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Cuatro miembros de la Guardia Nacional de Venezuela fueron deportados por las autoridades colombianas tras ser retenidos este viernes en el departamento de Vichada.
Un portavoz del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) , organismo encargado de migración, señaló que de acuerdo al comunicado emitido ayer por ese despacho y dando cumplimiento a la orden del presidente colombiano, Álvaro Uribe, fueron entregados a las autoridades venezolanas los cuatro militares.
"Los entregaron ayer a las 04.30 de la tarde (21-30 GMT) en calidad de deportados" en el municipio de Puerto Páez, zona fronteriza colombo-venezolana.
Los cuatro militares venezolanos fueron retenidos el viernes en el caserío Aceitico, que pertenece a Puerto Carreño, capital provincial de Vichada.
"La Armada Nacional retuvo a cuatro funcionarios de la Guardia venezolana que se movilizaban por territorio nacional en una lancha, en cuyo interior fueron encontradas maletas que contenían uniformes camuflados de las Fuerzas Armadas de Venezuela" , señaló ayer el DAS en un comunicado.
Tres de los guardias venezolanos tienen cargos de sargento segundo y fueron identificados como Alexander José Marín, Rodolfo Enrique Márquez y Paul José Luna Marcano.
El cuarto es un sargento primero de la Guardia venezolana con el nombre de Jorge Ramírez Ramírez.
Asimismo, indicó que con la entrega de los cuatro militares son cinco los miembros de la Guardia de Venezuela que son retenidos en territorio colombiano en las últimas dos semanas y quienes han sido devueltos a las autoridades de su país.
El portavoz del DAS reiteró en diálogo con Efe que "el detective Julio Enrique Tocora continúa retenido en Venezuela, luego de haber aceptado una invitación de un funcionario del Servicio Administrativo de Identificación y Migración de Venezuela (Saime), para pasar unos días de descanso en ese país. Se espera su pronta devolución".
El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, anunció este sábado que los militares venezolanos "serán entregados a las autoridades de Venezuela con toda la decencia como corresponde".
Uribe indicó que ellos deben llevar un "mensaje de que aquí hay afecto por el hermano pueblo de Venezuela".
"Que ese afecto que tenemos por el hermano pueblo de Venezuela es un afecto inquebrantable" , añadió el jefe de Estado.
La retención de los cuatro militares es el incidente más reciente en las relaciones diplomáticas y comerciales de los dos países que desde el pasado domingo se han complicado por la advertencia del presidente venezolano, Hugo Chávez, de una posible guerra auspiciada por Estados Unidos a través de Colombia.
Chávez llamó ayer "mafioso" a Uribe y dijo que no hay posibilidad de diálogo con su gobierno "traidor".
"No tengo nada que hablar con el mafioso de Uribe, porque sé que está buscando contacto. Podrá pedirlo el Rey de España o Gobiernos amigos, pero no hay nada que hablar con ese gobierno traidor" , aseguró Chávez.
El Gobierno colombiano presentó ante el Consejo de Seguridad de la ONU y la Organización de Estados Americanos (OEA) una nota de protesta por esas "amenazas" del Ejecutivo de Venezuela.
La tensión entre los dos países, cuyas relaciones están "congeladas" desde agosto pasado por decisión de Chávez, ha aumentado desde que el mandatario venezolano advirtió a sus compatriotas de la posibilidad de una guerra, a raíz de un acuerdo colombo-estadounidense de ámbito militar, y los llamó a estar preparados.
Chávez ve ese convenio que permite a militares estadounidenses el uso de bases colombianas como una amenaza para su país y la región.
Por El Espectador
