Cada toque es una fiesta. Cada melodía, un espacio para la diversión, y su música refleja lo que bien dice una de sus más reconocidas composiciones: “Sólo te pido que te vuelvas de verdad y que el silencio se convierta en carnaval”. Ese espíritu carnavalesco es el que caracteriza la propuesta de Los Fabulosos Cadillacs, una banda argentina que con una mezcla extraña y sabrosa del rock, el ska y el reggae logró llegar a los oídos de varias generaciones a partir de los ya lejanos años 90.
Su líder por excelencia es Vicentico, cuyo verdadero nombre es Gabriel Julio Fernández Capello, un carismático vocalista dotado con un poder único para la improvisación. Su labor dentro de esta agrupación, además de la composición y la interpretación de sus más legendarios éxitos, es divertir a los asistentes, lo cual hace con una habilidad innata. Durante las dos horas que la banda está sobre el escenario, el argentino recuerda anécdotas, cuenta chistes y goza como uno más de sus fanáticos.
Realizar, producir y publicar discos es casi lo único que hace Vicentico en la vida. Lo que corresponde a esa pequeña porción que lo obliga a incluir el “casi” tiene que ver con su privacidad y con otros aspectos que él hace entender como añadidura. Su tiempo lo dedica a pensar en música y, cuando se decide por el descanso, le gusta estar a la expectativa del trabajo de sus colegas. Por eso se inventa proyectos, accede a colaboraciones y no pierde oportunidad de reunir a sus cómplices de la banda Los Fabulosos Cadillacs para hacer giras y toques recordando los casi veinte años que estuvo al frente de la banda que se encargó de popularizar el ska en América Latina.
Ha sido tanta la coordinación entre las obligaciones colectivas y los proyectos personales que durante uno de los más reciente reencuentros con sus cómplices, Vicentico compuso algunas canciones íntimas y despojadas que, de la mano del productor Cachorro López, decidió reunir en un trabajo discográfico llamado Solo un momento, con el que abrió un ciclo de búsquedas de nuevos sonidos y otras intenciones musicales complementarias del estilo fiestero de la banda.
“Fue extraño hacer un disco tan personal dentro de una banda tan grande como los Cadillacs. El único objetivo que me puse aquí es que se tratara de una producción que no necesitara de mucha gente. Yo quería realizar la interpretación de varios instrumentos y pensaba también en la posibilidad de girar con muy pocos músicos”, comentó Vicentico tan pronto lanzó al mercado su álbum. Esta producción discográfica fue presentada en vivo en algunos lugares exclusivos de Buenos Aires. Sólo 100 o 200 personas por sesión tuvieron la oportunidad de escuchar las canciones en solitario en las que el argentino recurrió también al formato acústico para enriquecer su estilo sonoro. De esta manera ahondó las distancias entre su actividad con Los Fabulosos Cadillacs y sus propuestas individuales.
“Me siento cómodo en todos los formatos que he usado como solista y con la banda, porque el sentirse bien no tiene que ver con el estilo sino con la canción misma. En ese instante toca tener en cuenta para quién fue compuesta, por quién y demás aspectos que le atañen al tema”, asegura Vicentico, quien escogió una carátula que muestra a un hombre con un lobo en sus brazos. Un ser humano que salva a un ser viviente sin importar las consecuencias es lo que simboliza esta imagen pensada desde mucho tiempo atrás.
Gracias a su experiencia individual y a su trayectoria como frontman resultan impredecibles las intervenciones de Vicentico como eje de todas las miradas en un concierto de Los Fabulosos Cadillacs. Sin embargo, cuando él no se roba el protagonismo, el despliegue sonoro de sus compañeros es tan impactante como su propia puesta en escena y su juego de luces. Por eso siempre es grata la visita del colectivo argentino que revitalizó los cobres en el rock y les dio a los vientos un segundo aire.
“Con las giras de reencuentro nos ha pasado algo gracioso y es que en algún momento decidimos que queríamos interpretar las canciones más famosas de los Cadillacs para lograr la energía de la banda en sus primeros años. Hacemos un repertorio como de 25 canciones que no podemos dejar a un lado y por eso pensamos que el concierto en Bogotá será, como de costumbre, una especie de fiesta”, comenta el saxofonista Sergio Rotman, quien también tiene proyectos individuales, como Cienfuegos y Mimi Maura.
Con más de doce discos de estudio y varios reconocimientos internacionales, ya que fueron los primeros en obtener el Premio Grammy en la categoría mejor álbum latino de rock alternativo, Los Fabulosos Cadillacs no tienen una única canción que represente su sonido. Por ejemplo, el tema Matador, uno de los más famosos, no es consecuente con el ritmo característico de la banda. Para sus integrantes, lo importante es el espíritu de cada melodía y eso es lo que no han podido copiar las agrupaciones que intentan parecerse a esta propuesta surgida en Buenos Aires.
A pesar de que el nombre de Los Fabulosos Cadillacs es sinónimo de rock, reggae y ska, sus integrantes no se sienten precursores de esta fusión, aunque sí creen que su carácter espontáneo y extrovertido ha marcado la diferencia con otras propuestas similares durante la década de los 90 y comienzos del siglo XXI.
Los más recientes registros del grupo se llaman La luz del ritmo, que significó más de 55 presentaciones en vivo y en directo en América y Europa, y El arte de la elegancia. “Estos discos han sido distintos porque resumen el renacer de la banda después de algunos años de ausencia de los escenarios”, afirmó Sergio Rotman, según quien el golpe más duro para los integrantes ha sido la muerte de Toto Rotblat, el percusionista, justo antes de emprender uno de los más recientes reencuentros.
Los Fabulosos Cadillacs, comandados por Vicentico y Sergio Rotman, estarán de vuelta en Colombia para presentarse el sábado 5 de abril en el Festival Estéreo Picnic, en Bogotá. Antes de su arribo anunciaron que su puesta en escena musical será como una de sus canciones: un Carnaval toda la vida.
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Festival Estéreo Picnic. Jueves 3, viernes 4 y sábado 5 de abril. Parque Deportivo, autopista Norte Nº 222-22. Informes y boletería: 593 6300 y www.tuboleta.com.