Una muestra reúne a cuatro exponentes del arte cubano actual en La Habana

Una muestra reúne desde este viernes en La Habana las obras de cuatro de los exponentes fundamentales del arte contemporáneo cubano, la mayoría trabajos de creación reciente de los cotizados Alfredo Sosabravo (1930), Manuel Mendive (1944), Pedro Pablo Oliva (1949) y Roberto Fabelo (1951).

La exposición, instalada en el Memorial José Martí de la icónica Plaza de la Revolución, consta de 16 esculturas y 12 lienzos pertenecientes a la colección particular del empresario español afincado en Cuba Luciano Méndez.

El objetivo de Méndez ha sido "unir en un mismo espacio la obra de cuatro artistas geniales nacidos entre 1930 y 1950, los cuatro enormes en dos disciplinas: la pintura y lo tridimensional", señaló el coleccionista durante la inauguración de la muestra.

Aunque la selección inicial era de 40 obras, finalmente por las particularidades del espacio expositivo se han reducido a 28, entre las que se incluyen 3 telas y 4 esculturas por cada artista, todos ellos galardonados con el Premio Nacional de Artes Plásticas de Cuba.

"También tenía el objetivo de que las obras de cuatro artistas con un oficio inmenso tuvieran una coherencia y armonía entre ellas mismas", señaló Méndez, cuya colección iniciada hace una década reúne ya más de 500 obras de 60 artistas.

Así, se han conjugado las explosiones de color de los lienzos de Sosabravo con los tonos más ocres de las pinturas de Mendive, uno de los grandes exponentes del arte de inspiración afrocubana en la isla.

Y en el polo opuesto de la sala, los tragicómicos rostros característicos de la obra de Oliva conviven con las oníricas e inquietantes pinturas y esculturas de Fabelo, el artista cubano vivo más cotizado en la actualidad.

Además, en un guiño al muy cubano concepto de "resolver", que entre otras cosas significa arreglárselas con lo que hay disponible, las esculturas no se muestran sobre bases a la usanza, sino sobre superficies como taburetes y mesillas de noche.

"Entre lienzos y esculturas", que podrá verse hasta el próximo 23 de enero, es la cuarta exposición en la que Luciano Méndez saca su colección a la calle para acercar las artes plásticas al público, siempre en este mismo escenario.

Una muestra reúne desde este viernes en La Habana las obras de cuatro de los exponentes fundamentales del arte contemporáneo cubano, la mayoría trabajos de creación reciente de los cotizados Alfredo Sosabravo (1930), Manuel Mendive (1944), Pedro Pablo Oliva (1949) y Roberto Fabelo (1951).

La exposición, instalada en el Memorial José Martí de la icónica Plaza de la Revolución, consta de 16 esculturas y 12 lienzos pertenecientes a la colección particular del empresario español afincado en Cuba Luciano Méndez.

El objetivo de Méndez ha sido "unir en un mismo espacio la obra de cuatro artistas geniales nacidos entre 1930 y 1950, los cuatro enormes en dos disciplinas: la pintura y lo tridimensional", señaló el coleccionista durante la inauguración de la muestra.

Aunque la selección inicial era de 40 obras, finalmente por las particularidades del espacio expositivo se han reducido a 28, entre las que se incluyen 3 telas y 4 esculturas por cada artista, todos ellos galardonados con el Premio Nacional de Artes Plásticas de Cuba.

"También tenía el objetivo de que las obras de cuatro artistas con un oficio inmenso tuvieran una coherencia y armonía entre ellas mismas", señaló Méndez, cuya colección iniciada hace una década reúne ya más de 500 obras de 60 artistas.

Así, se han conjugado las explosiones de color de los lienzos de Sosabravo con los tonos más ocres de las pinturas de Mendive, uno de los grandes exponentes del arte de inspiración afrocubana en la isla.

Y en el polo opuesto de la sala, los tragicómicos rostros característicos de la obra de Oliva conviven con las oníricas e inquietantes pinturas y esculturas de Fabelo, el artista cubano vivo más cotizado en la actualidad.

Además, en un guiño al muy cubano concepto de "resolver", que entre otras cosas significa arreglárselas con lo que hay disponible, las esculturas no se muestran sobre bases a la usanza, sino sobre superficies como taburetes y mesillas de noche.

"Entre lienzos y esculturas", que podrá verse hasta el próximo 23 de enero, es la cuarta exposición en la que Luciano Méndez saca su colección a la calle para acercar las artes plásticas al público, siempre en este mismo escenario.