Love of Lesbian nació a finales de los años 90, es una de las bandas más reconocidas del género indie y se lanzaron a la escena musical en un otoño de 1997. Su trayectoria los ha llevado a recorrer diferentes escenarios de Latinoamérica, lo que ha logrado consolidarlos como uno de los grupos musicales con más fuerza dentro de la industria musical.
Sus sonoridades no solo pretenden gustarles a los miles de fanáticos que ya han conquistado durante décadas, sino que buscan despertar a través de sus letras emociones y sentimientos con letras en las que Santi Balmes, Julián Saldarriaga, Jordi Roig, Joan Ramon Planell, Uri Bonet y Dani Ferrer, fusionan casi a la perfección con sus estilos e instrumentos, haciéndole una oda a la atemporalidad: la esencia que los mantiene vivos en la escena musical.
La banda, que ya había estado presente en diferentes escenarios colombianos, y que despertó a todas las generaciones con “Poeta Halley”, el nombre del octavo disco del grupo y que fue publicado el 4 de marzo de 2016, sorprendió a los asistentes de Rock al Parque el pasado 4 de diciembre en el escenario Plaza, espacio que estuvo representado por la fuerza capaz de transformar las cosas y que llegó al sonado festival a celebrar una gran fiesta latinoamericana.
Hablamos con ellos en El Espectador y esto fue lo que nos contaron a propósito de su participación en el evento de cuatro días que promovió la reconciliación y sana convivencia, a través de la música.
Su primera vez en Rock al Parque ¿Cómo se sintieron participando en este festival?
Un poco abrumados la verdad, por lo que vimos. La verdad es que las dimensiones de este festival te dejan en shock. A nosotros nos pasan cosas en otros países que entran dentro del territorio de la ciencia ficción, entonces estamos todo el tiempo con el casco de astronauta puesto, mirando y pensando cómo es posible que haya llegado nuestra música al otro lado del océano. Al final tomamos la decisión de disfrutarlo, ser agradecidos y pensar que es una oportunidad única.
¿Por qué creen que el género indie sigue estando tan latente en la industria de la música?
Nosotros tenemos aquella sensación de que quizá en España en eso vamos un poco más adelantados Creemos que lo que se está viviendo aquí, lo vivimos en nuestro país hace como quince o veinte años, que fue cuando nosotros emergimos en esa escena musical que podríamos llamar “independiente”, de ahí que salgan muy buenas bandas que se han trabajado mucho, que no la han tenido nada fácil y que, en definitiva, si consiguen perdurar en el tiempo, como nosotros que ya llevamos 25 años, pues son las bandas que estarán dentro del circuito independiente, alternativo, ahí la vibra es muy diferente y es muy bonito ver eso.
¿Como creen ustedes que este evento contribuye a la industria musical del mundo?
Todos estos festivales tan grandes, tan masivos que se están produciendo en toda Latinoamérica, lo que están creando es un mercado que puede llegar algún día a la autosuficiencia, eso sí que es muy deseable, teniendo en cuenta la dependencia que tenemos casi siempre en el mercado anglosajón en todo.
Poco a poco estamos viendo lo que pasó en España hace un tiempo, empezábamos a tocar a las seis de la tarde y luego, al final estábamos siendo cabezas de un cartel, a esto es lo que se debería aspirar. Ahora mismo estamos en muchos festivales viendo como las bandas que se presentan son en lengua castellana, así que es una demostración del poder alternativo anglosajón en la industria.
¿Cuáles bandas colombianas conocen? ¿Hay alguna que tengan en la mira?
¡Nos pillas bastante! En España tenemos un mal y es que no miramos a Latinoamérica. Es en estos festivales donde precisamente descubrimos bandas. Llegamos a Colombia con la mente muy abierta y estamos pensando ahora mismo en su música para que llegado el momento creemos estrategias, para crear puentes culturales. Somos una banda que intenta que todo llegue de manera muy natural, empezamos a conocer gente, nos empezamos a conectar y de ahí nacen cosas interesantes.
¿Creen que el fenómeno de las plataformas digitales es un trampolín para que su música llegue a todo el mundo o es “una piedra en el zapato” frente a otros géneros?
Tenemos sentimientos ambivalentes al respecto, porque de la misma manera que te promocionan, también te acotan. No nos gusta mucho eso de “si te ha gustado dale me gusta” o que te creen el típico top musical porque al final crea compartimentos de estanco. También pasa que cuando vas a sacar un nuevo material queda un poco enterrado por ese techo de canciones, en nuestro caso, como las de1999 que marcaron un antes y un después en la vida de la banda, pero también pasa que son las canciones contra las que tienes que luchar.
La gente hoy en día ya no indaga tanto, las personas hacen parte de una cultura del “clic”, se saben tres canciones y ya está.
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¿Creen que hay algún género más privilegiado en este tipo de distribución musical?
La música urbana por supuesto, estos artistas han sabido leer más los tiempos, interpretar un poco las dinámicas, los featurings, muchos autores en una misma canción, mucha capacidad de realización, mucha libertad discográfica porque no pertenecen a la discográfica habitual, entonces ellos se han podido desenvolver por ese campo libres de ataduras.
Este es el reflejo de cómo hoy se consume y se escucha la música. Nosotros todavía somos una banda que piensa en un concepto, en un disco, en una historia que tenemos que explicar, eso es muy complicado mantenerlo en una plataforma digital, porque la gente “picotea” y en eso nosotros no es que seamos reacios o estemos en contra, pero como que todavía seguimos diciendo: “no, nosotros somos una banda que hace discos” y ahí quizá sí que el pop rock y el rock están un poco en desventaja.
¿Cómo los tomó la noticia de ser parte del cartel de Rock al Parque 2022?
Nosotros hace mucho tiempo que escuchamos hablar de Rock al Parque. Hace mucho tiempo que con todo nuestro equipo decimos: Rock al Parque tiene que ser un punto de inflexión, tiene que ser un lugar en el cual Love of Lesbian tiene que estar y nos ha costado mucho, llevamos mucho tiempo con ello, trabajando en ello, viendo de qué manera se podía venir y por fin pudimos lograrlo.
Es que en el momento que nos dijeron que participáramos dijimos ¡Wow! y es precioso conocer, encontrarte con un montón de bandas amigas también, esto fue una gran comunión. Ha sido fantástico, vivir un festival que ya se consolida como el más importante del rock en Latinoamérica.
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