Desde Panamá hasta Marbella, pasando por Punta del Este y Playa del Carmen, la ceremonia de los Premios Platino llega a su décima edición, esta vez en Madrid, España. Su trofeo en forma de mujer con el planeta tierra en los brazos y el mapa de Latinoamérica perfectamente dibujado en el centro ha sido recibido por actrices, actores, directores y productores que se visibilizado la industria del cine Iberoamericano.
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La certeza de querer implementar en el mundo una nueva visión sobre las producciones audiovisuales que se hacen en Chile, Argentina, Colombia, Brasil, México, España, entre otros países, estaba clara el día en que Miguel Ángel Benza, CEO de la Entidad de Gestión de Derechos de los Productores Audiovisuales, firmó el acuerdo con el gobierno panameño para poner en marcha la primera edición del evento que se hizo el 5 de abril de 2014. Para ese año, Chile se llevó el premio a “Mejor película” con “Gloria”, dirigida por el cineasta Sebastián Lelio.
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“Gracias a los Premios Platino se ha dado a conocer mucha producción que antes era inexistente, había películas que no tenían ninguna salida comercial. Con los premios estas producciones han podido salir por toda Europa y otros lugares”, comenta Enrique Cerezo, presidente de los Premios Platino, quien recuerda casos de películas como “Relatos salvajes (2014)”, o “Una mujer fantástica (2017)” Para la edición 2023 de los premios se recibieron más de 990 cintas producidas en Iberoamérica.
Más que una premiación
Con alfombras rojas bajo el sol brillante pero intenso, homenajes devotos y presentaciones de artistas, la premiación ha ido construyendo paso a paso su legado.
Una de las anécdotas más recordadas de los premios ocurrió en 2019, cuando se celebraron en la Riviera Maya, en México, y el auditorio se encendió gracias al sabor y el color protagonizado por un grupo de bailarines que sacudieron el lugar, pero también por el calor insoportable que hacía. Nueve de cada diez invitados sacaron su abanico para poder respirar, incluso el actor español Edu Soto se subió al escenario en traje de baño.
Han pasado cosas graciosas, pero también muy significativas, como cuando en 2015 la ganadora del Óscar a “Mejor actriz de reparto”, Rita Moreno le entregó con un beso en cada cachete el premio honorífico a Antonio Banderas. “Recibir este premio platino es un honor y que me lo haya entregado una leyenda como Rita Moreno es un privilegio”, dijo el actor luego de recibir la estatuilla. “Algo que recuerdo con cariño es la presentación de Miguel Bosé en 2017, cuando bailó “Morena mía” junto a Miguel Ángel Silvestre, Asier Etxeandia y Maxi Iglesias. Fue muy divertido porque contagiaron a todo el público de alegría”, recuerda Rafael Sánchez, director de comunicaciones de los premios.
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Colombia, uno de los protagonistas
A las risas y los buenos momentos se le suman las historias hechas en Colombia, que desde 2016 empezaron a hacerse notar en los Platinos gracias a “El abrazo de la serpiente” con siete galardones, incluido “Mejor película”. En 2021 “El olvido que seremos” obtuvo ese mismo galardón.
“Colombia desde hace años es una gran potencia, y esos frutos se ven reflejados en la creación de empleo de calidad, patrimonio y riqueza en un mundo que cada vez necesita más de los contenidos audiovisuales. Hay que seguir trabajando en esa línea, ayudando a que el audiovisual colombiano tenga un papel cada vez más importante en la industria y el mundo”, comenta Sánchez.
Este año, el país llega pisando fuerte con varias producciones nominadas: “Noticia de un secuestro”, nominada, entre otros a “Mejor miniserie o teleserie iberoamericana”, “Mejor creador de miniserie o teleserie y “Mejor interpretación femenina,” .
La película de Laura Mora, “Los reyes del mundo”, “La jauría”, dirigida por Andrés Ramírez Pulido y la serie “Pálpito”, que se puede ver en Netflix, son las favoritas de la décima edición, mientras que actores como Majida Issa, Cristina Umaña y Juan Pablo Raba están dentro de los nominados de la noche.
La ceremonia contará con la presentación del cantante colombiano Sebastián Yatra, que junto a intérpretes como Carolina Gaitán, una de las presentadoras de la gala, Adrián Lastra, Alejandro Claveaux, Alicia Bánquez, Clara Alvarado, Laila Garin, Lucrecia, Mane de la Parra, Michel Brown o Reynaldo Pacheco harán un recorrido por : la samba, el vallenato, el merengue, la ranchera, la salsa, la música andina o la rumba.
Benicio del Toro, un homenaje a su trayectoria
Nacido en San Germán, Puerto Rico, en 1967, Benicio del Toro se trasladó a los 13 años a Pennsylvania. Tras graduarse, comenzó a estudiar comercio en la Universidad de California, en San Diego, centro educativo que decidió abandonar para acudir a la prestigiosa academia de interpretación de Stella Adler. Ya a finales de la década de 1980, Del Toro comenzó a aparecer en pequeños papeles en series de televisión, realizando papeles en producciones como “Miami Vice” y la miniserie “Drug Wars: The Camarena Story”.
No fue cualquier actor que consiguió la fama fácil, después de sus batallas empezó a llegar la gloria. La década de 1990 fue especialmente provechosa para él, que debutaría en la gran pantalla con “Big Top Pee-wee” y aparecería en créditos tan destacados como “007: Licencia para matar”, con la que se convirtió en el actor más joven en interpretar a un villano de James Bond.
Del Toro es una de las grandes figuras del cine y las series actuales, así como uno de los grandes talentos hispanos en el ámbito de Hollywood y un embajador de las regiones iberoamericanas. No en vano, el ganador de un premio Oscar, un Globo de oro, un premio BAFTA, dos premios Independent Spirit, un premio del Sindicato de Actores, el Oso de Plata del Festival de Berlín o la Palma de Oro del Festival de Cannes, es uno de los más destacados representantes de las cinematografías iberoamericanas en relevantes producciones internacionales.
El legado
Bajo el sol ardiente de la Plaza de Callao, en Madrid, España, los organizadores de los Premios Platino dieron luz verde oficialmente a su décima edición con una mini alfombra roja en la mitad del lugar. No tenía restricción, cualquiera podía entrar y preguntar de qué se trataba ese pequeño acercamiento a lo que este sábado 22 de abril los asistentes y espectadores de la premiación verán, un legado que se ha ido construyendo poco a poco abriendo paso a las historias propias, y cultivando la hermandad entre países que se traduce en grandes producciones que llegan a la gran pantalla y trascienden hacia nuevos territorios.
“Creo que la industria audiovisual iberoamericana tiene un potencial enorme que está compuesto de las riquezas de cada una de las culturas que se unen en un proyecto en común, y también por la creatividad que nos identifica como iberoamericanos. Ambas cosas hacen que tengamos muchas historias que contar. Los premios han crecido estos años de una forma espectacular, al igual que el cine, y se han posicionado como un elemento importante en la agenda cultural... eso hay que agradecérselo al cine, a las historias y a las grandes cabezas detrás de los proyectos”, concluye Rafael Sánchez.
*La autora de este texto viajó a Madrid, España, por invitación de los organizadores del premio.