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El procurador general, Gregorio Eljach, confirmó que la Procuraduría abrió varias indagaciones preliminares sobre el presunto caso de abuso de poder de Beatriz Gómez Consuegra, esposa del ministro de Salud, Guillermo Jaramillo, y funcionaria de la Superintendencia de Salud. El jefe del Ministerio Público explicó que, por ahora, la entidad está recopilando elementos probatorios para definir si hay mérito para abrir investigaciones formales.
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La decisión de la Procuraduría se conoce días después de una investigación periodística que reveló que, al parecer, Gómez estaría ejerciendo presiones ilegales sobre funcionarios y forzando la firma de contratos sin los requisitos legales. La esposa del ministro es superintendente delegada para prestadores de servicios de la Supersalud, donde se estarían dando los presuntos casos de abuso de poder.
La publicación de prensa se conoció el pasado domingo 6 de abril, cuando el periodista Daniel Coronell contó que la esposa del ministro “se está tomando atribuciones que no le corresponden y presionando a funcionarios a adoptar decisiones multimillonarias de manera exprés, sin oír razones legales, bajo amenazas y en términos descomedidos”. Uno de los ejemplos fue el de un proyecto $55.000 millones para adquirir un buque hospital que sirviera a las comunidades apartadas del Amazonas.
¡Buenas noticias para el corazón de la Amazonía! La 𝐄𝐒𝐄 𝐒𝐚𝐧 𝐑𝐚𝐟𝐚𝐞𝐥 𝐝𝐞 𝐋𝐞𝐭𝐢𝐜𝐢𝐚 tendrá un 𝐁𝐮𝐪𝐮𝐞 𝐇𝐨𝐬𝐩𝐢𝐭𝐚𝐥 𝐅𝐥𝐮𝐯𝐢𝐚𝐥 que navegará por los principales ríos, llevando atención primaria en #Salud a todas las comunidades que habitan las laderas y… pic.twitter.com/1hSn2EYWDg
— MinSalud Colombia 🇨🇴 (@MinSaludCol) August 2, 2024
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La inversión, en cabeza del Ministerio de Salud, se fue embolatando con el paso del tiempo. Hubo problemas de sobrecostos, errores en el papeleo, discusiones burocráticas, hasta que finalmente fue evidente que el costo de la operación no estaba garantizada. Ante el panorama, la agente interventora del proyecto, Lina Baracaldo, advirtió que los riesgos hacían imposible la suscripción del convenio porque el Hospital Fluvial no iba a tener fondos suficientes para operar.
Lo que relató Coronell es que Gómez Consuegra empezó a presionar para que el contrato se firmara a como diera lugar. “Ustedes firman hoy... o mañana me presentan la renuncia. Es más de una vez”, fueron los términos de la esposa del ministro. Los funcionarios que debían cumplir esa orden se opusieron y, al recibir la amenaza de la funcionaria de la Supersalud, grabaron una de esas conversaciones.
Gómez Consuegra explicó que no podía reconocer la voz de esa llamada, aunque Daniel Coronell explicó que escuchó a la misma persona, tanto en el audio grabado como su comunicación con la funcionaria. Al rechazar la amenaza de Gómez Consuegra, la interventora Lina Baracaldo perdió su trabajo. Los detalles de esas conversaciones ya los está revisando la Procuraduría para definir si abre o no una investigación formal contra Gómez Consuegra u otros funcionarios públicos.
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