Gustavo Dudamel: “Nada justifica el derramamiento de sangre de los venezolanos”

La Sinfónica Simón Bolívar había cancelado la gira prevista en Bogotá que tendría lugar del 24 al 31 de julio en el Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo y que buscaba apoyar la causa benéfica de la Fundación Cardioinfantil de Bogotá.  En su texto, publicado en el New York Times y el diario El País, después de dos días del comunicado que anunciaba la cancelación del viaje a la capital colombiana, Dudamel recuerda a sus compatriotas: “Tenía que hablar porque los venezolanos están desesperados porque se reconozcan sus derechos fundamentales y se cumplan sus necesidades básicas. Esta extrema confrontación y polarización es un obstáculo para llegar al entendimiento y la coexistencia pacífica y democrática, y eso no se puede permitir. Nada justifica el derramamiento de sangre de mis conciudadanos”.

Por la muerte del violinista Armando Cañizales, propiciado por las fuerzas de seguridad venezolanas, el director Gustavo Dudamel se pronunció por primera vez contra la violencia y la represión de su país.

Dudamel subraya el rechazo que se vio en las urnas el domingo en la propuesta de convocatoria del gobierno, aclarando que “los venezolanos aún no nos hemos podido manifestar públicamente a través de una consulta popular previa y vinculante. La voluntad del pueblo debe poder expresarse libremente por medio de los canales institucionales establecidos en nuestra constitución nacional”.

Reconoce con angustia que ahora el país está pasando por un momento crucial y en el texto publicado apunta: “Mi país vive momentos oscuros y complicados, recorre un peligroso camino que nos lleva inevitablemente a la ruptura de nuestras más profundas tradiciones republicanas”.

Antes de esta publicación, el director afirma que no había querido tomar partido, pero dada las situaciones admite en su texto el porqué de sus palabras: "En el pasado he resistido el impulso de entrar al discurso político, pensando que ese no era mi papel. No busco tomar partido, estoy dispuesto a poner la cara. Para mí esto es sobre los valores y procesos que escogen nuestro liderazgo político, no sobre quien, en últimas, sea ese líder". 

Terminando su texto le deja unas palabras de aliento a su país. “Los venezolanos necesitamos de estos momentos de esperanza para poder recuperar al fin la armonía que tanto anhelamos. Porque tener la voluntad de encontrar soluciones significa generar esperanza, significa creer en un proyecto colectivo, plural e integrador de país, significa creer en un futuro mejor para nuestros hijos. Tener voluntad de encontrar soluciones significa, en última instancia, creer en una Venezuela democrática, pacífica y alineada en la búsqueda de mejores condiciones de vida para todos y todas.”

La Sinfónica Simón Bolívar había cancelado la gira prevista en Bogotá que tendría lugar del 24 al 31 de julio en el Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo y que buscaba apoyar la causa benéfica de la Fundación Cardioinfantil de Bogotá.  En su texto, publicado en el New York Times y el diario El País, después de dos días del comunicado que anunciaba la cancelación del viaje a la capital colombiana, Dudamel recuerda a sus compatriotas: “Tenía que hablar porque los venezolanos están desesperados porque se reconozcan sus derechos fundamentales y se cumplan sus necesidades básicas. Esta extrema confrontación y polarización es un obstáculo para llegar al entendimiento y la coexistencia pacífica y democrática, y eso no se puede permitir. Nada justifica el derramamiento de sangre de mis conciudadanos”.

Por la muerte del violinista Armando Cañizales, propiciado por las fuerzas de seguridad venezolanas, el director Gustavo Dudamel se pronunció por primera vez contra la violencia y la represión de su país.

Dudamel subraya el rechazo que se vio en las urnas el domingo en la propuesta de convocatoria del gobierno, aclarando que “los venezolanos aún no nos hemos podido manifestar públicamente a través de una consulta popular previa y vinculante. La voluntad del pueblo debe poder expresarse libremente por medio de los canales institucionales establecidos en nuestra constitución nacional”.

Reconoce con angustia que ahora el país está pasando por un momento crucial y en el texto publicado apunta: “Mi país vive momentos oscuros y complicados, recorre un peligroso camino que nos lleva inevitablemente a la ruptura de nuestras más profundas tradiciones republicanas”.

Antes de esta publicación, el director afirma que no había querido tomar partido, pero dada las situaciones admite en su texto el porqué de sus palabras: "En el pasado he resistido el impulso de entrar al discurso político, pensando que ese no era mi papel. No busco tomar partido, estoy dispuesto a poner la cara. Para mí esto es sobre los valores y procesos que escogen nuestro liderazgo político, no sobre quien, en últimas, sea ese líder". 

Terminando su texto le deja unas palabras de aliento a su país. “Los venezolanos necesitamos de estos momentos de esperanza para poder recuperar al fin la armonía que tanto anhelamos. Porque tener la voluntad de encontrar soluciones significa generar esperanza, significa creer en un proyecto colectivo, plural e integrador de país, significa creer en un futuro mejor para nuestros hijos. Tener voluntad de encontrar soluciones significa, en última instancia, creer en una Venezuela democrática, pacífica y alineada en la búsqueda de mejores condiciones de vida para todos y todas.”