Víctor Gaviria: “La ideología del entretenimiento nos destroza la cabeza”

Víctor Gaviria piensa que los realizadores de su generación abarcaban problemáticas como la exclusión y la violencia, a diferencia de los directores jóvenes. / Archivo El Espectador

¿Por qué piensa usted que es importante realizar un festival de cine como este en San Andrés?

Es importante porque tiene una dinámica muy especial, se reúne todo el cine colombiano, tanto el más reciente como el anterior. Todo este proceso artístico que hay detrás de la producción del cine colombiano, yo lo valoro mucho. Hay demasiadas personas detrás de la producción de cada película, y creo que no hay un movimiento artístico en Colombia que mueva tanto la cultura como el cine, por eso es tan importante. 

¿Qué opina del nuevo cine colombiano?

Pienso que hay mucho interés y talento. En Medellín, por ejemplo, todos los muchachos jóvenes que están produciendo cosas como cortos, documentales y demás, son más rigurosos y exigentes en cuanto al material que realizan. Todo ese proceso llega entonces a un festival que no es solo a nivel de Colombia, sino de Latinoamérica en general, y se comienza a movilizar muchísima gente.

¿Cuál es su concepto sobre la evolución que ha tenido el cine latinoamericano en los últimos tiempos? 

Pienso que al ser una sociedad que ha estado intervenida por la violencia, la desigualdad y la opresión, el cine colombiano tiene muchas tareas por hacer. Este es un país en el que la cotidianidad siempre está bombardeada de narcotráfico, o de drogas y experiencias personales, y a través de esta industria se pueden contar historias que aún no se han contado.

¿Cuál es la diferencia entre el cine de las nuevas generaciones y el cine un poco más antiguo? 

Creo que la mayor diferencia es que no tocamos los mismos temas, es decir, en el cine de mi época tocábamos temas que abarcaban problemáticas como la exclusión, la violencia, mientras que las nuevas generaciones están más juiciosas en cuanto a contar una cantidad de cosas que no se han contado, tienen nuevas herramientas, mientras que nosotros no las tuvimos, y ellos las están aprovechando de una manera increíble. Jóvenes de 25 o 30 años intentando contar otras cosas, que también son dramas tremendos.

¿Qué opina de la percepción que los colombianos tienen acerca de la industria cinematográfica del país? 

Es curioso, porque de hecho hoy me contaban que en los cursos que estamos haciendo, muchos jóvenes venían muy influenciados por las películas que llegan desde Hollywood, que es una industria de entretenimiento muy fuerte… toda la temática de los superhéroes es muy poderosa y conecta muy rápidamente con el espectador. Toda esa temática en la que el poder está tan presente y es el tema principal, es a lo que la mayoría de los consumidores están acostumbrados. Cuando llega un cine que habla de la vida cotidiana, de problemas sociales entonces creen que es algo malo, porque la ideología del entretenimiento nos destroza la cabeza a todos.

¿El festival vendría siendo una manera de romper ese paradigma?

Totalmente. Es una manera de mostrar lo nuevo que trae esta industria, porque la gente piensa que el cine independiente es malo solo por el hecho de que narra cosas distintas al cine comercial, pero hay que quitarnos ese pensamiento y valorar de verdad lo que trae la nueva era del cine.