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´En el periodismo habita la duda, en el activismo no´

“Mutante” ganó el Premio Rey de España de Periodismo a Medio de Comunicación Iberoamericano. Juan Camilo Maldonado, uno de sus cofundadores, habló de lo que significa este reconocimiento.

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Samuel Sosa Velandia
02 de marzo de 2024 - 02:00 p. m.
Juan Camilo Maldonado es periodista y politólogo de la Universidad Javeriana, máster en Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Salamanca.
Juan Camilo Maldonado es periodista y politólogo de la Universidad Javeriana, máster en Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Salamanca.
Foto: El Espectador
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¿Cómo se enteraron de que eran los ganadores?

Fue un momento muy confuso porque no pudieron avisarnos que éramos los ganadores, ya que nunca lograron contactarse con la gestora de proyectos, Ana María Betancourt, quien fue la que aplicó a nombre de Mutante. Nos enteramos fue gracias a una publicación de Twitter. Yo estaba en una reunión con Nicolás Vallejo, uno de los cofundadores del medio, y en ese momento recibí varias llamadas de Juliana Zárate, otra de las fundadoras. Ella me dijo que mirara el chat de WhatsApp y ahí estaba la publicación con el anuncio, el cual le mostré a Vallejo, y no podíamos creerlo; pensábamos que se habían confundido. Por eso estamos en shock y muy conmovidos porque es como un abrazo a todo el proceso, que ha sido riguroso y colectivo.

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¿Qué representa este premio para usted?

Por encima de todo, este es un premio colectivo y un reconocimiento al espíritu de las personas a quienes desde hace tiempo nos incomodaban las prácticas del periodismo tradicional, que resulta en una labor orientada hacia los problemas, alejada de las audiencias y que dice verdades al público, pero no los escucha. Además, con unas relaciones desiguales de poder o muy cercano a las instituciones y los grandes órganos económicos, que reproduce las estructuras de injusticia social y de género. Por eso, este premio es para mí una recompensa a la rebeldía, a la decisión de declararnos como una disidencia y una crítica a eso que no nos gusta del mundo o del periodismo.

El año pasado este premio también lo ganó un medio independiente colombiano. ¿Cree que esto puede ser un llamado de reflexión para los medios tradicionales?

Sí, el hecho de que Cuestión Pública y nosotros hayamos ganado este premio es prueba de que el ecosistema de medios independientes en Colombia es vibrante, solidario y reflexivo. A nosotros nos motivó a aplicar que el año pasado este medio nacional hubiese sido reconocido. Igualmente, desde hace tiempo los medios autogestionados nos hemos acompañado, en espacios como la Liga Contra el Silencio, en donde no estamos pensando en competir, sino en construir una comunidad de intercambio de saberes y que se apoya. Eso ha llenado un vacío que han dejado los medios tradicionales a los que, por muchas razones, les cuesta proponer agendas críticas o con otro tipo de formatos más flexibles y livianos.

Hablemos sobre “Mutante”, ¿cuáles fueron sus motivaciones para crearlo?

Cuando trabajábamos en otros medios, nos dimos cuenta de que era difícil hacer un periodismo crítico en un contexto de transformación tecnológica y de crisis del modelo de negocio, lo cual nos motivó a crear este proyecto en el que buscamos la conversación social y el trabajo colectivo. Asimismo, nos motivó el plebiscito por la paz y el proceso que se estaba dando en La Habana, pues en ese momento trabajábamos con Nicolás Vallejo en Pacifista y nos dimos cuenta de que el periodismo contemporáneo permitía acompañar un movimiento social por la paz, así como trazar una agenda por los derechos humanos, la justicia social, de género y del ambiente.

¿Es decir que además de ser un medio, también son un vehículo de activismo y de defensa de ideales?

Nosotros tenemos claro que somos periodistas y no activistas. Lo que pasa es que con nuestro oficio, en el que creemos en la defensa de los derechos humanos como marco del quehacer, estamos fomentando la conversación y la participación del público. De igual manera, tenemos la convicción de que los problemas del mundo son complejos y que en esa complejidad necesitamos más preguntas que certezas y hoy en día el periodismo se ha dedicado a la opinión en vez de darles lugar a los cuestionamientos, que pueden tener múltiples respuestas de diversas experiencias, que incluso llegan a desafiar nuestros propios sesgos. En el activismo no habita la duda, en cambio, eso es lo que sí debe caracterizar al periodismo.

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¿Entonces cree que el periodismo debe incluir algo pedagógico?

Sí, es un proceso de construcción colectiva de aprendizaje y conocimiento, que luego puede ser utilizado por activistas, por una entidad, por una universidad o por una organización civil, pues con nuestra labor estamos construyendo soluciones informativas que activan procesos de cambio, que no es activismo.

¿Qué significa el periodismo para usted?

El periodismo es el único oficio que invita a sus profesionales a hacerse preguntas incómodas y difíciles de responder. Esta labor permite que nos cuestionemos sin estar controlados por ningún tipo de poder y más bien hacer un proceso guiado por la conciencia y la ética periodística para ir y encontrar las respuestas a través de la escucha y la contrastación de la información y las opiniones. A partir de esa verificación se le pueden dar al público las conclusiones más precisas posibles, de tal manera que ellos también puedan seguir ofreciendo sus propias interpretaciones y contribuyendo a ese proceso permanente de construcción de una verdad que es muy compleja y cambiante.

¿Y hay algo que lo confronte de este oficio?

Me cuestionan muchísimo las burbujas epistémicas en las que estamos habitando y las cámaras de eco en donde cada uno está convencido de su verdad y desde ese convencimiento se es hostil frente a las otras perspectivas. Pienso mucho en cómo construir un piso común que sea a su vez crítico, avance en la defensa de los derechos humanos y sea más amoroso y respetuoso de la libertad individual. Creo que estamos viviendo unos tiempos en los que nos cuesta trabajo conversar con el que piensa distinto.

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Samuel Sosa Velandia

Por Samuel Sosa Velandia

Comunicador social y periodista de la Universidad Externado de Colombia. Apasionado por las historias entrelazadas con la cultura, los movimientos sociales y artísticos contemporáneos y la diversidad sexual. Además, bailarín de danza folclórica en formación.@sasasosavssosa@elespectador.com
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Jahir(13183)02 de marzo de 2024 - 09:10 p. m.
Actualmente el periodismo tiene más corazón que razón. Los medios no se pueden ir contra las orientaciones del dueño. Todo el país cayó en esta absurda orientación. Los médicos para ingresar a la EPS. Los abogados para el Ministerio de Justicia. Los maestros para el Min. Educación. Solo falta que la iglesia publique la orientación de los curas.
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