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Con la apertura de su nuevo campus, UCompensar fortalece su modelo “caja de compensación, universidad y empresa”. Se trata de una estructura sostenible con certificación EDGE de 25 mil metros cuadrados en su primera etapa, con 53 laboratorios, 53 aulas multipropósito, zonas comerciales, espacios de apoyo y bienestar, un salón magistral, entre otros espacios que se construyeron sobre la Avenida 68, en Bogotá.
Margarita Áñez Sampedro es la rectora de la Fundación Universitaria Compensar. En diálogo con El Espectador, la directiva habló sobre el modelo educativo de la universidad, su impacto en estudiantes y empresarios, así como los beneficios que genera su campus vertical, el cual pueden disfrutar estudiantes, afiliados a la caja de compensación y demás interesados.
¿Cuáles son los objetivos del modelo educativo de UCompensar y cómo benefician a estudiantes y a las empresas aliadas?
Nuestro modelo es consecuente con la razón de ser de una caja de compensación como Compensar, en el sentido que tenemos un foco muy específico de trabajo: mejorar la calidad de vida de los estratos 1, 2 y 3, generando transformación social a través de la educación. Buscamos formar técnicos, tecnólogos, profesionales y especialistas que encajen de manera acertada con este mundo empresarial tan demandante de personas, que generen productividad en corto plazo y que entiendan muy bien una estrategia institucional y respondan con su trabajo a estas necesidades.
De igual forma, nos desvela tremendamente la empleabilidad, no solamente que encuentren empleo, sino que cada vez se hagan más empleables, que se puedan formar mejor, que puedan tener mejores competencias, que su capacidad de innovación responda a lo que requiere el empresario, que entiendan qué significa ser productivos.
¿Qué significa para UCompensar formar parte del conglomerado Compensar? ¿cómo esta relación potencia su modelo educativo y su impacto en el bienestar y desarrollo empresarial? ¿En qué cree que beneficia a Compensar contar con una IES?
Somos la única IES de este tamaño en una caja de compensación. Es una gran bondad estar bajo la sombrilla de Compensar como conglomerado. Facilita tener esta triada de conversación con el empresario, fortalecer nuestros alumnos y a la vez tener un modelo educativo que responda a estas demandas. Compensar ofrece grandes ventajas. Entre ellas se encuentra la agencia de empleo y su carácter transnacional, que facilita conexiones con empresarios y abre nuevas oportunidades. Además, brinda apoyo económico a través de programas y becas -de hasta el 75 % para categorías A y B de la caja de compensación-, lo que hace más accesible la educación para personas de estratos 1, 2 y 3, especialmente para afiliados. La alianza con Compensar fortalece nuestra capacidad para apoyar tanto a los estudiantes como a las empresas afiliadas, promoviendo un vínculo más cercano entre ellos.
¿Qué beneficios específicos se encuentran los afiliados a la caja de compensación familiar en los servicios educativos que ofrece la Fundación Universitaria?
Hay un primer gran criterio y es el económico. Tenemos programas cortos, certificaciones cortas, nuestra ETDH que es la Escuela de Desarrollo Humano, Formación para el Trabajo, que es una puerta de entrada al mundo de la educación. Hay becas para técnicos, tecnólogos y profesionales. Tenemos todo un modelo de bienestar integral que se ha fortalecido, pues la caja tiene sedes espectaculares con piscinas, con canchas de fútbol, con un panorama de bienestar inmenso al cual tanto nuestros alumnos como nuestras empresas pues tienen acceso. Muchos no conocen los beneficios, pero nuestros estudiantes tienen acceso a actividades gratuitas, como la natación, y pueden optar por emplearse o emprender, gracias a programas de apoyo y la agencia de empleo. Además, las pymes y mipymes que colaboran con la universidad reciben subsidios y otros beneficios por estar afiliados a la caja de compensación.
¿Qué representa el nuevo campus para la comunidad educativa y empresarial y cómo responde a los retos actuales del entorno económico y social?
El nuevo campus espectacular. Son 27 mil metros cuadrados en esta primera etapa. Es un gran mercado de la educación, la manera como está diseñado invita a que las personas quieran entrar y cuando digo las personas me refiero a todas. Tenemos la concepción de que la formación debe ir a lo largo de la vida, entonces pueden ir desde niños, adolescentes, personas adultas, adultos mayores, todos son invitados a este campus. Contamos con 53 laboratorios de aprendizaje donde de manera práctica se logra un nivel de incorporación al mundo empresarial, además a innovar, ensayar, equivocarse, regresar muy rápido y volver y prototipar y lanzarse al mercado con un tema mucho más maduro. La misión del campus es la de generar conciencia empresarial, respeto a la persona humana, porque son infraestructuras desarrolladas con todo lo último en tecnología y en materiales.
¿De qué forma el campus contribuye a fortalecer la apuesta de UCompensar por ofrecer una educación de calidad con enfoque en innovación y sostenibilidad?
La sostenibilidad es una realidad que se refleja en nuestro edificio, que cumple con los más altos estándares en el uso de energías renovables y manejo del agua. Este modelo vanguardista también implica un desafío en integrarlo al proceso de aprendizaje y llevarlo a las comunidades cercanas, para fomentar la conciencia sobre sostenibilidad. Ya comenzamos un trabajo con la comunidad desde diciembre para unir esfuerzos en este ámbito. Además, seguimos fortaleciendo la empleabilidad a través del modelo universidad-empresa y manteniendo la coherencia cultural dentro de nuestra oferta educativa, lo que nos diferencia.
¿Cuál es el diferencial del modelo educativo de UCompensar, y por qué es relevante promover esta integración universidad-empresa en el contexto colombiano?
En este modelo universidad-empresa tenemos una enorme responsabilidad. Por una parte, generar relaciones de mediano y largo plazo con el empresariado, entender qué es lo que pasa con esos sectores, leerlos mejor y entregar unos practicantes a trabajar con un modelo en investigación aplicada. Con un acompañamiento docente y participación del empresariado logramos fortalecer la productividad, entender sus problemáticas y responder desde la academia a esas realidades. Definitivamente, esa triada de caja de compensación, empresario y academia es una tremenda fortaleza.
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