¿Por qué se vino de España?
Me gusta pensar que vine huyendo de mis alumnos. El motivo exacto no lo sé, un cúmulo de situaciones… y una mujer.
¿También la famosa crisis ha tocado la pintura?
En España, aparte de impartir clases de pintura un día a la semana, vivía de la venta de mis obras. Aquí me he dado cuenta de que allá, con crisis y todo, se vende más pintura que en Colombia. Acá me da la sensación de que la gran mayoría de la gente prefiere dos coches y un poco de botox, a un retrato..
¿Por qué escogió el futuro incierto del arte, y concretamente la pintura, que dicen que ha muerto?
Mi padre es pintor, mi abuelo y mi bisabuelo también lo eran. Imagino que el entorno me educó para ello. Mi padre en contadas ocasiones me puso a pintar, pero lo veía trabajar todos los días en casa y sospecho que poco a poco me fue llamando la atención.
Ahora los artistas de su edad (28) prefieren otras manifestaciones artísticas: ‘performances’, ‘happenings’... ¿Qué piensa de estos formatos?
Obviamente sigo a una gran cantidad de artistas que practican otras disciplinas: me viene a la mente el colombiano Óscar Muñoz, que a mi parecer, tiene una obra rotunda y sincera. Es cierto que sufro de una molestia por el mundo que gira alrededor de estas manifestaciones, producido por el exceso de proteccionismo que les ofrecen las diversas instituciones culturales, sobre todo públicas, al subvencionarlas casi sin importar el sentido de las mismas, si son buenas o malas.
¿Qué pintores colgaría en su casa y qué pintores colgaría... del cuello?
No me darían las paredes para colgar todos los cuadros y seguramente la soga tampoco. En las paredes sin ninguna duda tendría obras de Justin Mortimer, Brendan Kelly o Neo Rauch. Obviamente no puedo dejar pasar la pintura española, por la que siento admiración. Siendo objetivo son muy pocas las escuelas que alcanzan a la española: pintores tan reconocidos como Diego Velázquez, Francisco Pradilla, Mariano Fortuny, Antonio López García o Lucio Muñoz. La soga, en esta ocasión la reservo para mí. Nunca se sabe cómo puede acabar uno.
A propósito, ¿qué le gusta de la pintura colombiana?
Qué me gusta… eso me gustaría saber. En el panorama pictórico actual no podría decir, por ignorancia mía, pero desde luego si echamos la mirada hacia atrás, acto que en este país no es frecuente, tenéis magníficos pintores como Antonio Cano, Santa María o Caballero.
¿Dónde se inspira más, en Colombia o en España?
Actualmente ninguna puede inspirar demasiado. Pero la inspiración es un concepto demasiado romántico, hablaría de atracción y la pintura me atrae en sí misma, no necesito elementos externos para motivarme.
¿El arte nos mejora espiritualmente?
No, pues si fuera así, yo no estaría tan podrido espiritualmente hablando. Bromas aparte, el arte, además de otorgarte un barniz intelectual y espiritual, en ocasiones le otorga reconocimiento social al que lo practica, por eso imagino que a tanto animal le gusta cultivarlo.