Publicidad

La rebelión de los “parias”

Miles de habitantes de la India, pertenecientes a la clase social más baja según la milenaria clasificación de castas del país, se rebelaron en contra del sistema.

Redacción Internacional
29 de mayo de 2008 - 10:38 p. m.

Durante varios días, miembros de la comunidad guijar han realizado grandes manifestaciones exigiendo a las autoridades revisar el sistema de castas, que los convierte en una comunidad paria, que no tiene acceso al sistema laboral, tampoco a viviendas y menos a atención médica.

Los guijar denunciaron que miembros de otra casta atacaron su pueblo, ubicado en la provincia de Rajasthan, al occidente de la India, y mataron a 37 personas, entre los que había mujeres, niños y ancianos. Como su bajo nivel social no les permite acceder a la justicia, los guijar decidieron denunciar los hechos públicamente y protestar contra la injusticia social de la que son víctimas.

Desde hace 3.500 años, la India adoptó un sistema de castas, que divide a la sociedad en cuatro grupos: los brahmines, compuesta por los sacerdotes y eruditos; siguen los kshatriya, que son los guerreros; los vaisyas, a la que pertenecen comerciantes y granjeros; y finalmente, los sudras, es decir, los trabajadores. Con el tiempo se creó otra clasificación y ésta es la de los dravidians o “intocables”, que está compuesta por la gente pobre, sin educación, que vive en pueblos lejanos y que se convirtieron en esclavos.

A esta última es a la que pertenecen los guijar, que decidieron rebelarse esta semana. Esas protestas, que con el paso de los días se han extendido por todo el país, tienen sorprendidas a las autoridades, pues por cuenta de las creencias hindúes, los miembros de esta casta aceptaron durante años su destino. “Es por cuenta del karma que la mayoría de gente en la India acepta su destino sin protestar, porque es parte del camino que su alma tiene que recorrer”, explicó a El Espectador Prashum Yadav, un profesor de idiomas en Nueva Delhi.

“Una persona solamente mejorará su situación kármica con el paso de los años, en otra vida, y reencarnará tantas veces como sea necesario para llegar a la casta más alta”, agregó Prashum.

Los gujjar buscan reclasificar su casta hereditaria a un nivel más alto, lo que les permitiría clasificar para trabajos en el gobierno y espacios en universidades que les son negados. El gobierno, sin embargo, ha rechazado sus demandas.

Y es que este tema de castas es tan complicado de manejar en el país que hasta el propio Mahatma Ghandi las defendía. En su obra Young India Ghandi escribió que las castas eran la única salvación del hinduismo. “Creo que las castas han salvado al hinduismo de la desintegración. Considero que solamente las cuatro divisiones son fundamentales, naturales y esenciales. Las subdivisiones fueron a veces convenientes, pero en general una hidra. Lo más pronto se unan, lo mejor… Pero estoy completamente en contra de cualquier intento de destrucción de las divisiones fundamentales”.

El país está conmocionado. Las manifestaciones han paralizado los caminos y los trenes entre Jaipur, la capital del estado, y Agra, donde se encuentra el Taj Mahal, así como a Mumbai, capital financiera de la India.

Por Redacción Internacional

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar