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Filarmónica de Bogotá: el sonido de un país afinado

A comienzos de 2022, y en plena pandemia del covid 19, esta agrupación en gran formato realizó una extensa gira por el norte de Europa y representó a Colombia en el Festival Internacional de Música Tommie Haglund.

David García y Antonio Suárez
24 de diciembre de 2022 - 08:00 p. m.
 La Orquesta Filarmónica de Bogotá. / Archivo particular
La Orquesta Filarmónica de Bogotá. / Archivo particular
Foto: Q - @kikebarona

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En este 2022, la Orquesta Filarmónica de Bogotá hizo presencia en el Festival Internacional de Música Tommie Haglund, uno de los más importantes de Europa del norte, y la agrupación interpretó, y fue invitada para ello, música contemporánea, en gran parte creaciones del gran compositor sueco Tommie Haglund, quien participó en el Festival, además de varios músicos europeos y de otras latitudes, como Noruega, Dinamarca, Alemania, Suecia, Finlandia, entre otros.

Este festival se realizó en torno a la obra del maestro Tommie Haglund, y la Filarmónica de Bogotá ya había interpretado algunas de sus obras en los últimos conciertos. De hecho, el sábado 9 de abril la jornada previa al viaje a Europa, la orquesta interpretó varias obras de su autoría, ya que es un compositor con obras de un lenguaje muy interesante contemporáneo y abstracto.

Esta invitación tuvo de especial que, precisamente, llevaron a la Filarmónica de igual a igual a interpretar el mismo repertorio que tocaron otras orquestas, otros músicos en este importante festival.

La preparación en Bogotá de la Orquesta Filarmónica tuvo diversos pasos que se fueron adelantando en los meses previos al viaje. Una parte fue la revisión del repertorio, posterior a la curaduría que se tuvo para su interpretación en Suecia, y así revisar cuáles serían los instrumentos que debían acompañar a la orquesta en su gira por los países escandinavos.

Estos instrumentos tuvieron que ser pesados, tocaba revisar su estado para que no sufrieran un desgaste mayor al que, de por sí, ya tenían por el viaje y, asimismo, el peso se debió calcular para saber la carga real que se tuvo en el desplazamiento aéreo.

Como se trataba del primer viaje después del confinamiento, y en plena época de pandemia, se debió revisar toda la normativa asociada al covid-19 con el doctor José Escalante, asesor de la Orquesta Filarmónica de Bogotá, y cada semana se realizaron revisiones de las políticas no solo nacionales, sino también internacionales, para que este viaje no tuviera algún contratiempo en este sentido.

Tuvimos que supervisar actualizaciones de las necesidades en temas de vacunación, pruebas que se requieren día a día, estuvimos muy atentos para que los músicos que participaron en esta gira no tuvieran ningún inconveniente en el aeropuerto.

Hicimos una revisión de las pólizas de los seguros, solicitudes de comisión para prestar servicios artísticos en el extranjero a través de la Alcaldía Mayor que nos ofreció esta comisión en el exterior y es quien autorizó la primera presentación de la Filarmónica después de un duro proceso de pandemia. Adicional a esto, tuvimos que programar los ensayos en los cuales participó nuestro director titular, Joachim Gustafsson, tuvimos dos semanas de ensayos intensivos con cuatro conciertos donde se interpretó todo el repertorio que llevamos a los países escandinavos y tuvimos en cuenta la experiencia en público de las obras que más adelante interpretamos.

Ya después de todo este proceso llegó el fantástico viaje, donde presentamos una serie de conciertos en distintas ciudades, y la curaduría del repertorio la adelantó el maestro Joachim Gustafsson (director titular de la Orquesta Filarmónica de Bogotá), quien además es el director artístico del Festival Tommie Haglund y la organización del grueso de la producción que realizamos en Suecia.

En Europa del norte, la Orquesta Principal tuvo cinco conciertos y algunas de esas presentaciones tuvieron como invitado al violonchelista colombiano Santiago Cañón-Valencia, al gran pianista cubano Marcos Madrigal y también a la violinista Chloë Hanslip de Inglaterra, quienes interpretaron en el evento los conciertos para Chelo, Piano y Violín.

La Filarmónica de Bogotá también hizo presencia en el festival con otros dos tipos de actividades, por un lado grupos de cámara que existen dentro de la agrupación tales como el Ensamble Entrevera’o, conformado por varios maestros de la Orquesta que interpretan maravillosos arreglos de música colombiana.

También estuvo el Quinteto Femenino Filarmónico, cinco mujeres de nuestra agrupación que interpretaron música colombiana, y asimismo, los maestros Aníbal Dos Santos (viola), Luis Martín Niño (concertino de la orquesta y violinista) y Sergei Sichkov (piano) tuvieron conciertos alternos, logrando así unas presentaciones de la Filarmónica de Bogotá, como orquesta y con pequeñas agrupaciones de música de cámara que se destacaron en diferentes salas de Halmstad y otros escenarios de Suecia y Noruega.

El recorrido de la Filarmónica por Europa fue un punto muy positivo, ya que quienes participaron en el festival son grandes personalidades del medio cultural en Suecia y Dinamarca, y tienen un interés especial en este tema de cómo la orquesta se ha convertido en un gran referente de un sistema y con un programa de formación musical, lo que corresponde al concepto de orquestas del siglo XXI.

La Orquesta Filarmónica de Bogotá durante 2022 siguió eliminando fronteras, reactivando sus iniciativas y logrando que Colombia sea un país cada vez más afinado.

* Director general y director sinfónico de la Orquesta Filarmónica de Bogotá.

Por David García y Antonio Suárez

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