Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.

“La venganza y el perdón están muy cerca”

Este montaje coproducido por el Teatro Petra y el Teatro Colón estará en temporada hasta el 22 de marzo en Bogotá. Aquí el contraste y las opiniones polarizadas son protagonistas.

Juan Carlos Piedrahíta B.

06 de marzo de 2015 - 10:03 p. m.
En ‘Labio de liebre’, obra original del Teatro Petra, dos enemigos del pasado se encuentran en el presente. / Cortesía: Teatro Colón
Foto: jandresgs
PUBLICIDAD

El Teatro Petra comienza la celebración de sus tres décadas de actividades artísticas poniendo el dedo en donde más duele. La estrategia empleada se resume en la pieza Labio de liebre, venganza o perdón, un texto original de Fabio Rubiano llevado, por ahora, a las tablas del Teatro Colón, en Bogotá, aunque la idea es convertirla en una propuesta itinerante para tocar al público de toda América Latina.

¿Cuánto se parece el esbozo, la idea inicial de ‘Labio de libre’, a lo que finalmente llega al público?

Se ha transformado mucho. Es una de las obras que más se han mantenido fiel al texto, pero se ha modificado el lado humano con sus relaciones domésticas y cotidianas. Otro aspecto importante es que el texto se reduce porque comenzó siendo de 78 páginas y en este momento es de 67. Para mí, Labio de liebre ha sido como un trabajo de escultura, que es quitar la piedra que sobra para observar la figura que uno quiere.

¿Cómo sabe el director que la obra está lista?

Jamás está lista. La acabamos de estrenar, pero faltan todos los ajustes para que eso empiece a correr para interiorizar rutinas. Es un proceso de engranaje para lograr la fluidez que queremos.

El talento actoral, la música, el vestuario, la escenografía son elementos que conforman una obra. Pero ¿su construcción se hace de manera individual y separada?

Es una coproducción entre el Teatro Petra y el Teatro Colón. Cada vez que hubo adelantos, mi misión era ir a ver de qué manera se sintonizaban con el cuerpo general de la obra.

El trabajo del director es un acto de fe, es confiar en las cabezas de todos esos equipos, ¿o no?

Para mí lo más complejo es el vestuario, porque siempre, pase lo que pase, hay que ajustar. Lo más importante aquí es la comodidad, porque el actor debe sentirse a gusto con lo que lleva puesto. Parece simple, pero no lo es tanto. Uno no puede correr una maratón si le aprietan los tenis. El acto de fe no es con el equipo sino con la obra, porque uno no sabe cómo va a reaccionar el público.

Read more!

‘Labio de liebre’ tiene un subtítulo, ‘Venganza o perdón’. ¿Por qué?

No ad for you

Hubiéramos podido incluir frases como “víctima o victimario”, “tragedia o comedia”, “odio y amor”. Lo que quisimos hacer con “Venganza o perdón” es mostrar lo que pasa en Colombia, porque siempre estamos entre dos bandos polarizados. Es una pieza que habla sobre el conflicto que vivimos a diario. Aquí nos acostumbramos a enviar opiniones para alterar a los demás.

¿Qué quería reflejar del país con la obra?

La intención es mostrar que estamos en un país de contrastes. A todos los narcos, guerrillos o paracos, por lo general los agarran en rumbas. Esa es la forma más fácil de detectar a un criminal. Aquí la gente quiere tener plata para invitar a los amigos y eso está instalado en lo que somos. En la obra se encuentran dos contrarios en una casa y la pregunta es: “¿Quiere tomar algo?”. Por eso los grandes enemigos cuando se reconcilian lo primero que hacen es emborracharse juntos. En un país de contrastes la venganza y el perdón están muy cerca.

¿Cuál fue la idea inicial, el núcleo de ‘Labio de liebre’?

No ad for you

La idea inicial surgió de varios lados. Nació durante el gobierno pasado, de Álvaro Uribe, también con la imagen de Mancuso hablando en el Congreso, que terminó aplaudido, y al poco tiempo todos lo llamaban criminal. Ninguna de las dos cosas era necesaria. En la obra dos enemigos del pasado se encuentran en el presente.

Read more!

¿Cuáles son los personajes que prefiere trabajar como director?

A mí me gusta abordar el personaje de la víctima, porque se despoja de sus aristas y se queda solamente con esa condición de víctima. Tal vez esa es la idea original de la obra, establecer qué pasa con las víctimas y determinar a qué le tienen miedo los criminales.

Usted creó el Teatro Petra hace 30 años. ¿Cuál era su intención?

Creo que la real fundadora es Marcela Valencia. El gran resumen es que queríamos montar una obra que deseábamos ver. Admirábamos algunas cosas del Teatro La Candelaria y otras del Teatro Libre, pero no queríamos hacer lo mismo. Empezamos a investigar 100 obras de la dramaturgia latinoamericana y de ahí seleccionamos El negro perfecto, que fue nuestro primer estreno, el 21 de marzo de 1987, después de 18 meses de ensayo.

No ad for you

¿Existe un hilo conductor entre las obras que ha creado y dirigido?

Hay cosas que se repiten. Tengo en ellas mucha referencia a tráfico de niños, abuso infantil. A mí me duele mucho la niñez y por eso no tengo hijos. En Colombia muchos niños ya tienen que ser adultos y tiene que funcionar en el mercado laboral o en la guerra. Digamos que siempre hay una relación con la realidad viva.

 

Labio de liebre, en temporada de miércoles a domingo hasta el 22 de marzo en el Teatro Colón, calle 10 Nº 5-32. Información y boletería: 593 6300 y www.tuboleta.com.

Por Juan Carlos Piedrahíta B.

Temas recomendados:

Ver todas las noticias
Read more!
Read more!
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.