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¿Lo sorprendió la actuación de Colombia durante las últimas jornadas de las eliminatorias al Mundial?
Colombia fue el mejor equipo de la doble jornada; de hecho, fue el único equipo que consiguió los seis puntos en las dos fechas. Lo que pasa es que a la sociedad futbolística en Uruguay le cuesta escuchar que le ganaron bien. Colombia es la gran ganadora de esa fecha.
Usted resalta el buen desempeño de Colombia, sin embargo, falta mucho para los resultados definitivos. ¿Cree que el país clasificará al Mundial?
No puedo decirlo porque no soy adivino, pero me da la sensación de que esta Colombia es más parecida al equipo de Hernán Darío Gómez en esa primera parte de la Copa América, en donde el país fue protagonista, y no al tiempo de Leonel Álvarez. Lo que pueda pasar de aquí al Mundial no lo sé, pero sí sé que hay posibilidades. Tiene buenos jugadores, buena estrategia y algo que en otro tiempo no se daba en Colombia: la mayoría de sus jugadores juegan en Europa, entonces se conocen de memoria la forma para amalgamar la estrategia en la cancha.
Hablando de Argentina, ¿cree que la llegada de Sabella consolida esa constelación de estrellas en función del equipo?
Lo más importante para un entrenador, sea de donde sea, es formar un grupo. La diferencia que tienen los técnicos de los equipos con los entrenadores que trabajan con los seleccionados, es que estos tienen seleccionadores y no entrenadores. Hoy los jugadores están por todo Europa, la mayoría juega en otras ligas, y de esa manera el tiempo para cederlo a su selección es prácticamente nulo. A eso hay que sumarle que Argentina tiene a Messi, pero él no es el único sostén de Argentina, que tiene un grupo grande. El gran problema que tiene Sabella, y es una cuenta pendiente, es que tiene a un equipo que es fabuloso de la mitad hacia arriba pero lleno de deficiencias de la mitad hacia abajo.
¿Qué tanto afectó el descenso de River Plate al fútbol argentino?
El descenso de River fue un mazazo para el fútbol argentino, ni siquiera el más escéptico hincha tenía en sus planes perder la categoría. Sin embargo, consiguió volver a la primera y ahora está luchando para estar en los primeros lugares.
¿El fútbol argentino está en crisis?
Tiene un serio problema en cuanto a su economía. Los clubes se ven afectados por la moneda argentina pesificada, un dólar que está en el mercado oficial a $4,60 y en el mercado paralelo a $7,00; entonces los jugadores prefieren irse al exterior, cobran en dólares, no tienen inflación y les ofrecen contratos a largo plazo. Hoy, Argentina tiene una generación joven de jugadores con mucho futuro y una de jugadores que están por encima de los 30 años y que han regresado; sin embargo, le falta una generación intermedia, que aún está en el exterior.
¿Cómo nace ‘Expediente Fútbol’?
En 2002, Federico Infante, que maneja el archivo de Fox Sports, me propuso aprovechar ese material debido a mi gusto por la historia del fútbol. En principio fue un programa de media hora los lunes y los viernes; luego, en 2003, pasó a ser un programa diario de una hora. Hoy, con un grupo de muchas personas detrás de Expediente Fútbol, cumplimos diez temporadas. Es como un hijo para mí.
¿De dónde esta pasión por el deporte?
Siempre me gustó, como a cualquier chico que está correteando detrás de la pelota. Después el tiempo permitió que me convirtiera en periodista por distintas razones, y que el fútbol fuera mi canal de vínculo. Pero debo decir que me considero periodista en todo el sentido, no sólo periodista deportivo, y si tengo que hablar de temas que no tienen que ver con el deporte, lo hago, porque vivo pendiente de todo lo que pasa en el mundo. Me encantan la política, lo social, el cine, el teatro, así que trato de estar al tanto de lo que pasa en todos los aspectos. Entonces hablo más bien de mi amor por la profesión, con la que estoy vinculado desde hace más de 24 años, y ojalá el tiempo me permita seguir haciéndolo.
Cuando no está en su rol de periodista, ¿qué tan apasionado es en las tribunas?
Me cuesta salirme de ese rol. Soy un apasionado del juego, pero soy un desapasionado del hinchismo: perdí desde hace mucho tiempo el papel de hincha. Ahora trato de analizar el juego desde otros puntos de vista, por eso también amo la táctica.