El Sevilla aprovechó la victoria de la semana pasada en el Camp Nou para frenar al supercampeón Barcelona y eliminarlo de la Copa del Rey, el primer torneo que pierde el club catalán desde mayo de 2008, cuando cayó ante el Manchester en la semifinal de la Liga de Campeones.
El miércoles, a los azulgranas no les alcanzó con la victoria 1-0 en el Sánchez Pizjuán de Sevilla, pero al menos vendieron cara su derrota en la serie de 180 minutos, definida porque los sevillanos hicieron dos goles como visitantes.
Además, Pep Guardiola perdió su primera eliminatoria desde que es entrenador barcelonista, aunque lo hizo siendo fiel a sus principios, al juego que ha deleitado al mundo.
De esa forma acarició la clasificación. Sobre todo, cuando Xavi Hernández dejó a tiro la clasificación con un gol en el minuto 64.
El Barcelona murió con honor y con gran fútbol, pero fue contenido por el empuje de su rival, que gozó de ocasiones en la primera mitad.
Tampoco logró darle vuelta a su situación el Valencia, que empató 2-2 en campo de Deportivo La Coruña, aunque disfrutó de la clasificación durante media hora. Pero no contó con la reacción del conjunto gallego después de que el serbio Nikola Zigic marcara los primeros dos goles.
Osasuna, Racing y Getafe también avanzaron a cuartos de final, así como lo había hecho el Celta.