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¿Quién es Orlando Ayala más allá de la repetida frase de “figura relevante en Microsoft”?
Soy un total humanista, convencido de que la única forma de avanzar es hacer todo lo que sea posible para aumentar el potencial del ser humano. Todo lo que hago trato que sea consistente con esa idea.
¿En qué se encuentra trabajando actualmente?
Después de 25 años de trabajo con Microsoft, en este momento estoy enfocado en el diálogo con las nuevas generaciones. No cabe duda de que los grandes desafíos del mundo van a pasar por tener muy incentivada a la juventud, en que busquen las soluciones y se hagan las preguntas adecuadas. Otro aspecto que necesita gran atención es la contribución económica de la mujer al progreso de un país.
¿Por qué?
A los hombres se nos han dado las oportunidades suficientes para arreglar el mundo y lo hemos tirado más de una vez. Creo que llegó el momento de darle más oportunidades a la mujer.
¿Cuál considera que es el papel de la educación en el uso y aprovechamiento de las tecnologías en la actualidad?
La educación es todo; la gran pregunta es si tenemos los sistemas de educación adecuados y acordes con esta nueva generación, que vive muy en tiempo real, y si se le está dando el espacio a la gente joven para que explore su curiosidad usando herramientas tecnológicas. La tecnología amplifica, y la transformación desde el punto de vista educativo pasará por personalizar ese potencial, que es similar para algunos pero muy diferente para otros muchachos.
¿Por qué ese interés suyo en pequeños emprendimientos?
Hoy, dada la comoditización de la tecnología, y el hecho de que un pequeño negocio ya no tiene que comprar un gran computador, sino que puede alquilar el servicio y pagar lo que usa y no más de lo que usa; un pequeño negocio tiene la posibilidad de competir contra el más grande, si realmente hay un uso de estas tecnologías de una manera eficiente y efectiva. A la gente se le olvida que en el número de empleos generados en un país, el 80 % pasa por las pequeñas y medianas empresas.
¿Qué se necesita?
Forma parte de la agenda crítica y central de cualquier país potenciar a la pequeña y mediana empresa con el uso de la tecnología, de manera que no tengan costos increíbles y que puedan operar no solo en su país sino a nivel internacional con sus productos y servicios.
Ha comentado la importancia de la investigación en salud, ¿cuáles son sus opiniones al respecto?
Hoy más que nunca, por la cantidad de información disponible y la capacidad de procesamiento de esa información, estamos a las puertas de la medicina personalizada, de encontrar realmente respuestas a problemas como el cáncer, que tiene una serie de ángulos muy difíciles, pero en los cuales se ha avanzado mucho. Ya hay tecnologías enfocadas en la realidad aumentada, que es la posibilidad de ver de manera virtual muchos componentes, lo que podría transformar la salud de una manera excepcional. Ahora, sería muy trágico si esto solo va a estar disponible para la gente que pueda pagarlo.
¿Cuáles son los retos?
El gran desafío no es si la tecnología va a encontrar respuestas a problemas de salud profundos que han afectado al ser humano por mucho tiempo; la pregunta es ¿vamos a darle la escala para que hasta la persona más pobre pueda tener acceso a esos mismos servicios, a esa misma capacidad de la tecnología de curar? Enfatizo, si esto no se hace creando principios y valores de cómo se usa esa tecnología, y modelos de negocios y sistemas económicos que permitan el acceso general, creo que tendremos un mundo todavía más polarizado y conflictivo.
¿Cómo valora el estado de Colombia en materia de aprovechamiento de los recursos tecnológicos?
En los últimos años se ha avanzado bastante en la capacidad de interconectar a la gente y en el uso de más sistemas móviles. Donde no se ha avanzado tanto es en el desarrollo de implementaciones innovadoras, desde el punto de vista de nuevas aplicaciones, de fondos que incentiven la creación, el emprendimiento y la innovación.