Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.

“Delirio”, de Laura Restrepo, salta del papel a la pantalla de Netflix

Desde este 18 de julio está disponible la serie basada en una de las novelas más aclamadas de esta autora colombiana. Aquí una mirada a esa transmutación a la que se enfrentaron los encargados de esta producción y lo que implicó para su autora darle una nueva vida a la historia de Aguilar y Agustina.

Santiago Gómez Cubillos

18 de julio de 2025 - 09:00 a. m.
Estefanía Piñeres y Juan Pablo Raba intrepretan a Agustina y a Aguilar en la serie “Delirio”.
Foto: Pablo Arellano / Netflix - Pablo Arellano / Netflix
PUBLICIDAD

Siempre que surge en el cine o la televisión una nueva adaptación literaria ronda la idea de compararla con su original. Algunos puristas afirman que una obra audiovisual jamás podrá capturar lo que ya tan elocuentemente se creó con tinta. Incluso hay quienes se cierran por completo a la posibilidad de conmoverse nuevamente con la historia que los enamoró en el papel. Pero esto no ha representado un impedimento para una industria cuya fuente de inspiración siempre ha sido la literatura. Hoy le toca pasar al tablero a “Delirio”, la aclamada novela de Laura Restrepo, ganadora del premio Alfaguara en 2004.

Gánale la carrera a la desinformación NO TE QUEDES CON LAS GANAS DE LEER ESTE ARTÍCULO

¿Ya tienes una cuenta? Inicia sesión para continuar

Para semejante hazaña, el equipo de Netflix volteó hacia la primera persona que podría darles luces sobre por dónde empezar a desenmarañar esta trama, pero ella no aceptó. “Siempre he pensado que, en estos casos, el escritor es como una piedra en el zapato, porque dice cosas como: ‘¿Por qué me quitaste esto?’, ‘¿Por qué me pusiste aquello?’, ‘Ay, quitaste lo más lindo que había puesto’. Así que, con absoluta confianza en Andrés (Burgos) y Verónica (Triana), dejé que me sorprendieran”, afirmó la autora durante un conversatorio, refiriéndose a los guionistas y “showrunners” de esta producción televisiva que está disponible desde hoy en la plataforma.

Laura Restrepo es autora de otras novelas como "Leopardo al sol", "Hot sur" y "Dulce compañía". Su último libro, publicado este 2025, fue "Soy la daga y soy la herida".
Foto: Juan Sebastián Pinilla / Netflix

Fue con este aval que el equipo asumió la tarea de crear una serie que recreara el ascenso y la caída de Midas McAlister, la pérdida de la razón de Nicolás Portulinus en los paisajes cálidos de Sasaima, la violenta relación del Bichi y su padre, y, por supuesto, la caótica historia de amor de Agustina y Aguilar. Todo esto en una Colombia sometida por el miedo de los años ochenta. Una sociedad de locos que parecía, todo el tiempo, estar al borde de la cornisa, mirando constantemente al abismo de la locura.

Estefanía Piñeres y Juan Pablo Raba fueron los encargados de darles carne y hueso a los protagonistas de esta historia, que están todo el tiempo transitando una línea entre la cordura y el delirio. Para el actor, aceptar lidiar con alguien que parece haber perdido el sentido es parte de la esencia de su personaje. “A él, su parte racional le dice que no tiene por qué quedarse, pero le puede más el amor. A Aguilar le puede más el compromiso que tiene con Agustina, y lo que quería mostrar era cómo una persona puede abandonarse (en el buen sentido de la palabra) con el fin de apoyar y proteger a quien ama”.

Read more!

Por otro lado, el reto para Piñeres fue ponerse en la piel de quien ha perdido contacto con el mundo que la rodea. “Ella es una mujer volátil y espontánea, que eso es algo que me parece muy bello de su delirio. No tiene un juicio sobre sus acciones, sino que se deja llevar por sus impulsos sin ser mediada por una máscara social. Eso era lo que quería tratar de capturar del libro para ponerlo en escena”.

Ahora, una cosa es describirlo y otra hacerlo, sentirlo. Y ser capaz de dejarse llevar durante el rodaje fue uno de los retos que ella tuvo que afrontar en su interpretación. “Creo que eso es lo más lindo de actuar, que es una cosa profundamente visceral. Uno puede hacer un trabajo de mesa y anotar un montón de cosas en el guion, pero luego, en escena, aparecen cosas, y el desafío es no atajarlas, sobre todo con un personaje como Agustina”, afirmó la actriz.

Read more!
En la novela, la historia de Agustina y Aguilar se entrelaza constantemente con la de otros miembros y allegados de la familia Londoño.
Foto: Courtesy of Netflix / Netflix - Cortesía Netflix

El trabajo psicoanalítico sobre cada uno de los personajes fue clave para poder contar esta historia, pero no bastaba únicamente con tener una representación fiel de ellos. La novela de Laura Restrepo es caótica, polifónica y dispersa. Se deja llevar como un río sin cauce a través de los diferentes puntos de vista que la componen y recorre sin intermitencias diálogos, pensamientos y alucinaciones de personajes y narradores en constante movimiento. ¿Cómo trasladar esto a la pantalla? Esa fue una pregunta que tuvieron que hacerse los guionistas, pues se trataba de un elemento insoslayable de la obra.

“Nuestra primera tarea fue sentarnos a ordenar para luego pensar en cómo desordenarla”, relató Burgos durante el conversatorio. “Lo temporal de la novela no se podía aplicar directamente al audiovisual, pero nosotros queríamos tener nuestro propio desorden. Así fue como llegamos a una estructura, que fue la que rodamos, aunque después tuvimos que frenar en seco y desbaratarla otra vez”. En ese proceso de prueba y error lograron concebir una serie en la que la historia salta todo el tiempo sin previo aviso, pero que lentamente va armando ese gran rompecabezas que es la historia de la familia Londoño.

¿Es suficiente? ¿Podemos decir que todo este esfuerzo hace que se trate de dos obras comparables entre sí? Como sucede normalmente en el arte, estas no son preguntas con una respuesta definitiva. Lo que sí es claro es que la intención nunca fue crear una copia, sino un animal distinto, que tuviese su propio aliento, su propia vida. “Los lenguajes son de naturalezas radicalmente distintas y cada uno tiene su propia belleza, pero en lo que sí estuvo muy comprometido el equipo fue en respetar y enaltecer el espíritu de la novela”, opinó Piñeres.

Laura Restrepo no mostró un ápice de arrepentimiento con respecto a su decisión de mantenerse al margen. Al contrario, consideró que el hecho de que ahora las personas pudiesen encontrarse con sus personajes a través de una pantalla era una muestra de apertura en el arte. “La cultura es colectiva y es universal. No es propiedad privada, porque la hacemos entre todos. Está en el acto individual del creador que se encierra a hacer una vaina, pero también en quienes lo retoman, lo reinterpretan y lo rehacen. Eso es lo que la mantiene viva”, concluyó la autora.

No ad for you
Delirio | Tráiler oficial | Netflix

Por Santiago Gómez Cubillos

Periodista apasionado por los libros y la música. En El Magazín Cultural se especializa en el manejo de temas sobre literatura.@SantiagoGomez98sgomez@elespectador.com
Conoce más

Temas recomendados:

Ver todas las noticias
Read more!
Read more!
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.