Pandemonium, la capital del infierno
Comenzamos con una serie de ciudades imaginarias a propósito de la Feria del Libro que comienza mañana.
Redacción Cultura
Macondo, el pueblo creado por Gabriel García Márquez, es el país invitado de la edición de este año de la Feria del Libro de Bogotá, que comienza hoy e irá hasta el 4 de mayo. Con el propósito de recordar los mundos literarios, El Espectador recorrerá desde hoy y hasta el domingo seis ciudades imaginadas por diversos escritores.
La primera entrega está dedicada a Pandemonium, la capital del infierno que creó John Milton en su extenso poema El paraíso perdido. Luego vendrán, en este orden, el condado de Yoknapatawpha de William Faulkner, las tierras inhóspitas de Los viajes de Gulliver, Santa María de Juan Carlos Onetti, el País de las Maravillas de Lewis Carroll y Macondo de García Márquez. Cada ciudad tendrá su historia, su posible geografía, una descripción de sus habitantes y una mirada a su importancia en el trabajo literario de cada escritor. La próxima semana podrá encontrar en nuestra web una infografía interactiva con todas estas creaciones literarias.
Ciudades imaginarias
Es la capital del infierno en El paraíso perdido de John Milton, un poema épico publicado en 1667 y la obra más reconocida de uno de los más destacados poetas ingleses de ese siglo. Escrita, según Milton, para “justificar las maneras de Dios hacia los hombres”, esta obra presenta una ciudad regida por Satán y sus militantes, erigida por el arquitecto Mulciber, otrora creador de palacios en el cielo. Mammon, una figura que representa la avaricia y la excesiva abundancia, es quien sugiere a Satán crear la ciudad. Fue construida en una hora y no se ajustaba al tamaño de los demonios —ángeles caídos—, de modo que tuvieron que disminuir su figura para caber en ella. En la ciudad existen templos y campos abiertos, aunque la atención de su población está centrada en la corte infernal, que se reúne siempre en un salón con el trono de Satanás determinando el retrato. Las puertas del infierno definen los límites del lugar, que está separado del cielo “por un gran abismo”.
***
Inspirada en:
Las descripciones bíblicas y los sucesos del Génesis.
Población:
Indeterminada. Huestes y legiones de miles de demonios.
1874 fue el año en que el artista francés Gustave Doré creó una serie de ilustraciones con base en pasajes y personajes del libro, entre ellos Satanás y su caída.
Macondo, el pueblo creado por Gabriel García Márquez, es el país invitado de la edición de este año de la Feria del Libro de Bogotá, que comienza hoy e irá hasta el 4 de mayo. Con el propósito de recordar los mundos literarios, El Espectador recorrerá desde hoy y hasta el domingo seis ciudades imaginadas por diversos escritores.
La primera entrega está dedicada a Pandemonium, la capital del infierno que creó John Milton en su extenso poema El paraíso perdido. Luego vendrán, en este orden, el condado de Yoknapatawpha de William Faulkner, las tierras inhóspitas de Los viajes de Gulliver, Santa María de Juan Carlos Onetti, el País de las Maravillas de Lewis Carroll y Macondo de García Márquez. Cada ciudad tendrá su historia, su posible geografía, una descripción de sus habitantes y una mirada a su importancia en el trabajo literario de cada escritor. La próxima semana podrá encontrar en nuestra web una infografía interactiva con todas estas creaciones literarias.
Ciudades imaginarias
Es la capital del infierno en El paraíso perdido de John Milton, un poema épico publicado en 1667 y la obra más reconocida de uno de los más destacados poetas ingleses de ese siglo. Escrita, según Milton, para “justificar las maneras de Dios hacia los hombres”, esta obra presenta una ciudad regida por Satán y sus militantes, erigida por el arquitecto Mulciber, otrora creador de palacios en el cielo. Mammon, una figura que representa la avaricia y la excesiva abundancia, es quien sugiere a Satán crear la ciudad. Fue construida en una hora y no se ajustaba al tamaño de los demonios —ángeles caídos—, de modo que tuvieron que disminuir su figura para caber en ella. En la ciudad existen templos y campos abiertos, aunque la atención de su población está centrada en la corte infernal, que se reúne siempre en un salón con el trono de Satanás determinando el retrato. Las puertas del infierno definen los límites del lugar, que está separado del cielo “por un gran abismo”.
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Inspirada en:
Las descripciones bíblicas y los sucesos del Génesis.
Población:
Indeterminada. Huestes y legiones de miles de demonios.
1874 fue el año en que el artista francés Gustave Doré creó una serie de ilustraciones con base en pasajes y personajes del libro, entre ellos Satanás y su caída.