La construcción del pensamiento ambiental: el lugar de la academia

El pasado 6 de junio, el grupo de investigación de Derechos Colectivos y Ambientales de la Universidad Nacional de Colombia convocó a líderes ambientales, académicos y otros activistas ambientales del país para rendir homenaje.  Además, se realizó el lanzamiento de cinco publicaciones académicas.

Sigue a El Espectador en Discover: los temas que te gustan, directo y al instante.
Nancy Paola Moreno Delgadillo @cronopiab
08 de junio de 2019 - 09:38 p. m.
Gregorio Mesa, para quien "La idea de la paz debe ser ambiental o no lo es; es decir, es una paz que no solo implica 'acallar los fusiles', sino primordialmente, resolver por problemas asociados a la injusticia ambiental".  / Agencia de Noticias Universidad Nacional
Gregorio Mesa, para quien "La idea de la paz debe ser ambiental o no lo es; es decir, es una paz que no solo implica 'acallar los fusiles', sino primordialmente, resolver por problemas asociados a la injusticia ambiental". / Agencia de Noticias Universidad Nacional
Resume e infórmame rápido

Escucha este artículo

Audio generado con IA de Google

0:00

/

0:00

“Son miles de millones de personas que luchan diariamente por estos derechos como la vida, oxígeno, defienden los ecosistemas, agua mar, ríos, ciénagas, las madreselvas. La naturaleza tienes unos derechos como las cosmovisiones indígenas, afros, campesinas. Esta es una lucha contra megaproyectos, minería o acumulación de tierras. Por eso todos los asesinatos de líderes nos duelen en el alma, destruyen un espacio comunitario. La academia debe estar vinculada con los movimientos sociales porque permite el crecimiento del pensamiento político y transformador de la historia”.

Edilia Mendoza Rozo

 

Dicen que don Edilberto Cantillo Meza acostumbraba visitar las orillas de la quebrada Copey (Cesar) para evocar aquellos días en que el Bloque Norte de las Auc desplazó a su comunidad. Recordó a don Temístocles Machado, Yoryanis Isabel Bernal, Ruth Alicia López y a cientos de defensores ambientales y líderes sociales.

Si está interesado en leer el especial Ese loco juego de escribir, ingrese acá: Rainer Maria Rilke, la pureza poética

A todos los asesinaron y los que sobreviven intentan escapar a la muerte. Insisten en que el agua, la tierra y otras especies también guardan la memoria de todas sus luchas. Con esta galería de la memoria inició el evento del pasado jueves 6 de junio. Su organización estuvo a cargo del grupo de investigación de Derechos Colectivos y Ambientales (GIDCA) de la Universidad Nacional de Colombia. 

“Hemos insistido en la necesidad de identificar, analizar y comprender las dinámicas de la conflictividad en Colombia, Latinoamérica y el mundo, por ello, un eje de análisis en GIDCA es el análisis jurídico político, social y cultural de la conflictividad ambiental. Estos libros son el resultado del último período de investigación 2016-2017”, dice  Gregorio Mesa, profesor asociado de la Universidad Nacional de Colombia y director del grupo.

Los libros a los que se refiere son: 1) Derechos Ambientales, conflictividad y paz ambiental. 2) Estándar ambiental y derechos Ambientales en Post Acuerdo de Paz: algunos estudios de caso. 3) Derechos Ambientales en perspectiva de integralidad: concepto y fundamento de nuevas demandas y resistencias actuales hacia el Estado Ambiental de Derecho. 4) Una Idea de Justicia Ambiental. 5) Ambientalismo Popular.

Si está interesado en leer otra nota de este especial, ingrese acá: George Orwell: "Yo por qué escribo"

Para el reconocido investigador y ambientalista Julio Carrizosa, otro de los homenajeados del evento, son fundamentales estos espacios académicos puesto que el derecho y las ciencias económicas deben avanzar en nuevas discusiones para entender otra forma de relación con la naturaleza, como la filosofía del Buen Vivir. 

En entrevista para El Espectador el investigador y docente Gregorio Mesa respondió algunas preguntas sobre el propósito de las publicaciones y los horizontes del pensamiento ambiental.

¿Cuáles considera que son los nuevos elementos que aportan estos libros para la comprensión ambiental del país? 

La idea de que la paz debe ser ambiental o no lo es; es decir, es una paz que no solo implica "acallar los fusiles", sino primordialmente, resolver por problemas asociados a la injusticia ambiental, que es en todo caso, injusticia con la naturaleza (los ecosistemas, los ríos, los bosques, la fauna silvestre, la Madre Tierra o el ambiente en general) e injusticia con los seres humanos, especialmente, aquellos que menos pueden y menos tienen la posibilidad de acceder con dignidad al ambiente.

¿Qué lugar ocupa la noción de desarrollo en estas discusiones?  

Destacamos el maldesarrollo, ya que desarrollo en sentido abstracto no existe; destacamos cómo la economía verde (formulada y agenciada por Naciones Unidas desde 2012) profundiza las inequidades e injusticias ambientales (tal como lo hizo el "desarrollo sostenible" desde Río 1992 o "ecodesarrollo" en Estocolmo 72, que fueron esencialmente el tinte verde del que se vistió el capital, sin resolver los conflictos y problemas ambientales.

¿Por qué hablar de conflictividad ambiental? 

Claro que es muy pertinente hablar de conflictividad ambiental, porque queremos poner el énfasis en una matriz más amplia de existencia de acciones humanas injustas, inadecuadas, además de ilegítimas e inconstitucionales de apropiarse injustamente de la naturaleza, afectando a otros, a muchos o a todos los humanos presentes y futuros y de otras especies; es decir, no es solo mirar separada y sectorialmente lo que sucede en una localidad, región, nación o el globo, sino una mirada integral, sistémica y global que permita comprender qué está pasando realmente en el mundo, cuáles son sus causas y sus consecuencias y qué hacer para resolver tal conflictividad.

¿Qué podríamos decirle a aquellos colombianos distantes a estas discusiones sobre el ambientalismo?

No creo que las vean tan lejanas, son cotidianas, lo que pasa,  en una primera dimensión, es que justamente se quiere hacer lejana pero está más cerca de los individuos, pueblos, comunidades y sociedades que viven cotidianamente el hambre, el desplazamiento, la contaminación y las afectaciones generalizadas al ambiente o específicas a cada uno de sus ecosistemas. Segundo, un sector del empresariado y de la academia, hace creer que esto no está pasando en el país de la mayor diversidad natural y cultural, que es algo que pasa en otras latitudes, eso es no mirar la viga en los ojos de este país.

¿Cuál es el lugar de la academia en la producción crítica de conocimiento sobre estos temas?

Un lugar principal para conocer, reconocer, denunciar, compartir y movilizar con otras y otros pensamiento alterno crítico frente a las teorías negacionistas desde otras pseudoacademias. Este es un reconocimiento a quienes defienden sus territorios, sus ecosistemas, sus culturas, su forma de ser, estar, vivir y convivir con otros y con la naturaleza.

 

Por Nancy Paola Moreno Delgadillo @cronopiab

Conoce más

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscríbete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.