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El estreno de la cuarta temporada de Por trece razones mostró un ataúd, adelantando que uno de los estudiantes del Liberty High School moriría a lo largo de la entrega. Pese a que los espectadores estaban prevenidos, el desenlace de la ficción de Netflix dejó una sorprendente y trágica revelación. (Lea: Primeras imágenes de "Maldita", la serie de Netflix que reescribe la leyenda del Rey Arturo)
Hacia el final de la serie se ve a Justin Foley (Brandon Flynn) desmayándose en el baile de graduación. Momentos después se descubre que dio positivo en VIH, enfermedad que probablemente contrajo en la época en que vivía en la calle y consumía heroína. Clay Jensen (Dylan Minnette) se muestra abatido al conocer la noticia, y más aún al descubrir que Justin también fue un trabajador sexual cuando no tenía hogar.
La enfermedad está muy avanzada cuando revelan su diagnóstico, por lo que Justin necesita la ayuda de un respirador. El joven contrae una infección cerebral y sus amigos acuden al hospital para despedirse. Durante el funeral de Justin, una ministra interpretada por Phylicia Rashad pronuncia un discurso conmovedor en el que exige que los jóvenes hagan un cambio en sus vidas.
Winston wants the truth. pic.twitter.com/sTUGmmvdDk
— 13 Reasons Why (@13ReasonsWhy) May 28, 2020
"Hemos dejado que nuestros miedos, nuestra vergüenza, nuestros códigos morales retorcidos, nos mantengan en silencio mientras la muerte acecha a más jóvenes. Yo digo basta", reivindica.
Después de la graduación, aparece el fantasma de Justin, tal como hizo el fantasma de Hannah Baker en la segunda temporada. “Puedes amar a las personas que hicieron cosas malas. Puedes perdonar a las personas. Incluso las personas que más te hirieron”, le aconseja a Clay. “Cuando perdonas a alguien, significa más para ti que para ellos”.
Yup. Shit just got real. pic.twitter.com/Ood8fugvff
— 13 Reasons Why (@13ReasonsWhy) May 23, 2020
Además de la muerte de Justin, el final también incluye la graduación y la conclusión de la investigación sobre la muerte de Bryce (Justin Prentice). Alex (Miles Heizer) confiesa el crimen a Winston (Deaken Bluman), quien ha estado investigando al grupo durante toda la temporada. Sin embargo, Winston no se lo dice a nadie y la policía cierra el caso. La serie termina con Clay y Tony (Christian Navarro) conduciendo, a punto de empezar su nueva vida en la universidad.