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Colombia pidió la extradición de Mancuso con una orden de captura que no está vigente

Cuando el pasado 15 de mayo la Fiscalía y el Ministerio de Justicia solicitaron la extradición, todo indica que lo hicieron con una orden judicial que luego fue cancelada por una jueza de Bogotá, lo que significa otro impase en el regreso del exjefe paramilitar de Estados Unidos a Colombia.

05 de agosto de 2020 - 09:37 p. m.
Mientras esperaba a ser extraditado, al exjefe paramilitar ya le dio COVID-19.
Mientras esperaba a ser extraditado, al exjefe paramilitar ya le dio COVID-19.

Otro obstáculo se cruzó en el proceso para traer al exjefe paramilitar Salvatore Mancuso a Colombia. El excomandante de las Autodefensas, que delinquió en Córdoba y Norte de Santander, se encuentra recluido provisionalmente en una cárcel de Estados Unidos, y aunque iba a ser trasladado a finales de marzo, se atravesó la emergencia sanitaria del coronavirus, luego al propio Mancuso le dio COVID-19 y ahora, al parecer, el trámite está frenado por un error administrativo de Colombia: el Gobierno pidió su extradición con una orden de captura que fue cancelada. Sin embargo, todavía puede ser deportado, si así lo decide el gobierno estadounidense.

(En contexto: A Salvatore Mancuso le espera la prisión apenas llegue a Colombia)

Así lo pudo confirmar El Espectador, al conocer una decisión de la juez Luz Marina Zamora, de ejecución de penas de Justicia y Paz, quien vigila el cumplimiento de la condena al exjefe paramilitar y el pasado 15 de julio ordenó cancelar las órdenes capturas que había en contra de Mancuso. La decisión tiene ocho páginas y, en medio de los tecnicismos, la funcionaria ordena la cancelación de las órdenes judiciales, pues todas las condenas contra el exjefe paramilitar fueron acumuladas. Y, en esa medida, le corresponde a ella y no a otros juzgados emitir órdenes de aprehender a Mancuso para que cumpla su sentencia.

Mancuso fue pedido en extradición el pasado 15 de abril, según dijo la Fiscalía en ese momento, para que “comparezca ante la jurisdicción colombiana, con el fin de garantizar la consecución de la verdad, reparación y no repetición que merecen las víctimas de los delitos que se le atribuyen”. Y, aunque una jueza de ejecución de penas Bogotá avaló darle la libertad a finales de 2019 por considerar que ya había pagado los ocho años de cárcel que les dictó Justicia y Paz a los exparas, luego el Tribunal de Barranquilla le puso tatequieto a esa decisión con otra medida de aseguramiento.

(Lea también: A la espera de ser extraditado a Colombia, Salvatore Mancuso dio positivo para COVID-19)

Su defensa apeló, pero luego la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia confirmó que, cuando Mancuso llegue a Colombia, le espera la cárcel, de manera preventiva, mientras continúa siendo investigado. Para el alto tribunal, en los documentos presentados por la defensa del exjefe paramilitar, que redactó el cónsul colombiano en Atlanta (Estados Unidos), no incluyeron un certificado del acatamiento de Mancuso de sus compromisos como desmovilizado, y tampoco este funcionario puede dar cuenta de la conducta del líder paramilitar durante su estadía en la prisión estadounidense donde está recluido.

Además, la Corte señaló en su decisión de mantenerle en firme la detención a Mancuso que, los hechos por los que es investigado en este proceso son posteriores a su desmovilización (año 2005), lo que significaría que están por fuera de los beneficios de Justicia y Paz. Aunque el ente investigador no dio una fecha precisa en su contestación a la Corte, el alto tribunal considera que se presume que Mancuso se involucró con el ocultamiento y ajustes de ingresos en empresas relacionadas a él, entre entre 2003 y 2007, especialmente en la Empresa de Seguridad 991, que era la encargada de prestar servicios de seguridad a los puestos de chance de Enilce López, La Gata.

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