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El jefe de operaciones de Inteligencia de la Policía en Bolívar pasaba información privilegiada al Clan del Golfo en ese departamento. El integrante de la institución aceptó ante un juez su responsabilidad en los hechos y fue enviado a prisión domiciliaria.
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De acuerdo con la investigación que adelantaba la Fiscalía en contra del grupo criminal, establecieron que el jefe de operaciones de la Seccional de Inteligencia de la Policía Nacional (Sipol) en Bolívar, el intendente Harvey Arellano Cerda, sería el responsable de entregar información al Clan del Golfo.
Según lo que encontró el ente investigador, Arellano “aprovechaba su cargo y entraba sin autorización a los sistemas de la entidad para extraer detalles de las operaciones y los movimientos de la fuerza pública en el departamento”. Todo eso, lo hacía, según las pruebas, “con el propósito de alertar a la subestructura Uldar Cardona Rueda sobre las acciones en su contra”.
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Conociendo la información, los líderes del Clan del Golfo en el departamento, evadían los operativos de la Fuerza Pública “y evitaban que fueran impactadas sus finanzas ilegales”, dice la Fiscalía. Por esos motivos, un fiscal de la Dirección Especializada contra las Organizaciones Criminales le imputó al intendente Arellano el delito de violación de datos personales agravado.
El uniformado aceptó voluntariamente el cargo en su contra y un juez de control de garantías le impuso medida de aseguramiento privativa de la libertad en su lugar de residencia.
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