Abogado Diego Cadena quiere que la Fiscalía lo escuche en interrogatorio

El abogado Diego Cadena, quien representaba al senador Álvaro Uribe, está en el ojo del huracán luego de que se conociera que le entregó dineros al exparamilitar Carlos Enrique Vélez, alias Comandante Víctor. Cadena siempre ha dicho que se trataba de “subsidios” y “viáticos” que le suministró a Vélez por razones humanitarias. Sin embargo, cuando la Corte Suprema le abrió una investigación formal al expresidente Uribe por supuesta manipulación de testigos, le pidió a la Fiscalía que investigara a Cadena. Ahora, el abogado quiere que el ente investigador lo escuche.

(Lea también: La defensa de Diego Cadena en el caso Álvaro Uribe)

Cadena le escribió una carta al fiscal general (e) Fabio Espitia, en la cual se lee: “Con el debido respeto solicito a su Señoría autorización de ser escuchado en interrogatorio”. El abogado, por su parte dice en el documento que una de las compulsas de copias con las que la Corte pide que lo investiguen se basó en las declaraciones del exparamilitar Vélez, quien en una reciente declaración aseguró que el dinero que le entregó el abogado era para que hablara a favor de Uribe. 

El abogado califica lo dicho por Vélez de “dichos mendaces”. Por ello, le solicita al ente investigador que le dé la oportunidad “de acreditar que éste (Vélez) incurrió en los punibles de extorsión, fraude procesal y falso testimonio” y se compromete a entregar los documentos que demuestran sus señalamientos en el momento del interrogatorio.

Según dijo la Corte Suprema en el documento en el que oficializó que le abriría una investigación formal a Uribe, Cadena ha “contactado en diferentes cárceles -y por fuera de ellas-a exmiembros de grupos paramilitares para que -a cambio de favores jurídicos y al parecer dinero-, elaboren escritos y videos a favor del senador Álvaro Uribe y de su hermano Santiago”. En el documento, Cadena se refiere al caso puntual de Vélez, quien, dice, “demostró ser una persona sin principios... un bandido”.

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Es decir, la carta es, por un lado, una expresión de su voluntad de comparecer ante la justicia. “Siempre he estado presto a acudir al llamado de la justicia, y he comparecido sin excusa alguna ante diferentes autoridades, a efectos de esclarecer la verdad. Situación que es y seguirá siendo de mi total interés. Cuente desde ya en lo que pueda servir para tal fin”, se lee en el documento de 15 páginas. Y, por otro lado, casi que una denuncia formal en contra de Vélez, pues desde la segunda página, el abogado procede a contar su versión sobre sus encuentros y conversaciones con Vélez.

Vélez, dicho sea de paso, es uno de los testigos claves en este caso. En un principio, declaró en contra del senador Iván Cepeda en el caso por supuesta manipulación de exparamilitares para que hablaran en contra del expresidente Uribe. Durante más de un año aseguró que había presenciado cómo el senador Cepeda iba por las prisiones ofreciendo prebendas para quienes testificaran en contra de Santiago Uribe, hermano del líder de Centro Democrático, por el caso de los Doce Apóstoles. Cuando la Corte archivó esa denuncia y le abrió una investigación a Uribe, Vélez también fue llamado a declarar y, en esa ocasión, dejó mal parado a Cadena.

El abogado inicia su relato de lo que ocurrió asegurando que conoció a Vélez a través de una persona presa en la cárcel La Picota. Posteriormente, el exparamilitar, “de mala fe, indujo que fuera visitado en su centro de reclusión para suministrar información con destino al proceso que se tramita contra el Dr. Álvaro Uribe Vélez. En efecto, suscribió tres declaraciones escritas dando fe de hechos y circunstancias, que a la postre desvirtuó en diligencia de declaración ante la Corte Suprema de Justicia”. Además, según Cadena, Vélez le contó que el senador “ofrecía traslados en el Inpec y asilos en Europa especialmente en Suiza” a quienes declararan contra Uribe.

(En contexto: El testimonio que comprometería a Diego Cadena por manipulación de testigos en el caso Uribe)

Vélez le manifestó que su hijo estaba enfermo, entre otras dificultades, a lo que Cadena, dice, le dio dinero para viáticos y recargas de minutos a un celular, por “razones humanitarias”. El exparamilitar, mientras tanto, colaboró. Incluso, se comprometió a entregarle la boleta que comprobaba la supuesta visita de Cepeda a La Picota. Sin embargo, esto nunca ocurrió y, en su lugar, cuando Cadena se reunió con el abogado de Vélez, solamente recibió una nueva declaración y una de las primeras alertas, pues el hombre le dijo que su cliente era “bipolar y complicado”.

La relación finalmente se terminó cuando Vélez le pidió a Cadena $60 millones, según cuenta el abogado. Al parecer, el exparamilitar lo amenazó diciendo que, si no le daban el dinero que exigía, hablaría “de una masacre en Riosucio” y, en el documento, Cadena expone numerosos textos que, asegura, son los mensajes que le enviaba Vélez. Cuando el abogado se negó rotundamente a entregar el dinero, según cuenta, Vélez le dijo que lo iba a “embalar” con los recibos de los viáticos que le giró. Todo este relato, según Cadena, se une a que Vélez tiene cinco procesos en la Fiscalía: cuatro por falso testimonio y otro por soborno en actuación procesal.

El abogado Diego Cadena, quien representaba al senador Álvaro Uribe, está en el ojo del huracán luego de que se conociera que le entregó dineros al exparamilitar Carlos Enrique Vélez, alias Comandante Víctor. Cadena siempre ha dicho que se trataba de “subsidios” y “viáticos” que le suministró a Vélez por razones humanitarias. Sin embargo, cuando la Corte Suprema le abrió una investigación formal al expresidente Uribe por supuesta manipulación de testigos, le pidió a la Fiscalía que investigara a Cadena. Ahora, el abogado quiere que el ente investigador lo escuche.

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Cadena le escribió una carta al fiscal general (e) Fabio Espitia, en la cual se lee: “Con el debido respeto solicito a su Señoría autorización de ser escuchado en interrogatorio”. El abogado, por su parte dice en el documento que una de las compulsas de copias con las que la Corte pide que lo investiguen se basó en las declaraciones del exparamilitar Vélez, quien en una reciente declaración aseguró que el dinero que le entregó el abogado era para que hablara a favor de Uribe. 

El abogado califica lo dicho por Vélez de “dichos mendaces”. Por ello, le solicita al ente investigador que le dé la oportunidad “de acreditar que éste (Vélez) incurrió en los punibles de extorsión, fraude procesal y falso testimonio” y se compromete a entregar los documentos que demuestran sus señalamientos en el momento del interrogatorio.

Según dijo la Corte Suprema en el documento en el que oficializó que le abriría una investigación formal a Uribe, Cadena ha “contactado en diferentes cárceles -y por fuera de ellas-a exmiembros de grupos paramilitares para que -a cambio de favores jurídicos y al parecer dinero-, elaboren escritos y videos a favor del senador Álvaro Uribe y de su hermano Santiago”. En el documento, Cadena se refiere al caso puntual de Vélez, quien, dice, “demostró ser una persona sin principios... un bandido”.

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Es decir, la carta es, por un lado, una expresión de su voluntad de comparecer ante la justicia. “Siempre he estado presto a acudir al llamado de la justicia, y he comparecido sin excusa alguna ante diferentes autoridades, a efectos de esclarecer la verdad. Situación que es y seguirá siendo de mi total interés. Cuente desde ya en lo que pueda servir para tal fin”, se lee en el documento de 15 páginas. Y, por otro lado, casi que una denuncia formal en contra de Vélez, pues desde la segunda página, el abogado procede a contar su versión sobre sus encuentros y conversaciones con Vélez.

Vélez, dicho sea de paso, es uno de los testigos claves en este caso. En un principio, declaró en contra del senador Iván Cepeda en el caso por supuesta manipulación de exparamilitares para que hablaran en contra del expresidente Uribe. Durante más de un año aseguró que había presenciado cómo el senador Cepeda iba por las prisiones ofreciendo prebendas para quienes testificaran en contra de Santiago Uribe, hermano del líder de Centro Democrático, por el caso de los Doce Apóstoles. Cuando la Corte archivó esa denuncia y le abrió una investigación a Uribe, Vélez también fue llamado a declarar y, en esa ocasión, dejó mal parado a Cadena.

El abogado inicia su relato de lo que ocurrió asegurando que conoció a Vélez a través de una persona presa en la cárcel La Picota. Posteriormente, el exparamilitar, “de mala fe, indujo que fuera visitado en su centro de reclusión para suministrar información con destino al proceso que se tramita contra el Dr. Álvaro Uribe Vélez. En efecto, suscribió tres declaraciones escritas dando fe de hechos y circunstancias, que a la postre desvirtuó en diligencia de declaración ante la Corte Suprema de Justicia”. Además, según Cadena, Vélez le contó que el senador “ofrecía traslados en el Inpec y asilos en Europa especialmente en Suiza” a quienes declararan contra Uribe.

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Vélez le manifestó que su hijo estaba enfermo, entre otras dificultades, a lo que Cadena, dice, le dio dinero para viáticos y recargas de minutos a un celular, por “razones humanitarias”. El exparamilitar, mientras tanto, colaboró. Incluso, se comprometió a entregarle la boleta que comprobaba la supuesta visita de Cepeda a La Picota. Sin embargo, esto nunca ocurrió y, en su lugar, cuando Cadena se reunió con el abogado de Vélez, solamente recibió una nueva declaración y una de las primeras alertas, pues el hombre le dijo que su cliente era “bipolar y complicado”.

La relación finalmente se terminó cuando Vélez le pidió a Cadena $60 millones, según cuenta el abogado. Al parecer, el exparamilitar lo amenazó diciendo que, si no le daban el dinero que exigía, hablaría “de una masacre en Riosucio” y, en el documento, Cadena expone numerosos textos que, asegura, son los mensajes que le enviaba Vélez. Cuando el abogado se negó rotundamente a entregar el dinero, según cuenta, Vélez le dijo que lo iba a “embalar” con los recibos de los viáticos que le giró. Todo este relato, según Cadena, se une a que Vélez tiene cinco procesos en la Fiscalía: cuatro por falso testimonio y otro por soborno en actuación procesal.