Un juez del Cauca envió a prisión a 10 militares del pelotón Cancerbero N°3 de un batallón de operaciones terrestres del departamento, culminadas las audiencias preliminares de un expediente escabroso. Todos fueron imputados por la tortura que padeció un inocente campesino de 53 años el pasado 26 de octubre, en zona rural de Santander de Quilichao, Cauca.
Lea: En cooperación con la DEA autoridades capturan a nueve extraditables por narcotráfico
Según imputó la Fiscalía, la víctima estaba caminando por la vereda El Broche, ubicada en el resguardo Munchique Los Tigres, cerca a un predio donde se había instalado transitoriamente una base del pelotón Cancerbero N°3. El grupo de militares, al parecer, lo interceptó y lo llevó a la fuerza al campamento.
“La evidencia recopilada y los estudios realizados por el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses indican que, luego de varias horas del maltrato, los militares habrían asfixiado al agricultor con una cuerda que le pusieron en el cuello. Asimismo, se estableció que un presunto pacto de silencio, sepultaron el cuerpo, y quemaron la ropa y otras pertenencias de la víctima”, explicó la Fiscalía.
Lea también: Cae alias “El Ungido”, quien habría creado una secta para tener esclavas sexuales
Los involucrados son el sargento segundo Ricardo Cotera Angulo, el cabo tercero Anderson Ordóñez Arenas y los soldados profesionales Luis Hernando Camacho López, Cristian Camilo Anzola, Edison Parra Suárez, Julio Cesar Jiménez Angulo, Cristian Camilo Cuper Hernández, Jhervvint David Morales Montaño, Exnaider Salazar Ramírez y Hebert Alexander Puyo Campo.
Todos fueron imputados por los delitos de homicidio agravado, tortura agravada y desaparición forzada. No aceptaron los cargos, pero fueron enviados a prisión mientras la investigación sigue su curso y la Fiscalía prepara su nueva jugada para intentar condenar a estos 10 militares involucrados en el cruel asesinato de la víctima, cuyo crimen se intentó desaparecer.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.
