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Para la Corte Suprema de Justicia no hubo duda sobre la intención del juez Segundo Civil del Circuito de Barranquilla, Dilio César Donado Manotas, de favorecer con sus decisiones a los actores de un proceso en el que figuraba como demandado David Char Navas, miembro de uno de los clanes políticos más poderosos de la Costa y el primer parapolítico que habló ante la Justicia Especial para la Paz (JEP), tribunal al que le rinde cuentas por sus presuntos nexos con paramilitares durante su carrera al Congreso de la República. (Lea también: “Versión de David Char es fiable, suficiente y válida”: Comisión de la Verdad)
El caso se remonta al año 2003 y tiene como escenario un proceso en el que se discutió una demanda interpuesta por Abel Manuel Padilla Manga en contra de la sociedad Invercasa Ltda., cuyo representante legal era David Char, por una deuda entre estos. Sin embargo, las decisiones irregulares del juez no fueron por ese lado, de hecho, tanto Padilla como Char, salieron bien librados de la controversia judicial. La afectada con la actuación del juez fue la sociedad Promotora Kosmos S.A. a la que Char también le debía dinero.