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El expediente por presunta manipulación de testigos contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez dio un giro en segunda instancia: el Tribunal Superior de Bogotá encontró que el líder natural del Centro Democrático es inocente de los delitos de fraude procesal y soborno en actuación penal. En julio pasado, el juzgado 44 penal de Bogotá lo condenó a 12 años de prisión domiciliaria por esos delitos, pero, para los magistrados, la jueza Sandra Heredia incurrió en errores al valorar las pruebas e imponer la pena. Ahora, con dos decisiones distintas encima, el proceso está a un paso de llegar a lo más alto de la cúpula de la justicia en el país: la Corte Suprema de Justicia. Así se moverá el mediático caso.
Tras conocerse la decisión de los magistrados, las víctimas tiene cinco días para hacerle saber a la misma Sala su intención de presentar una demanda de casación, con la cual buscarán que la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia sea la que se apropie del caso y tenga, ahora sí, la última palabra. El recurso de casación es, precisamente, el único que le queda a las víctimas para intentar que la decisión de segunda instancia que determinó la inocencia de Uribe Vélez, cambie. Para presentarla formalmente, tendrán 30 días.
Cuando la demanda de casación se radique en el Tribunal Superior de Bogotá, la totalidad del expediente será enviado a la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia, donde, por sorteo, se le asignará a uno de los nueve magistrados para que sea el ponente. Ese togado, o togada —en caso de que quede en manos de la única mujer de la Sala, la magistrada Myriam Ávila Roldán— tendrá la tarea de verificar si la demanda cumple con todos los requisitos para ser admitida.
En caso de pasar los primeros filtros de forma que exige el alto tribunal, la Sala Penal convocará a una audiencia para que las partes sustenten, por máximo 10 minutos, sus pretenciones. De ahí, lo único que queda es que el ponente del caso presente un proyecto de fallo y la Sala vote. Para aprobarlo, necesitará al menos cinco de los nueve votos posibles.
En caso de que el proyecto de fallo del ponente no convenza a la mayoría de los togados y el proyecto no consiga los votos necesarios, se designaría a un nuevo ponente, quien tendrá que presentar un nuevo proyecto para ser votado. Una vez se apruebe el fallo definitivo, las partes serán citadas a una audiencia en la que se leerá la decisión.
Sin embargo, en caso de que la demanda de casación no sea admitida por la Corte Suprema, las víctimas pueden pedirle a la Procuraduría que insista al alto tribunal para que revise el expediente. Pero esa posibilidad no es obligatoria, pues el procurador puede no insistir, o, en caso de que lo haga, la Sala Penal puede, simplemente, mantener la inadmisión.
¿Cuánto tiempo demorará el caso en la Corte Suprema de Justicia?
Admisión de la demanda: suele tardar entre seis y 18 meses.
Decisión de fondo: las decisiones de casación en la Corte Suprema pueden tomar, normalmente, entre tres y cinco años. De hecho, el término máximo que tiene el alto tribunal para fallar es de cinco años, de lo contrario, prescribe el proceso.
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