Un fuerte llamado de atención le hizo el magistrado Fernando Castro al abogado Jesús Orlando Gómez, quien defiende los intereses jurídicos del exsenador Iván Moreno Rojas en el desarrollo del proceso que se le adelanta por el llamado carrusel de la contratación.
El togado consideró que en diversas oportunidades, entre el viernes pasado y este martes, el abogado defensor ha presentado “serias acusaciones” en contra de los cinco magistrados que conforman la Sala de juzgamiento de la Corte Suprema de Justicia.
“A lo largo de su intervención hemos observado que usted está dejando constancias para acudir a instancias internacionales. La Corte tiene muy claro que tiene derecho a hacerlo si así lo considera conveniente pero lo recuerdo que como abogado tiene el deber de guardar el respeto para con el juez del caso que en este caso es la Corte Suprema de Justicia”, precisó el magistrado Castro.
Y es que la respuesta del togado que preside la audiencia tuvo como fondo las serias acusaciones presentadas por el abogado en el que reiteró que iba a solicitar una veeduría internacional para que revisaran el proceso que se adelanta contra Iván Moreno Rojas, al considerar que no se le estaban brindando las garantías.
“Le hago esa advertencia porque no quisiéramos tener que tomar medidas de carácter disciplinario si usted persiste en faltarle el respeto a la Corte”, manifestó el magistrado quien consideró que en tres oportunidades el abogado hizo serias advertencias para con su conducta dentro del proceso judicial que inició el pasado viernes.
"La Corte no se amenaza, no tiene que soportar que la defensa haga permanente advertencias sobre actuaciones que van a hacer ante instancias internacionales”, precisó.
Defensa se defiende
Después de este fuerte regaño, el abogado manifestó que en ningún momento quiso ofender a la Corte Suprema de Justicia, señalando que tiene un inmenso respeto por el alto tribunal, aunque no rebajó sus cuestionamientos ante el hecho de la división de las salas de juzgamiento e instrucción, manifestando que el proceso debe ser adelantado por la Sala Penal con sus nueve magistrados.
“La labor de la Sala Penal de la Corte tiene que ser un verdadero guardián de la Constitución, su misión tiene que ir más allá de las simples formas para convertirse en un verdadero juez constitucional para que esa calificación adjetiva sea verdaderamente sustantiva”, aclaró Gómez.
“Porque si está limitada por unos formalismos deja de ser Suprema y lo supremo se convierte en lo que no es sustancial. Reclamos que sea suprema, que sea la majestad que encarna, el espíritu absoluto. Me resisto que eso haya muerto, que ese espíritu democrático del derecho penal haya fenómeno por la necesidad de un resultado de demostrar que prima la justicia que sanciona que las garantías del ciudadano”, concluyó
En la audiencia celebrada este martes, el abogado presentó su apelación ante la decisión del alto tribunal de rechazar las seis solicitudes de nulidad presentadas.