Hernando Gómez Buendía: “La inteligencia de Colombia nos cree”

La plataforma digital cumple diez años de fundada y en su recorrido ha logrado seguir de manera rigurosa las principales noticias, procesos, debates y decisiones públicas que más afectan al país.

El Espectador
22 de octubre de 2018 - 02:00 a. m.
Hernando Gómez Buendía es abogado, filósofo, economista, periodista y sociólogo.  / Cortesía
Hernando Gómez Buendía es abogado, filósofo, economista, periodista y sociólogo. / Cortesía

¿Cómo nació “Razón Pública”?

Nació de un grupo de 33 personas de distintas formaciones disciplinarias. Grandes analistas e intelectuales colombianos que son respetables, serios y comprometidos con el interés público. Empezamos en este proyecto con la idea de que entre todos podíamos tener la credibilidad para montar lo que en ese tiempo era una especie de blog colectivo, y eso, en sí mismo, fue muy interesante. Conseguimos un diseñador y montamos la página. Hicimos este proyecto sin ánimo de lucro. La verdad, fue maravilloso el descubrimiento del internet en esta generación mía, y realmente valioso ese encuentro entre la modernidad y la posmodernidad. La idea inicial siempre fue crear un portal que tomara las noticias con mucha más seriedad que los demás medios de comunicación.

¿Cómo describe ese proceso de encontrarse con la tecnología?

Fue algo increíble, sin duda. Éramos un grupo de ancianos y ancianas escribiendo en internet de una manera bastante chistosa, con notas a pie de página, y nos decían: “Aquí no se usan notas a pie, se usan los hipervínculos”, y yo decía: “¿Los qué?”. Fue y sigue siendo un cambio cultural muy grande. A pesar de eso, no soy nativo pero sí soy bastante cibernauta. Me tocó el invento del celular en Finlandia, cerquita de mi oficina, como a tres cuadras se inventaron el celular, que en ese entonces era un aparato gigante.

¿Cómo hace “Razón Pública” para lidiar con la inmediatez que demandan las redes sociales?

Hoy han escrito en Razón Pública 1.117 personas. Nosotros tenemos un proceso de edición muy periodístico y todos los textos se someten a ese proceso para que tengan una legibilidad perfecta y le lleguen a mucha gente. Razón Pública está escrita para un público reducido, pero grande. Algo que quiero destacar es que nos encargamos de seguir las noticias, no de hacerlas, porque no somos periodistas. El error de la inmediatez está en la superficialidad de la información; nosotros lo que hacemos es darles un gran valor agregado a todos los temas que vemos en medios, porque lo nuestro, más que un trabajo periodístico, es un trabajo de análisis y profundización.

¿Qué piensa de que los medios estén sacrificando la calidad por la cantidad?

Me parece terrible, y justamente nosotros lo que hacemos es todo lo contrario: seguimos los procesos y tenemos en cuenta distintos puntos de vista sobre un tema, pero siempre desde la gente que sabe. Yo no consulto medios porque me parece que en Colombia no pasa nada distinto: bandidos, mermelada, asesinatos, siempre es la misma historia. En los medios las noticias se mueven al instante, pero en Razón Pública lo más interesante queda, porque una misma noticia la seguirán leyendo mucho después de que se publica, por la cantidad de información que tiene.

¿Cómo ha sido para usted estar en este mundo digital y afrontar la situación por la que están atravesando los medios?

Es muy grave, porque sufren la calidad del periodismo y la democracia. ¿Cuál es el futuro en Colombia? Que todos los medios comiencen a cobrar por el contenido. Ya algunos lo están haciendo, porque es la única manera en la que un medio puede sobrevivir. Cuando eso pase, el ciudadano no va a poder enterarse de las noticias si no paga. Es inevitable, es lo que tiene que hacer el periodismo ahora; ya lo hacen periódicos como The New York Times. Pero el problema es que en el tercer mundo no hay quien pague. La gran ventaja de un medio como Razón Pública es que los lectores entran con una actitud mental distinta, porque no son columnas, son argumentos. En este medio la gente entra a aprender.

En estos diez años de historia ¿qué considera que ha sido lo más complicado de mantener “Razón Pública” a flote?

Lo que más trabajo me ha tomado es la edición: me exijo mucho editando los textos porque lo que necesitamos es que sean leídos. Educar a la gente para editar ha sido muy complejo, porque nos podemos tomar a veces más tiempo del que gastamos escribiendo el artículo. Algo que hemos logrado es que gente tan prestigiosa se anime a escribir para nuestro medio gratis, corto, claro, y que se aguante la edición. Yo así no escribiría, pero la gente acepta porque nos cree. La inteligencia de Colombia nos cree.

¿Cómo se financia hasta el momento “Razón Pública”?

Lo primero y más importante, el trabajo gratis de más de mil personas; si ellos cobraran, no existiríamos. En segundo lugar, yo trabajo gratis y con mucho gusto, el consejo editorial también es gratis, el trabajo voluntario de la gente nos ha permitido seguir en pie, y lo hacen porque confían en nosotros. Acá los contenidos no tienen censura, y las personas firman con su nombre y hoja de vida. Hemos vivido también gracias a fundaciones internacionales, que son las que financian los proyectos periodísticos alternativos independientes.

¿Por qué motivos “Razón Pública” optó por el “crowdfunding”?

Necesitamos innovar en términos de contenidos y de formatos, aprovechando el creciente repertorio de buenas practicas del periodismo digital, para trasmitir las ideas y acceder a un público más amplio. También nos gustaría construir más comunidad alrededor de nuestra plataforma, mediante la atención personalizada, los foros del lector, los intercambios y las publicaciones conjuntas entre nuestros autores, la capacitación para comunicarse con los no especializados y similares programas in house, pero principalmente queremos asegurar la autofinanciación futura y permanente del proyecto, lo cual implica experticia, planeación y vinculación de nuevo personal de planta.

Por El Espectador

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar