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En Colombia, hablar de cooperativas es, muchas veces, evocar la imagen de organizaciones que nacieron hace décadas para fomentar el ahorro y la ayuda mutua Según el Reporte Anual del Sistema Financiero Cooperativo, los excedentes del sector crecieron un 43 % en 2024, alcanzando los $340 mil millones.. Sin embargo, este modelo —cimentado sobre la solidaridad y la participación colectiva— hoy vive un proceso de transformación silenciosa para adaptarse a los cambios sociales, generacionales y tecnológicos.
Pero ¿qué es exactamente una cooperativa? Es una organización sin ánimo de lucro que pertenece a quienes la integran. En una cooperativa, sus miembros son socios con voz y voto, y los excedentes no terminan en cuentas privadas, sino que se reinvierten en programas que benefician a la comunidad.
A diferencia de una entidad financiera tradicional, las cooperativas funcionan como redes de apoyo integral (360°), acompañando el proyecto de vida de las personas en todas sus etapas: cuando un niño aprende a ahorrar, cuando un joven quiere emprender, cuando una familia estabiliza su economía o cuando un adulto mayor necesita respaldo.
En este proceso de reinvención del cooperativismo, algunas organizaciones han logrado modernizarse sin perder su esencia. Coasmedas es una de ellas. Con más de 60 años de historia y presencia en 23 ciudades, ha apostado por un enfoque actual que combina su vocación social con herramientas digitales que hacen más ágiles y eficientes los procesos para sus asociados.
“Las personas hoy quieren más que un crédito o una cuenta de ahorro. Buscan confianza, propósito y un acompañamiento que les ayude a crecer en comunidad. Esa es la razón de ser del cooperativismo y la oportunidad de renovarlo”, afirma Carlos Herrán Perdomo, Gerente General de Coasmedas.
¿Qué hace una cooperativa?
En términos sencillos, una cooperativa:
- Promueve el ahorro responsable y la educación financiera.
- Ofrece soluciones de crédito con sentido solidario.
- Reinvierte sus excedentes en programas sociales, de salud y bienestar.
- Acompaña de manera integral, con un enfoque humano y cercano.
- Fortalece la comunidad, creando redes de apoyo sostenibles.
En el caso de Coasmedas, ese acompañamiento se traduce en iniciativas pensadas para cada etapa de la vida: programas infantiles (Coasmeditos), propuestas para jóvenes (Generación Tú), soluciones para adultos mayores (Ecosistema Silver) y un ecosistema de empleabilidad con inteligencia artificial.
Además, la incorporación de tecnología ha permitido agilizar trámites, optimizar servicios y facilitar la interacción con los asociados, consolidando un modelo cooperativo que combina cercanía, innovación y eficiencia.
Un modelo que vuelve a tomar relevancia
En un contexto donde la incertidumbre económica y la desconfianza son parte del panorama, las cooperativas demuestran que la economía puede seguir siendo una experiencia compartida. Y que, con innovación, propósito social y tecnología, este modelo puede evolucionar sin perder su esencia.
Coasmedas es ejemplo de ese cambio profundo que vive el cooperativismo colombiano: pasar de ser visto como una alternativa del pasado a consolidarse como una opción moderna y sostenible para quienes buscan algo más que productos financieros.