
Karl Jaspers, Albert Camus y Hannah Arendt fueron algunos de los que se pronunciaron sobre los bombardeos en Japón en 1945.
Foto: Diana Camacho
Agosto de 1945. Hiroshima y Nagasaki reducidas a cenizas. Cuerpos que se volvieron sombras, manchas en el piso donde alguna vez pulsó la vida. Y mientras se contaban los muertos y los vidrios rotos, el resto del mundo quedó con una nueva realidad en las manos.
Han pasado 80 años desde que “Little Boy” y “Fat Man” cobraron la vida de más de 200.000 personas en Japón. Fue en ese panorama que el pensamiento filosófico tuvo que enfrentarse a un nuevo desafío. La materialización de nuestro suicidio colectivo resonó directamente con un...

Por Santiago Gómez Cubillos
Periodista apasionado por los libros y la música. En El Magazín Cultural se especializa en el manejo de temas sobre literatura.@SantiagoGomez98sgomez@elespectador.com
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