Condenan a 39 años a Margareth Chacón por participar en el crimen de fiscal Pecci

Margareth Chacón fue condenada a 39 años y 10 meses de prisión por hacer parte de una red criminal que perpetró el asesinato del fiscal paraguayo antimafia Marcelo Pecci, ocurrido en mayo de 2022 en Cartagena. La Fiscalía señaló durante el proceso que la mujer sabía al detalle los pormenores de cómo se iba a ejecutar el crimen. “Participaba en las reuniones de coordinación, no solamente en Cartagena, sino en Medellín”, explicó el ente investigador durante las audiencias del caso.

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Chacón fue condenada por los delitos de homicidio agravado; y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones. La investigación reveló que asistió a, por lo menos, cuatro reuniones entre el 5 y 8 de mayo de 2022, en las que se definieron detalles de logística y financiamiento del asesinato. Uno de los encuentros sucedió en Medellín y tres más en Cartagena.

En concreto, la investigación señala que el 5 de mayo de 2022, cuando Pecci ya estaba en Cartagena, la acusada se reunió en un restaurante del sector Las Palmas de Medellín, con los procesados Ramón Emilio Pérez, Andrés Felipe Pérez y Francisco Luis Correa Galeano, este último señalado de ser el principal coordinador del crimen y quien es el testigo estrella del caso.

Lea: Condenan a Margareth Chacón por participar en el asesinato de fiscal Marcelo Pecci

Ahí entra en juego una camioneta Toyota de placas IWV-738, la cual sería utilizada para múltiples desplazamientos en los días previos al crimen. En ese vehículo llegaron a la reunión, en la cual, dice la Fiscalía, se habrían coordinado los desplazamientos de los implicados a Cartagena. Al día siguiente, en esa camioneta, Chacón habría viajado junto a otros dos señalados hasta Aguachica (Cesar), donde se hospedaron en un hotel. Chacón, Andrés Felipe Pérez y Ramón Emilio Pérez arribaron el 7 de mayo de 2022 a Cartagena. Se quedaron en un hotel que les cobró $460.000 la noche. Ese mismo día, uno de los hermanos Hoyos realizó dos retiros por $3 millones. Según la acusación de la Fiscalía, el plan criminal se gestó, como tal, el 8 de mayo de 2022.

Luego, siendo las 14:52 horas se reúnen Margareth Lizeth Chacón Zúñiga, Andrés Felipe Pérez, Ramon Emilio Pérez y Francisco Luis Correa Galeano, en frente del edificio Palmeto Eliptic, lugar en el cual se hospedaba Francisco Luis Correa Galeano. En estas reuniones se realizaban coordinaciones sobre el homicidio, se fijaban rutas de acción, se generaban órdenes y se hacían entregas de dinero. Luego de estas coordinaciones, Pecci fue asesinado el 10 de mayo de 2022.

Al día de hoy la Fiscalía colombiana ha judicializado a varias personas por este crimen: Wendre Still Scott, sicario; Marisol Londoño y Cristian Camilo Monsalve, quienes hicieron labores de seguimiento; y Eiverson Adrián Zabaleta, quien cumplió labores de transporte, fueron condenados a 47 años de cárcel. Por su parte, Francisco Luis Correa, quien inicialmente se declaró inocente, aceptó cargos, mientras que hermanos Ramón y Andrés Pérez Hoyos, quienes financiaron el ataque, también fueron condenados luego de aceptar cargos.

Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.

Margareth Chacón fue condenada a 39 años y 10 meses de prisión por hacer parte de una red criminal que perpetró el asesinato del fiscal paraguayo antimafia Marcelo Pecci, ocurrido en mayo de 2022 en Cartagena. La Fiscalía señaló durante el proceso que la mujer sabía al detalle los pormenores de cómo se iba a ejecutar el crimen. “Participaba en las reuniones de coordinación, no solamente en Cartagena, sino en Medellín”, explicó el ente investigador durante las audiencias del caso.

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Chacón fue condenada por los delitos de homicidio agravado; y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones. La investigación reveló que asistió a, por lo menos, cuatro reuniones entre el 5 y 8 de mayo de 2022, en las que se definieron detalles de logística y financiamiento del asesinato. Uno de los encuentros sucedió en Medellín y tres más en Cartagena.

En concreto, la investigación señala que el 5 de mayo de 2022, cuando Pecci ya estaba en Cartagena, la acusada se reunió en un restaurante del sector Las Palmas de Medellín, con los procesados Ramón Emilio Pérez, Andrés Felipe Pérez y Francisco Luis Correa Galeano, este último señalado de ser el principal coordinador del crimen y quien es el testigo estrella del caso.

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Ahí entra en juego una camioneta Toyota de placas IWV-738, la cual sería utilizada para múltiples desplazamientos en los días previos al crimen. En ese vehículo llegaron a la reunión, en la cual, dice la Fiscalía, se habrían coordinado los desplazamientos de los implicados a Cartagena. Al día siguiente, en esa camioneta, Chacón habría viajado junto a otros dos señalados hasta Aguachica (Cesar), donde se hospedaron en un hotel. Chacón, Andrés Felipe Pérez y Ramón Emilio Pérez arribaron el 7 de mayo de 2022 a Cartagena. Se quedaron en un hotel que les cobró $460.000 la noche. Ese mismo día, uno de los hermanos Hoyos realizó dos retiros por $3 millones. Según la acusación de la Fiscalía, el plan criminal se gestó, como tal, el 8 de mayo de 2022.

Luego, siendo las 14:52 horas se reúnen Margareth Lizeth Chacón Zúñiga, Andrés Felipe Pérez, Ramon Emilio Pérez y Francisco Luis Correa Galeano, en frente del edificio Palmeto Eliptic, lugar en el cual se hospedaba Francisco Luis Correa Galeano. En estas reuniones se realizaban coordinaciones sobre el homicidio, se fijaban rutas de acción, se generaban órdenes y se hacían entregas de dinero. Luego de estas coordinaciones, Pecci fue asesinado el 10 de mayo de 2022.

Al día de hoy la Fiscalía colombiana ha judicializado a varias personas por este crimen: Wendre Still Scott, sicario; Marisol Londoño y Cristian Camilo Monsalve, quienes hicieron labores de seguimiento; y Eiverson Adrián Zabaleta, quien cumplió labores de transporte, fueron condenados a 47 años de cárcel. Por su parte, Francisco Luis Correa, quien inicialmente se declaró inocente, aceptó cargos, mientras que hermanos Ramón y Andrés Pérez Hoyos, quienes financiaron el ataque, también fueron condenados luego de aceptar cargos.

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