
El exgobernador de Córdoba, que se encuentra en Estados Unidos desde abril de 2017, es testigo protegido de la DEA. / Archivo El Espectador
El capítulo inicial del expediente del cartel de la toga fueron las grabaciones que Alejandro Lyons hizo de manera encubierta para la DEA, entre mayo y junio de 2017, al entonces fiscal anticorrupción Gustavo Moreno y a su socio, el abogado Leonardo Pinilla en Miami (Estados Unidos). En esas conversaciones a Lyons le exigieron $400 millones para que le frenaran varios procesos penales que tenía en la justicia colombiana, por el desangre a las finanzas de Córdoba mientras fue gobernador. Luego, fue Moreno quien reveló nombres de la supuesta...
Por José David Escobar Moreno / @JoseDEM18 / jescobar@elespectador.com
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