“La bandida”, la historia de Graciela Olmos

La actriz Sandra Echevarría como Graciela Olmos en la serie “La bandida”. / Cortesía

La manera de ver televisión ha cambiado. En la actualidad, las series tienen entre 10 y 12 capítulos, pero “La bandida” cuenta con 70. ¿Cómo fue apostarle a este formato?

Van a ver que los primeros capítulos son largos porque cuentan la historia de Graciela Olmos desde muy chiquita y termina con su muerte cuando es mayor. Por eso tenemos que acaparar varias etapas de su vida.

¿De qué trata la nueva serie de Telemundo Internacional?

Es una historia real que narra la vida de esta mujer tan revolucionaria que hizo muchos movimientos sociales y políticos para cambiar su vida. Era una gran mujer, a pesar de que siempre se la juzgue por estar en el mundo de los prostíbulos. Siempre se la ha visto con esa mala imagen, por ofrecer mujeres a los hombres a cambio de dinero. En la serie rompemos con ese estereotipo y la hacemos ver como era realmente: una madre.

¿Qué fue lo que más le gustó de interpretar a un personaje como Olmos?

Me encanta personificar a mujeres fuertes, no me gustan las débiles. Cuando escuché la historia de Olmos la encontré bastante interesante. En su vida tuvo muchos sufrimientos, como muertes de sus parejas. Es una mujer que va cargando con una tristeza, pero al mismo tiempo va creciendo con una fortaleza de admirar.

Graciela Olmos tuvo varias facetas en su vida y una de ellas fue la musical...

Eso fue lo que más me gustó, porque aquí pude mezclar mi parte musical, que no había podido hacerlo anteriormente. Ella era una gran compositora. En la historia van a ver a esa mujer que toma su guitarra y se sienta a componer con Pedro Infante, entre otros artistas. Ella tenía el poder de cantar, hacer corridos para declamar y hacer protestas políticas.

La mayoría de los personajes que ha interpretado se caracterizan por ser mujeres fuertes y ambiciosas. ¿Se siente identificada con ellas?

Me gusta interpretar personajes que les den voz a otras mujeres, con las que puedan relacionarse y ser un ejemplo para todos, por lo que hacer personajes de mujeres victimizadas y ese tipo de cosas no es mi estilo y prefiero hacerlo con aquellas que son un ejemplo.

¿Por qué razón?

Creo que por mi madre. Vengo de una familia donde mi madre siempre fue como la figura más grande. Aprendí mucho de ella. Es una mujer que se divorció cuando éramos muy chiquitas, se puso a trabajar y nos sacó adelante.

Tomando como base el personaje que está interpretando, ¿qué opina del empoderamiento femenino?

Me parece maravilloso lo que está sucediendo, esta unión de mujeres que se levantan para decir ya basta, no a la violencia, no a una muerte más, porque creo que sí hemos pasado muchos años de guardar el dolor y tener miedo. Olmos, para su época, estaba tan cansada de las injusticias que no tenía miedo y eso lo van a ver en la serie. Llega un punto donde le tienen miedo o, más bien, le guardan mucho respecto.

¿Cómo se preparó para interpretar este papel?

Me dediqué a leer sobre ella, sus biografías, muchas prácticas con mi director, y no había videos que me ayudaran a ver un poco de su forma de ser o sus ademanes, así que nos tocó buscar fotografías que nos dieran luces de cómo era su vestuario. Fue una construcción de personaje muy intenso, ya que no teníamos un referente audiovisual para hacerlo.