Campesinos del Meta traían mensaje de las Farc
Según relató Antonio Arango, uno de los labriegos que recobró su libertad, las Farc los llevaron con engaños y les dieron la orden de difundir un comunicado.
Según relató Antonio Arango, uno de los labriegos que recobró su libertad, las Farc los llevaron con engaños y les dieron la orden de difundir un comunicado.
El Espectador
Las autoridades no revelaron detalles sobre el contenido del documento que es objeto de investigación por parte de la Fiscalía.
Según el general Luis Eduardo Pérez, comandante de la brigada 13, los campesinos, que permanecieron 27 días retenidos, se desplazaban en un bus por la vía que conduce de San Juan de Sumapaz a Usme, cuando fueron detenidos en un retén militar.
Sin llevar sus identificaciones consigo y sucios, los campesinos a bordo del transporte se presentaron como el grupo que había sido retenido en diciembre, dijo Arango.
El labriego dijo que los subversivos de las Farc les dieron panfletos para que distribuyeran en la población. Sin embargo, ni Arango ni el general Pérez explicaron el inusual caso.
Los 10 campesinos habían sido secuestrados en Cubarral (Meta) por las Farc y desde el momento del plagio las autoridades habían desplegado intensos operativos para dar con su paradero.
Los liberados son Héctor Julio y Alexánder García Díaz, de 19 y 21 años, respectivamente; Henry Fabián Ramírez Alvarado, de 19 años; Jairo Peña, de 58; José Wellington Cortés, de 28, José Vitelio Campos Ortiz, de 29; Ferléin Murcia, de 25; Gerardo Rocha, Giovanni Bavativa, de 24 años, y Antonio Arango, de 45.
El Mayor General Luis Zapata Uribe indicó que los campesinos se encuentran en buenas condiciones de salud.
El 20 de diciembre fueron secuestrados los diez campesinos en la vereda de Arrayanes del municipio de Cubarral, Meta. Como a las 6 de la tarde, cuando siete sujetos que portaban fusiles AK- 47 y quienes se identificaron como integrantes del bloque oriental de las Farc, llegaron a la escuela El Divino Niño de la vereda de Arrayanes, donde estaban reunidos un grupo de jóvenes descansando tras un partido de microfútbol y otras personas que se hallaban conversando.
Reunieron a por lo menos unas treinta personas en la escuela y escogieron a nueve hombres y les dijeron que tenían que irse con ellos. Por el camino, en dirección hacia la zona montañosa, a la altura de la vereda de Angosturas, retuvieron a otra persona, completando así un grupo de 10 personas.
Las autoridades no revelaron detalles sobre el contenido del documento que es objeto de investigación por parte de la Fiscalía.
Según el general Luis Eduardo Pérez, comandante de la brigada 13, los campesinos, que permanecieron 27 días retenidos, se desplazaban en un bus por la vía que conduce de San Juan de Sumapaz a Usme, cuando fueron detenidos en un retén militar.
Sin llevar sus identificaciones consigo y sucios, los campesinos a bordo del transporte se presentaron como el grupo que había sido retenido en diciembre, dijo Arango.
El labriego dijo que los subversivos de las Farc les dieron panfletos para que distribuyeran en la población. Sin embargo, ni Arango ni el general Pérez explicaron el inusual caso.
Los 10 campesinos habían sido secuestrados en Cubarral (Meta) por las Farc y desde el momento del plagio las autoridades habían desplegado intensos operativos para dar con su paradero.
Los liberados son Héctor Julio y Alexánder García Díaz, de 19 y 21 años, respectivamente; Henry Fabián Ramírez Alvarado, de 19 años; Jairo Peña, de 58; José Wellington Cortés, de 28, José Vitelio Campos Ortiz, de 29; Ferléin Murcia, de 25; Gerardo Rocha, Giovanni Bavativa, de 24 años, y Antonio Arango, de 45.
El Mayor General Luis Zapata Uribe indicó que los campesinos se encuentran en buenas condiciones de salud.
El 20 de diciembre fueron secuestrados los diez campesinos en la vereda de Arrayanes del municipio de Cubarral, Meta. Como a las 6 de la tarde, cuando siete sujetos que portaban fusiles AK- 47 y quienes se identificaron como integrantes del bloque oriental de las Farc, llegaron a la escuela El Divino Niño de la vereda de Arrayanes, donde estaban reunidos un grupo de jóvenes descansando tras un partido de microfútbol y otras personas que se hallaban conversando.
Reunieron a por lo menos unas treinta personas en la escuela y escogieron a nueve hombres y les dijeron que tenían que irse con ellos. Por el camino, en dirección hacia la zona montañosa, a la altura de la vereda de Angosturas, retuvieron a otra persona, completando así un grupo de 10 personas.