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Un juez penal especializado de Bucaramanga (Santander) condenó a 20 años de prisión al exjefe paramilitar Carlos Mario Jiménez Naranjo, más conocido como “Macaco”, por su participación en al menos 141 hechos delictivos que él mismo aceptó y que se ejecutaron durante su jefatura al frente del Bloque Central Bolívar de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
El juzgado santandereano lo declaró responsable de los delitos de homicidio agravado, homicidio en persona protegida, desaparición forzada agravada, desplazamiento forzado, tortura en persona protegida, acceso carnal violento en persona protegida, acceso carnal violento, secuestro simple agravado, reclutamiento ilícito y deportación, expulsión, traslado o desplazamiento forzado de población civil.
Además, se le negó al exjefe paramilitar la suspensión condicional de la pena y el beneficio de prisión domiciliaria, por lo que deberá permanecer privado de la libertad en establecimiento carcelario. La sanción en contra de “Macaco” también incluye el pago de una multa equivalente a 25.000 salarios mínimos legales mensuales vigentes.
Durante la investigaciones, la Fiscalía encontró que Jiménez Naranjo ordenó y conoció de primera mano los graves crímenes cometidos por estructuras paramilitares que estaban a su cargo en los departamentos de Antioquia, Bolívar, Caquetá, Cundinamarca, Nariño, Norte de Santander, Santander y Risaralda.
De acuerdo con el ente investigador, tanto “Macaco” como otros líderes de las Autodefensas instauraron una estrategia sistemática que consistía en eliminar y desaparecer a todos aquellos que se opusieran a su organización, lo que dejó un saldo de 237 víctimas acreditadas entre 2000 y 2005.
Los crímenes
Entre los crímenes ordenados -o conocidos- por Jiménez Naranjo destacan los homicidios del concejal de Barrancabermeja (Santander), Héctor Mantilla Rodríguez, cometido el 11 de agosto de 2000, así como del periodista Flavio Iván Bedoya Sarria, perpetrado el 27 de abril de 2001, en Tumaco (Nariño).
También se tuvo en cuenta el asesinato del periodista Eduardo Estrada Gutiérrez, ocurrido el 16 de julio de 2001 en San Pablo (Sur de Bolívar); el homicidio del investigador del CTI Orlando Torres Losada, ocurrido el 19 de septiembre de 2002, en Florencia (Caquetá) y el asesinato de los integrantes de la Unión Patriótica (UP), Arsenio Paloma y Oleider Paloma Viuche, perpetrado el 26 de marzo de 2002, en La Montañita (Caquetá).
A alias “Macaco” también se le endilga responsabilidad por el desplazamiento forzado de los residentes de la hacienda Las Pavas, en el Sur de Bolívar. Hecho conocido en septiembre de 2003. Así mismo, el Juzgado analizó varios casos de violencia de género, mediante los cuales el exjefe paramilitar y quienes estaban bajo su mando generaron intimidación y sometieron a las comunidades.
En ese sentido, el tribunal santandereano estudió un caso de acceso carnal violento, secuestro y desplazamiento de una mujer n San Martín de Loba (Bolívar), el 6 de junio de 2000; el homicidio de las hermanas Yenny Patricia, Mónica Liliana, Nelsy Milena y María Nelly Galárraga Meneses, asesinadas en Putumayo el 1 de enero de 2001; el abuso sexual a una joven en Barrancabermeja (Santander), el 14 de julio de 2002 y un caso de tortura acceso carnal violento y desplazamiento forzado de una mujer en San Pablo (Bolívar), el 5 de noviembre de 2004.
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