Joaquín Phoenix, nominado al Oscar por su trabajo en "Gladiador" y "Pasión y Locura", anunció en el otoño de 2008 que abandonaría su carrera para dedicarse a otra de sus pasiones: cantar música hip hop.
Esta sorpresiva declaración revolucionó a la prensa internacional y a las celebridades, y generó cierta incredulidad en la opinión pública y en los medios de comunicación.
Su cuñado, hermano del actor Ben Affleck, Cassey Affleck, lo seguiría de cerca en esta nueva etapa para filmar ese giro artístico y recoger en un documental su incipiente carrera musical.
Sólo un año después, cuando el film se presentó en el Festival de Venecia, se develó el misterio: todo se trataba de una broma; de un experimento en el que los protagonistas intentaban explorar la libertad y la relación entre los medios de comunicación, sus consumidores y las propias celebridades.
Y es que "I'm Still Here" muestra cómo Phoenix sostuvo públicamente su decisión y se fue transformando paulatinamente en un ser humano extraño y autista, llegando, inclusive, al punto de verse involucrado en líos con prostitutas, drogas y alcohol. A esto se le sumó su descuidada apariencia física: tupida barba, gordo, lentes oscuros y actitud muy distraída, situación que pudo apreciarse en toda su dimensión cuando fue invitado a "The Late Show with David Letterman".
Es por eso que el canal Infinito (que tiene como lema "la realidad supera a la ficción"), presenta el próximo 9 de noviembre "I'm Still Here", un trabajo audiovisual que generó polémica y revolucionó al mundo artístico, la prensa y la opinión pública.
"I'm Still Here" podrá verse en la madrugada del miércoles 9 a las 12.00 horas y se repetirá el domingo 20 a las 06.00 a.m.