Hora cero de testigo en caso Vargas Lleras

En julio de 2012, cuando comenzaba a desarrollar su gestión al frente del Ministerio de Vivienda, Germán Vargas Lleras empezó a ser investigado por la Procuraduría por presuntos nexos con el paramilitarismo. Días más tarde la Corte Suprema de Justicia hizo lo propio. Hace dos meses, justo cuando dejaba el gobierno, Vargas fue absuelto en ambas investigaciones. Ahora el turno les corresponde a quienes pretendieron enlodar al dirigente político, que a partir de mañana tendrán que comparecer ante la justicia a explicar su conducta.

Se trata del primer caso de resonancia nacional en el que la Fiscalía pretende establecer cómo operó una red de testigos falsos para tratar de comprometer al exministro Germán Vargas Lleras con los grupos de autodefensa. Por eso está prevista la audiencia de imputación de cargos y solicitud de medida de aseguramiento contra quien, según fuentes del ente investigador, fue el promotor de los falsos señalamientos contra el exministro. En concreto, contra el ganadero, caballista y empresario del Casanare Carlos Gabriel López Chaparro.

Cuando se anunciaron las investigaciones contra Vargas Lleras, éste sostuvo públicamente que las personas detrás del complot para desprestigiarlo eran Santiago Uribe Vélez y Carlos Gabriel López. Durante un año, tanto la Procuraduría como la Corte Suprema de Justicia indagaron tanto los señalamientos contra el dirigente político como su réplica contra Uribe y López. La conclusión fue admitir que sí existió un complot urdido por el empresario López, razón por la cual se le pidió a la Fiscalía que investigara los pormenores del caso.

“Todo parece indicar que el empresario ganadero Carlos Gabriel López Chaparro está detrás del entramado que se mueve a través de un verdadero cartel de testigos, otrora integrantes del grupo criminal de Martín Llanos, que como útiles eslabones se desplazan por instancias judiciales de la mano de su mentor y auspiciador para satisfacer oscuros propósitos”, resaltó literalmente la Corte Suprema de Justicia, que en mayo de 2013 dispuso además que se aclaren varios hechos de violencia ocurridos en el entorno del ganadero cuestionado.

Lo que pudo aclarar la justicia, y ahora cambia el rol de López Chaparro de denunciante a denunciado, es que sus actuaciones como impulsor de procesos judiciales empezó a finales de 2007, cuando un candidato a la Alcaldía  de Tauramena, que él había financiado, perdió las elecciones. El ganador de la contienda fue Javier Álvarez Alfonso, hermano de Milton Álvarez, exalcalde del mismo municipio entre 1998 y 2001. En medio del escándalo de la parapolítica, López la emprendió contra los hermanos Álvarez Alfonso.

Aunque Javier Álvarez gobernó en Tauramena hasta 2011, hasta el último día de su mandato se vio señalado por López, quien a través de cartas al DAS, la Fiscalía, la Procuraduría y la Presidencia pidió una y otra vez que lo investigaran por presuntos nexos con los paramilitares de Héctor Buitrago, alias Martín Llanos. El que sí terminó tras las rejas fue su hermano, el exalcalde Milton Álvarez, quien por  los señalamientos de  testigos fue capturado por la Dijín en junio de 2011, por el presunto delito de concierto para delinquir.

Para esa época Germán Vargas Lleras ya había sorteado con éxito una investigación promovida por la Fiscalía, a raíz de los comentarios del exparamilitar José Darío Ortega, alias Solín, quien llegó a decir que el dirigente político se había reunido con alias Martín Llanos. Cuando el ente investigador encaró a Solín, para que ratificara su testimonio, éste manifestó que nunca había mencionado a Germán Vargas. En consecuencia, la Fiscalía dictó una resolución inhibitoria en su favor, sin que tomara medidas contra alias Solín.

El tiempo siguió transcurriendo y sucedió lo inesperado: los testigos que habían participado en los señalamientos contra los hermanos Álvarez se empezaron a retractar y admitieron que el promotor de sus actuaciones había sido el ganadero Carlos Gabriel López. Inicialmente, este giro judicial favoreció al detenido exalcalde de Tauramena, Milton Álvarez, pero con el correr de los días esta sucesión de testigos echándose para atrás fue clave para aclarar de dónde venían los señalamientos contra el exministro Germán Vargas.

Cuando la Procuraduría y la Corte Suprema anunciaron sendas investigaciones contra Vargas Lleras, en julio de 2012, paradójicamente empezaba a tomar forma el juicio contra Milton Álvarez por presuntos nexos con el paramilitarismo y fue en el curso de esta audiencia pública en Yopal (Casanare) cuando se empezó a esclarecer el caso del exministro. Primero, porque el testigo John Alexánder Camacho, alias Barbas, aceptó que había dicho mentiras para incriminar a Álvarez, pues así se lo había exigido alias Solín.

Además, el testigo aclaró que existió otro atractivo para señalar a Milton Alvarez: iba a recibir dinero del ganadero Carlos López. El juez de Yopal aprovechó para preguntarle al testigo si había pasado algo semejante respecto al político Germán Vargas. Alías Barbas contestó: “La verdad sí, doctor, fui contactado por Solín, quien me dijo que si le colaboraba a embalar a Germán Vargas, dejábamos el problema de Milton Álvarez a un lado y no iban a atentar contra mi vida”. El declarante añadió que otros exparamilitares iban a hacer lo mismo.

Otros que fueron citados a la audiencia admitieron que, con el apoyo de los investigadores de la Dijín Franky Márquez Duarte y Javier Gaona, el ganadero Carlos López había sido el personaje detrás de los falsos señalamientos contra Milton Álvarez. El 2 de mayo de 2013, el Juzgado Único Especializado de Yopal absolvió al exalcalde de Tauramena y reconoció la existencia de los testigos direccionados por López. Esa decisión, sumada a las propias pesquisas de la Procuraduría y la Corte Suprema, terminaron por favorecer al exministro Germán Vargas.

Por ejemplo, la Corte escuchó al extraditado ganadero del Casanare Néstor Ramón Caro, de quien Carlos López había dicho lo había visto departiendo en Yopal con Germán Vargas. El condenado narcotraficante negó de plano esa aseveración. A su vez la Procuraduría aportó el testimonio del condenado mayor del Ejército César Maldonado, quien aseguró que en la cárcel de La Picota fue abordado por un exparamilitar para exigirle que declarara contra Vargas Lleras. Lo mismo que dijo otro testigo del Ministerio Público.

Todas estas evidencias llevaron a la Procuraduría y a la Corte Suprema de Justicia a absolver al exministro Germán Vargas Lleras en mayo pasado. Sin embargo, la Corte decidió ir más allá y ordenó copias a la Fiscalía para investigar no sólo a los testigos falsos, sino otras extrañas situaciones que salieron a relucir en medio de sus averiguaciones. Tres meses después esa es la razón por la cual a partir de mañana la Fiscalía imputará cargos al ganadero Carlos Gabriel López como presunto gestor del montaje.

La declaración en la Corte Suprema de Justicia

“Hubo una famosa reunión en el coliseo Mauricio Naranjo de Yopal, donde el principal personaje era el doctor Germán Vargas Lleras y, como coincidencia, todos los señores presos por parapolítica, como son Óscar Wilches, Miguel Ángel Pérez, William Pérez (...) La fiesta se hizo en la casa de don Andrés Rueda”. Eso dijo el ganadero boyacense Carlos Gabriel López Chaparro ante la Corte Suprema de Justicia el 18 de julio de 2012 al ser interrogado sobre los supuestos nexos de Vargas Lleras con los grupos de autodefensa.

En otro aparte de su declaración, López señaló, frente a supuestos vínculos del exministro con el jefe paramilitar del Casanare Martín Llanos que: “Yo contra el doctor Vargas Lleras lo único que sé es eso. Ustedes deciden si tiene o no relaciones. No podía nadie hacer política sino con la orden y bendición de Martín Llanos. Al que se oponía lo mataban”. Y en posteriores declaraciones ante la justicia, Llanos negó vínculos con el exministro Vargas.

nquevedo@elespectador.com

@norbeyquevedo

En julio de 2012, cuando comenzaba a desarrollar su gestión al frente del Ministerio de Vivienda, Germán Vargas Lleras empezó a ser investigado por la Procuraduría por presuntos nexos con el paramilitarismo. Días más tarde la Corte Suprema de Justicia hizo lo propio. Hace dos meses, justo cuando dejaba el gobierno, Vargas fue absuelto en ambas investigaciones. Ahora el turno les corresponde a quienes pretendieron enlodar al dirigente político, que a partir de mañana tendrán que comparecer ante la justicia a explicar su conducta.

Se trata del primer caso de resonancia nacional en el que la Fiscalía pretende establecer cómo operó una red de testigos falsos para tratar de comprometer al exministro Germán Vargas Lleras con los grupos de autodefensa. Por eso está prevista la audiencia de imputación de cargos y solicitud de medida de aseguramiento contra quien, según fuentes del ente investigador, fue el promotor de los falsos señalamientos contra el exministro. En concreto, contra el ganadero, caballista y empresario del Casanare Carlos Gabriel López Chaparro.

Cuando se anunciaron las investigaciones contra Vargas Lleras, éste sostuvo públicamente que las personas detrás del complot para desprestigiarlo eran Santiago Uribe Vélez y Carlos Gabriel López. Durante un año, tanto la Procuraduría como la Corte Suprema de Justicia indagaron tanto los señalamientos contra el dirigente político como su réplica contra Uribe y López. La conclusión fue admitir que sí existió un complot urdido por el empresario López, razón por la cual se le pidió a la Fiscalía que investigara los pormenores del caso.

“Todo parece indicar que el empresario ganadero Carlos Gabriel López Chaparro está detrás del entramado que se mueve a través de un verdadero cartel de testigos, otrora integrantes del grupo criminal de Martín Llanos, que como útiles eslabones se desplazan por instancias judiciales de la mano de su mentor y auspiciador para satisfacer oscuros propósitos”, resaltó literalmente la Corte Suprema de Justicia, que en mayo de 2013 dispuso además que se aclaren varios hechos de violencia ocurridos en el entorno del ganadero cuestionado.

Lo que pudo aclarar la justicia, y ahora cambia el rol de López Chaparro de denunciante a denunciado, es que sus actuaciones como impulsor de procesos judiciales empezó a finales de 2007, cuando un candidato a la Alcaldía  de Tauramena, que él había financiado, perdió las elecciones. El ganador de la contienda fue Javier Álvarez Alfonso, hermano de Milton Álvarez, exalcalde del mismo municipio entre 1998 y 2001. En medio del escándalo de la parapolítica, López la emprendió contra los hermanos Álvarez Alfonso.

Aunque Javier Álvarez gobernó en Tauramena hasta 2011, hasta el último día de su mandato se vio señalado por López, quien a través de cartas al DAS, la Fiscalía, la Procuraduría y la Presidencia pidió una y otra vez que lo investigaran por presuntos nexos con los paramilitares de Héctor Buitrago, alias Martín Llanos. El que sí terminó tras las rejas fue su hermano, el exalcalde Milton Álvarez, quien por  los señalamientos de  testigos fue capturado por la Dijín en junio de 2011, por el presunto delito de concierto para delinquir.

Para esa época Germán Vargas Lleras ya había sorteado con éxito una investigación promovida por la Fiscalía, a raíz de los comentarios del exparamilitar José Darío Ortega, alias Solín, quien llegó a decir que el dirigente político se había reunido con alias Martín Llanos. Cuando el ente investigador encaró a Solín, para que ratificara su testimonio, éste manifestó que nunca había mencionado a Germán Vargas. En consecuencia, la Fiscalía dictó una resolución inhibitoria en su favor, sin que tomara medidas contra alias Solín.

El tiempo siguió transcurriendo y sucedió lo inesperado: los testigos que habían participado en los señalamientos contra los hermanos Álvarez se empezaron a retractar y admitieron que el promotor de sus actuaciones había sido el ganadero Carlos Gabriel López. Inicialmente, este giro judicial favoreció al detenido exalcalde de Tauramena, Milton Álvarez, pero con el correr de los días esta sucesión de testigos echándose para atrás fue clave para aclarar de dónde venían los señalamientos contra el exministro Germán Vargas.

Cuando la Procuraduría y la Corte Suprema anunciaron sendas investigaciones contra Vargas Lleras, en julio de 2012, paradójicamente empezaba a tomar forma el juicio contra Milton Álvarez por presuntos nexos con el paramilitarismo y fue en el curso de esta audiencia pública en Yopal (Casanare) cuando se empezó a esclarecer el caso del exministro. Primero, porque el testigo John Alexánder Camacho, alias Barbas, aceptó que había dicho mentiras para incriminar a Álvarez, pues así se lo había exigido alias Solín.

Además, el testigo aclaró que existió otro atractivo para señalar a Milton Alvarez: iba a recibir dinero del ganadero Carlos López. El juez de Yopal aprovechó para preguntarle al testigo si había pasado algo semejante respecto al político Germán Vargas. Alías Barbas contestó: “La verdad sí, doctor, fui contactado por Solín, quien me dijo que si le colaboraba a embalar a Germán Vargas, dejábamos el problema de Milton Álvarez a un lado y no iban a atentar contra mi vida”. El declarante añadió que otros exparamilitares iban a hacer lo mismo.

Otros que fueron citados a la audiencia admitieron que, con el apoyo de los investigadores de la Dijín Franky Márquez Duarte y Javier Gaona, el ganadero Carlos López había sido el personaje detrás de los falsos señalamientos contra Milton Álvarez. El 2 de mayo de 2013, el Juzgado Único Especializado de Yopal absolvió al exalcalde de Tauramena y reconoció la existencia de los testigos direccionados por López. Esa decisión, sumada a las propias pesquisas de la Procuraduría y la Corte Suprema, terminaron por favorecer al exministro Germán Vargas.

Por ejemplo, la Corte escuchó al extraditado ganadero del Casanare Néstor Ramón Caro, de quien Carlos López había dicho lo había visto departiendo en Yopal con Germán Vargas. El condenado narcotraficante negó de plano esa aseveración. A su vez la Procuraduría aportó el testimonio del condenado mayor del Ejército César Maldonado, quien aseguró que en la cárcel de La Picota fue abordado por un exparamilitar para exigirle que declarara contra Vargas Lleras. Lo mismo que dijo otro testigo del Ministerio Público.

Todas estas evidencias llevaron a la Procuraduría y a la Corte Suprema de Justicia a absolver al exministro Germán Vargas Lleras en mayo pasado. Sin embargo, la Corte decidió ir más allá y ordenó copias a la Fiscalía para investigar no sólo a los testigos falsos, sino otras extrañas situaciones que salieron a relucir en medio de sus averiguaciones. Tres meses después esa es la razón por la cual a partir de mañana la Fiscalía imputará cargos al ganadero Carlos Gabriel López como presunto gestor del montaje.

La declaración en la Corte Suprema de Justicia

“Hubo una famosa reunión en el coliseo Mauricio Naranjo de Yopal, donde el principal personaje era el doctor Germán Vargas Lleras y, como coincidencia, todos los señores presos por parapolítica, como son Óscar Wilches, Miguel Ángel Pérez, William Pérez (...) La fiesta se hizo en la casa de don Andrés Rueda”. Eso dijo el ganadero boyacense Carlos Gabriel López Chaparro ante la Corte Suprema de Justicia el 18 de julio de 2012 al ser interrogado sobre los supuestos nexos de Vargas Lleras con los grupos de autodefensa.

En otro aparte de su declaración, López señaló, frente a supuestos vínculos del exministro con el jefe paramilitar del Casanare Martín Llanos que: “Yo contra el doctor Vargas Lleras lo único que sé es eso. Ustedes deciden si tiene o no relaciones. No podía nadie hacer política sino con la orden y bendición de Martín Llanos. Al que se oponía lo mataban”. Y en posteriores declaraciones ante la justicia, Llanos negó vínculos con el exministro Vargas.

nquevedo@elespectador.com

@norbeyquevedo