A la cárcel chef que dejó en cuidados intensivos a su pareja sentimental
El hombre golpeó en repetidas oportunidades a la joven de 29 años.
El Espectador
El juez 41 de garantías cobijo con medida de aseguramiento en centro carcelario a Jorge Armando Echeverry quien el pasado 4 de mayo golpeó violentamente a su pareja sentimental en plena vía pública.
Según la Fiscalía General, el hombre de 30 años, quien es modelo y chef, sostuvo una fuerte discusión con su pareja. En el momento en que ella iba a tomar un taxi, el ahora procesado la agarró del pelo, la alzó y luego la tiró al piso.
Pese a que estaba en estado de indefensión, el sujeto le pegó puntapiés en diferentes partes de su cuerpo causándole un trauma craneoencefálico. La joven se encuentra actualmente en la Clínica en La Colina en el norte de Bogotá.
En la diligencia Echeverry no aceptó su responsabilidad en el delito de tentativa de homicidio con lesiones personales imputado por la Fiscalía General.
La funcionaria judicial consideró que el procesado representa un peligro para la sociedad, puesto que en su contra se adelantan otras siete investigaciones por los delitos de lesiones personales, hurto y agresión.
El juez 41 de garantías cobijo con medida de aseguramiento en centro carcelario a Jorge Armando Echeverry quien el pasado 4 de mayo golpeó violentamente a su pareja sentimental en plena vía pública.
Según la Fiscalía General, el hombre de 30 años, quien es modelo y chef, sostuvo una fuerte discusión con su pareja. En el momento en que ella iba a tomar un taxi, el ahora procesado la agarró del pelo, la alzó y luego la tiró al piso.
Pese a que estaba en estado de indefensión, el sujeto le pegó puntapiés en diferentes partes de su cuerpo causándole un trauma craneoencefálico. La joven se encuentra actualmente en la Clínica en La Colina en el norte de Bogotá.
En la diligencia Echeverry no aceptó su responsabilidad en el delito de tentativa de homicidio con lesiones personales imputado por la Fiscalía General.
La funcionaria judicial consideró que el procesado representa un peligro para la sociedad, puesto que en su contra se adelantan otras siete investigaciones por los delitos de lesiones personales, hurto y agresión.