Entre cantos, bailes y tambores, vive la población de San Basilio de Palenque. En este corregimiento del departamento de Bolívar, Colombia, persisten tradiciones culturales de raíces africanas que se remontan a la Colonia y a las luchas cimarronas contra el sistema esclavista, por ello es considerado “el primer pueblo libre de América”. (Le puede interesar: “Las palenqueras ya no se ven en el día a día cartagenero”: historiador)
La música y el tambor han sido formas de expresión de libertad, elementos transversales a la identidad palenquera que junto con otras formas culturales ayudaron a que fuera declarado como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Es así como en este recorrido cinematográfico, artistas, cantadoras y pobladores resaltan la importancia de la música y su vínculo con el ser palenquero, su estrecha relación con la lengua criolla y su transmisión de generación en generación. Pero también se desvelan los miedos a la pérdida cultural y la necesidad de preservarla, por lo que esto se convierte en un compromiso y una resistencia por parte de la comunidad.
“Los Hijos del Tambor” comienza mostrando esa relación, casi intrínseca, que existe entre la música y los habitantes de San Basilio de Palenque. El tambor ha sido la herencia africana que ha acompañado a esta comunidad en la creación de su música tradicional. Al igual que la lengua, que sirvió como forma de resistencia ante los hechos violentos del pasado colonial y que actualmente se constituye como un elemento indispensable de su identidad. (Puede leer: Las palenqueras en los barrios populares, ¿en vía de extinción?)
Bajo esta idea, la música ha sido una herramienta para la comunidad a la hora de enfrentar amenazas como la esclavitud, el conflicto armado y la discriminación. De este modo, algunos palenqueros consideran esta expresión artística como una forma de “libertad”, la cual les ha ayudado a identificarse, a crear lazos de unidad y a preservar la memoria colectiva.
Juan Carlos Hernández
