Archivan investigación contra Lucero Cortés por tráfico de influencias
La representante a la Cámara era investigada por supuestas presiones para reabrir un proceso por estafa en contra de los socios de su esposo.
El Espectador
Al considerar que no se allegaron pruebas suficientes, la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia archivó la investigación contra la suspendida congresista Lucero Cortés por el delito de tráfico de influencias contra servidor público.
Según el alto tribunal, durante la indagación no se pudo comprobar que la representante a la Cámara por Bogotá haya influido ante los magistrados de la Corte Constitucional y la Defensoría del Pueblo para que “sometieran a revisión y revocaran” los fallos de tutela dentro de un trámite promovido por su esposo, Manuel Arturo Rincón, contra la fiscalía 22 de la unidad delegada ante el Tribunal Superior de Bogotá.
“Al proceso no se allegó ninguna prueba que señale así fuese por vía indiciaria o inferencial, que por parte de la aforada se utilizó abusiva o ilegalmente la posición política que ejercía como Congresista, con el fin de conseguir beneficios o ventajas ante la Defensoría del Pueblo o los Magistrados de la Corte Constitucional”, precisa la decisión.
Se señala además que la decisión final en el proceso fue en parte “por la petición de insistencia; menos aún, que la revocatoria del recurso de amparo se lograra por la utilización indebida de atribuciones emanadas del cargo de Legisladora”.
Sin embargo, por hechos similiares la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia llamó a juicio a la congresista, Lucero Cortés, por supuesto tráfico de influencias.
La representante a la Cámara por Bogotá es investigada por haber presionado presuntamente a magistrados del Consejo Superior de la Judicatura en una tutela interpuesta por su esposo, Manuel Rincón contra sus exsocios.
También se investiga si presionó a los magistrados de la Judicatura para que sancionaran al abogado que interpuso una acción judicial contra su compañero sentimental.
Ante esta situación, Lucero Cortés fue cobijada con detención domiciliaria en abril del presente año.
Al considerar que no se allegaron pruebas suficientes, la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia archivó la investigación contra la suspendida congresista Lucero Cortés por el delito de tráfico de influencias contra servidor público.
Según el alto tribunal, durante la indagación no se pudo comprobar que la representante a la Cámara por Bogotá haya influido ante los magistrados de la Corte Constitucional y la Defensoría del Pueblo para que “sometieran a revisión y revocaran” los fallos de tutela dentro de un trámite promovido por su esposo, Manuel Arturo Rincón, contra la fiscalía 22 de la unidad delegada ante el Tribunal Superior de Bogotá.
“Al proceso no se allegó ninguna prueba que señale así fuese por vía indiciaria o inferencial, que por parte de la aforada se utilizó abusiva o ilegalmente la posición política que ejercía como Congresista, con el fin de conseguir beneficios o ventajas ante la Defensoría del Pueblo o los Magistrados de la Corte Constitucional”, precisa la decisión.
Se señala además que la decisión final en el proceso fue en parte “por la petición de insistencia; menos aún, que la revocatoria del recurso de amparo se lograra por la utilización indebida de atribuciones emanadas del cargo de Legisladora”.
Sin embargo, por hechos similiares la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia llamó a juicio a la congresista, Lucero Cortés, por supuesto tráfico de influencias.
La representante a la Cámara por Bogotá es investigada por haber presionado presuntamente a magistrados del Consejo Superior de la Judicatura en una tutela interpuesta por su esposo, Manuel Rincón contra sus exsocios.
También se investiga si presionó a los magistrados de la Judicatura para que sancionaran al abogado que interpuso una acción judicial contra su compañero sentimental.
Ante esta situación, Lucero Cortés fue cobijada con detención domiciliaria en abril del presente año.