Además de ir reclutando fanáticos, los integrantes de Zoé van por el mundo coleccionando juguetes. En cada puerto que su agenda les da la oportunidad de pisar, visitan anticuarios, jugueterías y todo lugar que pueda tener cosas aptas para producir sonidos. Y en esta constante faceta investigativa han encontrado que los objetos más versátiles son aquellos fabricados durante las décadas del 70 y 80.
En sus bodegas particulares, sus casas y lugares de encuentro para realizar sus apuestas musicales, ya no caben estos entes sin cariño que algún ser humano desechó sin sospechar que eso que un día arrojó a la caneca podría tener un devenir vinculado con el arte. Todos estos objetos y juguetes viejos adquieren protagonismo durante las jornadas de grabación porque el cantante León Larregui, el guitarrista Sergio Acosta, el bajista Ángel Mosqueda, el teclista Jesús Báez y el baterista Rodrigo Guardiola tienen, de un tiempo para acá, la sana costumbre de emplear sonidos poco tradicionales para ampliar el espectro de sus discos y han conseguido un estilo sin par en América Latina.
Dentro de sus últimas adquisiciones está una colección de diminutos teclados Casio, que para los integrantes de la banda Zoé se pueden considerar como los primeros samplers en la historia de la música. Sin embargo, por su misma condición eléctrica, debieron ser guardados para la realización de su Unplugged, su más reciente registro.
“Desde el año pasado estamos trabajando en el siguiente disco, pero se nos cruzó el Unplugged y entendimos que eso nos puede ayudar mucho para consolidar nuestra carrera. Seguramente en marzo de 2012 sacaremos el nuevo registro”, comenta León Larregui, líder de Zoé, banda sobre la cual MTV aseveró que tenía chance de hacer 14 canciones para emplear tan sólo nueve en una inolvidable velada desconectada que quedaría para la posteridad.
Un compromiso tal merecía una reunión seria de todos los integrantes. Hablaron. Discutieron. Pelearon para la selección y el sentido común los llevó a la elección de las que más le gustaban al público, pero también los condujo a readoptar una canción que tan sólo apareció en la banda sonora de la película Amarte duele. Después de varios años de olvido redescubrieron Soñé y el impacto fue tal que los llevó a postularla como sencillo de su álbum desconectado, en el que intervienen artistas de la talla de Enrique Bunbury, Chetes y Adrian Dargelos.
En abril la banda Zoé participará en el Festival Estéreo Picnic 2011, donde además de presentar algunas versiones de su Unplugged y dar pinceladas de sus registros anteriores, sus integrantes aprovecharán para hacer mercado de antigüedades y juguetes en desuso.
Por Juan Carlos Piedrahíta B.
