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En este 2024 el Ministerio de Minas y Energía alcanzó logros significativos que han marcado su compromiso con la construcción, como el presidente Gustavo Petro lo ha mencionado, del Gobierno del Cambio. Por ello, desde la dirección del ministro Andrés Camacho se ha impulsado una transformación energética y minera que beneficia a miles de ciudadanos.
En un gobierno donde la sostenibilidad y la inclusión social son más relevantes que nunca, el ministerio ha implementado proyectos que buscan no solo aumentar la capacidad de generación de energía limpia, sino también formalizar la minería y empoderar a las comunidades más vulnerables. Esto con una visión clara: construir un futuro energético justo, donde todos los colombianos, sin importar su ubicación geográfica, puedan acceder a servicios básicos como la electricidad.
“El presidente nos ha insistido en una tarea y es que la paz no se puede construir si no transformamos el territorio. Y un aspecto fundamental para transformarlo es la energía, sin ella los proyectos productivos que hoy vemos no podrían desarrollarse. Sin energía no tendríamos escuela, puesto de salud, ni luz en nuestros hogares”, señala el ministro Camacho.
Granjas solares y comunidades energéticas como impulso a la energía renovable
De acuerdo con esta cartera nacional, este año se logró la entrada en operación de 123 granjas solares, multiplicando por diez la generación de energía limpia en el país en comparación con 2022. Esto ha permitido alcanzar dos gigavatios (GW) de generación renovable solar, un paso crucial hacia la sostenibilidad energética.
Es así como, en el marco de la democratización de la energía, también se consolidó la apuesta por desarrollar Comunidades Energéticas, programa que ha alcanzado importantes logros, con 250 comunidades implementadas, destacando 149 en el departamento de La Guajira y 23 en Chocó, así como siete iniciativas en el sector de salud, una en un centro penitenciario y la primera comunidad energética conformada por firmantes de paz en Tumaco, en el departamento de Nariño.
Según las métricas de Minminas, más de 48.000 personas se benefician directamente de estas iniciativas, que buscan llevar energía a territorios marginados. “Estamos trabajando en dos líneas: garantizar que los proyectos de generación renovable de gran envergadura se desarrollen en el país, pero también asegurar que la energía para la gente llegue, mejorando su situación de ingreso económico, su competitividad, e incluso que puedan desarrollar proyectos para lo que hemos llamado una reactivación productiva de esa economía popular”, explica Camacho.
Un punto importante es que, según el mismo vocero del Gobierno, durante este año Colombia se ha convertido en un referente internacional gracias al programa Comunidades Energéticas, el cual está enfocado en reducir las inequidades territoriales a través de la capacidad del Estado para desarrollar proyectos de alto impacto de forma eficiente. Gracias a ello, poblaciones marginadas hoy gestionan su propia energía producto de la intervención del Gobierno nacional, desde donde se les apoya en la estructuración, financiamiento y acompañamiento técnico y social.
Ana Valencia Segura, docente de la Escuela Penitente en Guapi, en el litoral Pacífico del departamento del Cauca, exalta lo significativo que ha sido este apoyo. “Antes vivíamos con lámparas y velas. Los alimentos se tenían que comprar para el día porque no había cómo refrigerarlo, pero ahora vamos a tener una mejor calidad de vida y una mejor alimentación, porque ya hay cómo conservar los alimentos”, reconoce.
Distritos mineros para la vida y la paz
El Ministerio de Minas y Energía ha avanzado en la delimitación de ocho distritos mineros, promoviendo un modelo de formalización para la minería ancestral y tradicional. De acuerdo con sus reportes, hasta ahora más de 10.000 personas han sido formalizadas, lo que incluye el fortalecimiento de 75 asociaciones de mineros en todo el país.
James Lucumí, habitante de Suárez (Cauca), ha sido uno de los beneficiarios y destaca que estos distritos “nos ayudan a diferenciar cuáles son los sitios en los que podemos hacer minería y qué otros proyectos podemos hacer para que la gente no deje de hacer sus actividades económicas y para que podamos dejar las zonas donde se está afectando el medioambiente”.
En este escenario, Ilaro Cuero Mintano, sacerdote local, destaca que la comunidad está integrada con esta apuesta que busca formalizar también a los pequeños mineros. Este enfoque busca regularizar la actividad minera y ofrecer alternativas económicas sostenibles.
Avance en nuevos energéticos
Otro frente en el que ha avanzado este ministerio es el de innovación energética, con proyectos como la construcción de la planta de hidrógeno verde más grande del continente, en colaboración con Ecopetrol. Además, se han iniciado proyectos de exploración geotérmica, posicionando al país como un líder en energías renovables, asevera el ministro Camacho, quien resalta además que Colombia se destaca como el primer país latinoamericano en desarrollar un proceso competitivo para proyectos de energía eólica costa afuera. Apuesta en la que ocho empresas internacionales han radicado documentación ante la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), lo que representa una oportunidad significativa para diversificar las fuentes energéticas del país.
Estos son apenas algunos de los logros del Ministerio de Minas y Energía en 2024, los cuales son un testimonio del compromiso del gobierno del presidente Gustavo Petro con una transición energética justa y sostenible. Con estas iniciativas se está transformando no solo el acceso a servicios básicos como la electricidad, sino también las oportunidades económicas para miles de colombianos.
La implementación exitosa de estos proyectos resalta la capacidad del Estado para desarrollar soluciones efectivas que abordan las inequidades territoriales y promueven el bienestar social. Con un enfoque claro hacia el desarrollo sostenible y la inclusión social, Colombia avanza hacia un futuro energético más brillante y equitativo.