de los años que tengo, disfruto de la vida con intensidad: tengo tiempo para escribir, para hacer deporte, para estudiar violín, para viajar a donde me invitan, y sobre todo para mantener una integridad que me permite decir lo que pienso.

                                                                                                                              Read more!

                                                                                                                              En el libro hay varias conferencias destinadas a hablar del cuento. Después de cultivar el género, ¿qué elementos hacen de una narración un cuento memorable?

                                                                                                                              Cada cuento es diferente, de modo que no me parece que se pueda hacer una especie de tratado sobre cómo se escribe. Hay algunos elementos comunes o algunas constantes. Debe haber, por ejemplo, un buen relato, algo que sea diferente a todo lo escrito, un estilo adaptado al tema, ausencia de paja, una transformación en los personajes o en la situación, debe haber una expectativa en los personajes o en el lector, debe haber pasión, acción, dinámica, movimiento, personajes o situaciones memorables, debe haber un buen estilo adaptado a la situación. Si los cuentos no arrebatan la atención, no valen la pena. Yo aspiro a que mis cuentos agarren a los lectores del cuello y los lleven hasta el final sin permitirles casi respirar. En algunos cuentos pienso que lo he logrado. Pero de todos modos, cualquier generalización es vana. Cada cuento es un cuento diferente, un reto, una aventura, una aventura desde la primera palabra hasta la última.

                                                                                                                              Dedica usted un ensayo a la obra de Henry Miller, escritor que ha influido en su obra. ¿Qué rescata a esta altura del autor de “Sexus”? ¿Qué tanto de sus libros le deben a él?

                                                                                                                              Henry Miller ha sido básico para mí. Tengo casi todas sus obras y he aprendido mucho de ellas. La crucifixión rosada, Trópico de cáncer y Trópico de capricornio, El coloso de Marusi son obras que vale la pena releer. Le debo más a Miller que a García Márquez. Mi primera novela, Breve historia de todas las cosas, fue escrita bajo la sombra de Cien años de soledad. Pero a partir de esa obra, que salió publicada en Buenos Aires cuando yo tenía 24 años y que tuvo una repercusión grande, al punto que se la comparó con la obra mayor de García Márquez, a partir de esa obra, repito, escribí libros muy personales: Cuentos para después de hacer el amor, Cuentos para antes de hacer el amor y El imperio de las mujeres, además de varias novelas, entre ellas El amor y la muerte, que fue finalista secreta del Premio Alfaguara, y una serie de novelas seriadas, que he llamado en general El libro de la vida (formado por Mujeres amadas, La insaciabilidad, La hermosa vida, Doctor Amóribus y tres inéditas). En esta serie de novelas está presente el influjo de Miller en varios aspectos: la narración autobiográfica, la aventura amorosa y erótica como una forma de la épica personal, la reflexión filosófica.

                                                                                                                              Read more!

                                                                                                                              En el ensayo “La novela: seda entre las manos” usted repasa su periplo novelístico. Luego de reflexionar sobre el oficio, ¿cuáles han sido las epifanías que le han deparado sus novelas? ¿Sigue creyendo que para escribir una novela hay que ser un optimista irredento?

                                                                                                                              Es muy difícil localizar cuál fue el momento o la situación que hicieron que la maquinaria de una novela arrancara. Supongo que no es sólo una motivación sino muchas las que contribuyen a que un escritor se obsesione con un tema al punto de dedicarle la mayor parte de las horas de su vida durante uno o varios años. Mi primera novela, Breve historia de todas las cosas, nació de tres o cuatro circunstancias: el recuerdo de un pueblo muy colorido, muy extravagante, de Costa Rica; la lectura de Cien años de soledad, que abrió mi imaginación a la maravilla de ese pueblo; el aburrimiento de las clases de filosofía en la Universidad del Valle, además de mi afición exagerada a la lectura y al ensimismamiento. Todo eso contribuyó, pero saber a ciencia cierta qué fue lo que prendió la mecha es muy difícil, tan difícil como interpretar un sueño confuso. Y de verdad que ponerse a escribir novelas es un acto de optimismo radical: gasta uno muchos años en una quimera que podría terminar en la basura o totalmente ignorada. Y es un acto de optimismo porque el verdadero novelista cree que con cada obra cambiará al mundo y que cada obra será una obra de arte. Cada novela debe ser una apuesta total: de ahí la pasión absoluta, la obsesión feroz con que se han escrito las grandes obras.

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              Esa pasión convierte al novelista en un descendiente de Caín, como usted lo llama en una de las conferencias compiladas en “Poéticas y obsesiones”.

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              La profesión del novelista casi obliga a la soledad, al aislamiento, al abandono de los papeles sociales aceptados y casi exigidos, obliga a menudo a traicionar ciertos secretos familiares o sociales, lo que lo convierte en una especie de antisocial, una entidad peligrosa, no sólo para sus parientes y amigos, sino para el establishment. Solamente hasta que doblegue la cerviz del poder y de la sociedad convencional en la que vive, mediante la fuerza de sus letras, logra ser aceptado y celebrado. Antes de eso el escritor es una especie de perro bajo la escalera. Y cuando llega el éxito, la aceptación y la celebración, generalmente el escritor baja la guardia y empieza a liberar productos mediocres, inacabados. Por eso es que al escritor le conviene más el fracaso que el éxito.

                                                                                                                              “Breve historia de todas las cosas” fue la primera novela publicada por Marco Tulio Aguilera. / Cortesía

                                                                                                                              Novelista y deportista colombiano radicado en México, Marco Tulio Aguilera (Bogotá, 1949) acaba de publicar con la Editorial de la Universidad de Antioquia el compendio de ensayos y conferencias Poéticas y obsesiones. Bitácora de lecturas y experiencias, el libro de Aguilera contiene reflexiones del oficio narrativo hechas por un escritor diestro en las faenas de la ficción.

                                                                                                                              En el prólogo de “Poéticas y obsesiones” señala que el tema de su literatura es usted mismo, sus manías y pasiones. Luego de una larga carrera en las letras, ¿qué balance hace de su trabajo literario?

                                                                                                                              Puedo decir que estoy plenamente recompensado, no sólo porque haya conseguido algunos bienes básicos y algunos que podrían ser considerados como accesorios, sino porque he podido ejercer un oficio que me gusta y porque mis libros han sido publicados por editoriales de varios países con muy buena crítica, aunque en ocasiones con difusión insuficiente. A la altura de los años que tengo, disfruto de la vida con intensidad: tengo tiempo para escribir, para hacer deporte, para estudiar violín, para viajar a donde me invitan, y sobre todo para mantener una integridad que me permite decir lo que pienso.

                                                                                                                              Read more!

                                                                                                                              En el libro hay varias conferencias destinadas a hablar del cuento. Después de cultivar el género, ¿qué elementos hacen de una narración un cuento memorable?

                                                                                                                              Cada cuento es diferente, de modo que no me parece que se pueda hacer una especie de tratado sobre cómo se escribe. Hay algunos elementos comunes o algunas constantes. Debe haber, por ejemplo, un buen relato, algo que sea diferente a todo lo escrito, un estilo adaptado al tema, ausencia de paja, una transformación en los personajes o en la situación, debe haber una expectativa en los personajes o en el lector, debe haber pasión, acción, dinámica, movimiento, personajes o situaciones memorables, debe haber un buen estilo adaptado a la situación. Si los cuentos no arrebatan la atención, no valen la pena. Yo aspiro a que mis cuentos agarren a los lectores del cuello y los lleven hasta el final sin permitirles casi respirar. En algunos cuentos pienso que lo he logrado. Pero de todos modos, cualquier generalización es vana. Cada cuento es un cuento diferente, un reto, una aventura, una aventura desde la primera palabra hasta la última.

                                                                                                                              Dedica usted un ensayo a la obra de Henry Miller, escritor que ha influido en su obra. ¿Qué rescata a esta altura del autor de “Sexus”? ¿Qué tanto de sus libros le deben a él?

                                                                                                                              Henry Miller ha sido básico para mí. Tengo casi todas sus obras y he aprendido mucho de ellas. La crucifixión rosada, Trópico de cáncer y Trópico de capricornio, El coloso de Marusi son obras que vale la pena releer. Le debo más a Miller que a García Márquez. Mi primera novela, Breve historia de todas las cosas, fue escrita bajo la sombra de Cien años de soledad. Pero a partir de esa obra, que salió publicada en Buenos Aires cuando yo tenía 24 años y que tuvo una repercusión grande, al punto que se la comparó con la obra mayor de García Márquez, a partir de esa obra, repito, escribí libros muy personales: Cuentos para después de hacer el amor, Cuentos para antes de hacer el amor y El imperio de las mujeres, además de varias novelas, entre ellas El amor y la muerte, que fue finalista secreta del Premio Alfaguara, y una serie de novelas seriadas, que he llamado en general El libro de la vida (formado por Mujeres amadas, La insaciabilidad, La hermosa vida, Doctor Amóribus y tres inéditas). En esta serie de novelas está presente el influjo de Miller en varios aspectos: la narración autobiográfica, la aventura amorosa y erótica como una forma de la épica personal, la reflexión filosófica.

                                                                                                                              Read more!

                                                                                                                              En el ensayo “La novela: seda entre las manos” usted repasa su periplo novelístico. Luego de reflexionar sobre el oficio, ¿cuáles han sido las epifanías que le han deparado sus novelas? ¿Sigue creyendo que para escribir una novela hay que ser un optimista irredento?

                                                                                                                              Es muy difícil localizar cuál fue el momento o la situación que hicieron que la maquinaria de una novela arrancara. Supongo que no es sólo una motivación sino muchas las que contribuyen a que un escritor se obsesione con un tema al punto de dedicarle la mayor parte de las horas de su vida durante uno o varios años. Mi primera novela, Breve historia de todas las cosas, nació de tres o cuatro circunstancias: el recuerdo de un pueblo muy colorido, muy extravagante, de Costa Rica; la lectura de Cien años de soledad, que abrió mi imaginación a la maravilla de ese pueblo; el aburrimiento de las clases de filosofía en la Universidad del Valle, además de mi afición exagerada a la lectura y al ensimismamiento. Todo eso contribuyó, pero saber a ciencia cierta qué fue lo que prendió la mecha es muy difícil, tan difícil como interpretar un sueño confuso. Y de verdad que ponerse a escribir novelas es un acto de optimismo radical: gasta uno muchos años en una quimera que podría terminar en la basura o totalmente ignorada. Y es un acto de optimismo porque el verdadero novelista cree que con cada obra cambiará al mundo y que cada obra será una obra de arte. Cada novela debe ser una apuesta total: de ahí la pasión absoluta, la obsesión feroz con que se han escrito las grandes obras.

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              Esa pasión convierte al novelista en un descendiente de Caín, como usted lo llama en una de las conferencias compiladas en “Poéticas y obsesiones”.

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                              La profesión del novelista casi obliga a la soledad, al aislamiento, al abandono de los papeles sociales aceptados y casi exigidos, obliga a menudo a traicionar ciertos secretos familiares o sociales, lo que lo convierte en una especie de antisocial, una entidad peligrosa, no sólo para sus parientes y amigos, sino para el establishment. Solamente hasta que doblegue la cerviz del poder y de la sociedad convencional en la que vive, mediante la fuerza de sus letras, logra ser aceptado y celebrado. Antes de eso el escritor es una especie de perro bajo la escalera. Y cuando llega el éxito, la aceptación y la celebración, generalmente el escritor baja la guardia y empieza a liberar productos mediocres, inacabados. Por eso es que al escritor le conviene más el fracaso que el éxito.

                                                                                                                              Por Ángel Castaño Guzmán

                                                                                                                              Ver todas las noticias
                                                                                                                              Read more!
                                                                                                                              Read more!
                                                                                                                              Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
                                                                                                                              Aceptar