Cerati y su cosmos

Al lado de la versión en lp de Fuerza natural, en su camerino, habrá un plasma de 42 pulgadas y un XBOX 360 en el que demostrará sus capacidades en el juego FIFA 2010. Así como tiene la sensibilidad para hacer un ejemplar en vinilo de un álbum publicado nueve años después del cambio de milenio y con toda la infraestructura digital a su servicio, Gustavo Cerati también puede deleitarse con los mayores adelantos tecnológicos para hacer que el tiempo pase más rápido entre un disco y el otro.

En esos momentos relajados, en los que se supera a sí mismo o compite hombro a hombro con la máquina, el artista argentino logra poner en claro su mente para gestar las canciones que lo han convertido en un referente sonoro para los melómanos rockeros contemporáneos. “Voy a mi estudio, escucho discos, grabo cosas y hago posibles melodías y armonías. Sin embargo, también descanso mucho, porque la única manera en la que puedo renovarme es tomando cierta distancia. Tengo épocas en las que no hago nada o hago cualquier cosa que no tenga que ver con la música y eso me renueva”, manifestó Cerati cuando le preguntaron por su proceso creativo para componer, producir y publicar Fuerza natural.

En estos años de digitalización de todo aquello que tenía el apellido análogo, su propuesta es que también existe ese formato de antaño llamado vinilo (por algunos denominado acetato) y no todo tiene que ser degradado de forma digital. Sin embargo, más que una iniciativa estética, es un acto de contrición para colaborarle al mundo dilatando su proceso de sordera anticipada.

 Este disco, que  Cerati está presentando por estos días en Colombia y cuyo concierto en Bogotá se realizará esta noche, tiene influencias claras del sonido de Electric Light Orchestra (ELO), pero también se asemeja a la propuesta inicial del rock argentino de la década del 70 y, por supuesto, exhibe pinceladas de sus propios discos que ahora tienen en este álbum otros empaques y un terreno inhóspito que el otrora vocalista de Soda Stereo visita de manera recurrente para conocerse mejor.

“Trato de ser lo más abierto posible a todos mis gustos musicales y a las cosas que me parece que pueden funcionar como paisajes. Veo el disco Fuerza natural como un viaje o un trayecto que me desplaza por diferentes lugares. Por eso es que por momentos es rockero y en otras oportunidades es folk. Además, hay campo, hay cosmos, psicodelia y algunas cosas infantiles. También hay amor y en este trabajo no hay mucho odio”, aseguró Gustavo Cerati, quien no es el único con ese apellido en figurar en este trabajo discográfico, pues su hijo, Benito, de 15 años, tuvo una destacada participación.

Los temas Déja Vu y Rapto han sido los más sonados de este registro musical que salió en octubre del año pasado. Un mes más tarde, Cerati comenzó la gira promocional en México y Argentina, y mayo se lo dedicará a Colombia y Venezuela, países en los que el nombre de Soda Stereo sigue marcando la actualidad de los sonidos del rock. El martes se presentó en Medellín y hoy llega a Bogotá para imponer un récord de fidelidad con su público, para mostrar su lp y, tal vez, perfeccionar sus destrezas en el juego FIFA 2010.

 Coliseo cubierto El Campín, a partir de las 7 de la noche. Informes y boletería: 593 6300 y www.tuboleta.com.

Al lado de la versión en lp de Fuerza natural, en su camerino, habrá un plasma de 42 pulgadas y un XBOX 360 en el que demostrará sus capacidades en el juego FIFA 2010. Así como tiene la sensibilidad para hacer un ejemplar en vinilo de un álbum publicado nueve años después del cambio de milenio y con toda la infraestructura digital a su servicio, Gustavo Cerati también puede deleitarse con los mayores adelantos tecnológicos para hacer que el tiempo pase más rápido entre un disco y el otro.

En esos momentos relajados, en los que se supera a sí mismo o compite hombro a hombro con la máquina, el artista argentino logra poner en claro su mente para gestar las canciones que lo han convertido en un referente sonoro para los melómanos rockeros contemporáneos. “Voy a mi estudio, escucho discos, grabo cosas y hago posibles melodías y armonías. Sin embargo, también descanso mucho, porque la única manera en la que puedo renovarme es tomando cierta distancia. Tengo épocas en las que no hago nada o hago cualquier cosa que no tenga que ver con la música y eso me renueva”, manifestó Cerati cuando le preguntaron por su proceso creativo para componer, producir y publicar Fuerza natural.

En estos años de digitalización de todo aquello que tenía el apellido análogo, su propuesta es que también existe ese formato de antaño llamado vinilo (por algunos denominado acetato) y no todo tiene que ser degradado de forma digital. Sin embargo, más que una iniciativa estética, es un acto de contrición para colaborarle al mundo dilatando su proceso de sordera anticipada.

 Este disco, que  Cerati está presentando por estos días en Colombia y cuyo concierto en Bogotá se realizará esta noche, tiene influencias claras del sonido de Electric Light Orchestra (ELO), pero también se asemeja a la propuesta inicial del rock argentino de la década del 70 y, por supuesto, exhibe pinceladas de sus propios discos que ahora tienen en este álbum otros empaques y un terreno inhóspito que el otrora vocalista de Soda Stereo visita de manera recurrente para conocerse mejor.

“Trato de ser lo más abierto posible a todos mis gustos musicales y a las cosas que me parece que pueden funcionar como paisajes. Veo el disco Fuerza natural como un viaje o un trayecto que me desplaza por diferentes lugares. Por eso es que por momentos es rockero y en otras oportunidades es folk. Además, hay campo, hay cosmos, psicodelia y algunas cosas infantiles. También hay amor y en este trabajo no hay mucho odio”, aseguró Gustavo Cerati, quien no es el único con ese apellido en figurar en este trabajo discográfico, pues su hijo, Benito, de 15 años, tuvo una destacada participación.

Los temas Déja Vu y Rapto han sido los más sonados de este registro musical que salió en octubre del año pasado. Un mes más tarde, Cerati comenzó la gira promocional en México y Argentina, y mayo se lo dedicará a Colombia y Venezuela, países en los que el nombre de Soda Stereo sigue marcando la actualidad de los sonidos del rock. El martes se presentó en Medellín y hoy llega a Bogotá para imponer un récord de fidelidad con su público, para mostrar su lp y, tal vez, perfeccionar sus destrezas en el juego FIFA 2010.

 Coliseo cubierto El Campín, a partir de las 7 de la noche. Informes y boletería: 593 6300 y www.tuboleta.com.