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No es posible despertar a la conciencia sin dolor. La gente es capaz de hacer cualquier cosa,
por absurda que parezca, para evitar enfrentarse a su propia alma.
Nadie se ilumina fantaseando figuras de luz, sino haciendo consciente su oscuridad.
CARL GUSTAV JUNG
Después de hacerlo durante mucho tiempo
hoy por primera vez al pararme de la silla,
hago conciencia de tu foto detrás de mi pc
y en ella misma vislumbro la justificación.
Justificación que para nada radica en la gratuidad
sino en el apoyo y en el agradecimiento constantes
en la urgencia de expresar los afectos recíprocos
tan inusuales en tiempos de egoísmo y mezquindad.
En los que resulta anómalo vivir pendiente del otro
y muy aceptable desentenderse por completo de él
como quien abandona una hormiga a su suerte
sin pensar en los efectos de la debacle ambiental.
Pero no vine a quejarme de ti ni tampoco del planeta
más bien del dolor que me aqueja por tu ausencia
que no por temporal deja de ser tortuosa/estresante
sino que por contraste pincha como un puto abejorro.
Y al intentar librarme de él se me viene todo encima
por sobre cualquier asunto el recuerdo de Valentina
que hace a lo demás palidecer y a ti ponerte rojo
aunque sabes que no he querido defraudarte jamás.
Así que con la corona de espinas en la piel y la cabeza
sin ser el rey del abandono ni el príncipe de la culpa
en medio de pensamientos rotos y de sueños por reparar
busco la forma de no decepcionarte así lo haya hecho ya.
Aunque sé que al filo del tiempo los sentimientos se van
intento retenerlos para bien tuyo y por mi bienestar aquí
esperando ya sea infructuosamente te acerques un poco
para que la maleta de tu padre no deba buscarte con afán.
Así como una picota espera al que azuza a odios inútiles
y otra a quien no dice la verdad u oculta lo que sabe
he querido plasmar lo que siento incluso sopesando
tanto la inutilidad del arte como la validez del esfuerzo.
Aun sabiendo imposible poder empezar de nuevo e igual
mantenerme sin ayuda de nadie a diez mil millas de acá
me alegra que al ser consciente de tu foto detrás del pc
en la ruta de los mutuos afectos su justificación surja total.
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Bogotá, 20 agosto 2020
A Santiago, hijo adorado, en su trigésimo primer natalicio.
*(Bogotá, Colombia, 1957) Padre de Santiago & Valentina. Escritor, periodista, crítico literario, de cine y de jazz, catedrático, conferencista, corrector de estilo, traductor y, por encima de todo, lector. Colaborador de El Magazín de EE, desde 2012, y columnista, desde el 23/mar/2018. Corresponsal de revista Matérika, Costa Rica. Su libro Ocho minutos y otros cuentos, Colección 50 libros de Cuento Colombiano Contemporáneo, fue lanzado en la XXX FILBO (Pijao Eds., 2017). Mención de Honor por Martin Luther King: Todo cambio personal/interior hace progresar al mundo, en el XV Premio Int. de Ensayo Pensar a Contracorriente, La Habana, Cuba (2018). Invitado por UFES, Vitória, Brasil, al III Congreso Int. Literatura y Revolución – El estatuto (contra)colonial de la Humanidad (29-30/oct/2019). Autor, traductor y coautor, con Luis E. Soares, en portal Rebelión. E-mail: lucasmusar@yahoo.com