Explosivas declaraciones, en el marco de la investigación por el escándalo de las ‘chuzadas’ del DAS a magistrados de la Corte Suprema de Justicia, periodistas y opositores del gobierno de Álvaro Uribe Vélez, entregó en noviembre de 2011 a una comisión de la Fiscalía colombiana, el exjefe paramilitar Diego Fernando Murillo Bejarano, alias Don Berna.
Extraditado a Estados Unidos en mayo de 2008, en un testimonio dado bajo la gravedad de juramento desde la Corte del Distrito Sur de Florida (EE.UU.), Don Berna aseguró que Bernardo Moreno, secretario general de la Presidencia de la República durante la administración Uribe Vélez, conocía del plan para infiltrar a la Corte Suprema de Justicia con el objetivo de desacreditar a los investigadores de la parapolítica.
Las declaraciones del exjefe paramilitar quedaron grabadas en un video, cuyos fragmentos fueron parcialmente revelados anoche por Canal Capital y Noticias Uno, dirigido hasta hace unos meses por Daniel Coronell, una de las víctimas de las ‘chuzadas’.
Precisamente, en su columna publicada en la última edición de la revista Semana, que empezó a circular ayer, Coronell afirmó que si el testimonio de Don Berna es corroborado por la justicia, “quedará claro que la llamada reunión de la ‘Casa de Nari’ (en abril de 2008) fue un eslabón más de una operación criminal que incluyó interceptaciones, seguimientos y rastreos financieros contra magistrados y periodistas”.
En el encuentro en la sede de gobierno asistió el enviado de Don Berna, Antonio López, alias Job, quien según el extraditado pramilitar “era amigo de César Mauricio Velásquez (por entonces jefe de Prensa de la Casa de Nariño). Él sabía que se iba a llevar a cabo dicha reunión y estaba atento de lo que se decidiera en dicho encuentro”.
Tres meses después Job fue asesinado en Medellín.
Don Berna relató que le dio luz verde a su abogado, Diego Álvarez, para reunirse con el secretario jurídico de la Presidencia, Edmundo del Castillo, y que esas reuniones fueron varias, no sólo una, como se creía. Álvarez también habló con la directora del DAS, María del Pilar Hurtado, hoy asilada en Panamá, cuenta Coronell en su columna.
Don Berna confesó a la comisión de la Fiscalía que la subdirectora de operaciones del DAS, Marta Leal, se encargaba de instruir a los funcionarios del organismo de inteligencia y de brindar los equipos necesarios para chuzar a los magistrados de la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia.
Según Don Berna, mucho antes de esta reunión los paramilitares ya tenían contacto directo con la cúpula del DAS.
“Hace mucho tiempo, es bueno anotar que cuando fue elegido el doctor Jorge Noguera (como director del DAS), pues el comandante Jorge 40 nos comentó a la mayoría de los comandantes que había llegado a la cúpula alguien de su entera confianza y que podríamos contar con él para lo que necesitáramos”.
También afirmó que parte del plan criminal era grabar clandestinamente a Rafael García, exdirector de informática del DAS, quien en su calidad de testigo estrella ayudó a develar el escándalo de las ‘chuzadas’.
Además, señaló que “al principio de 2005 hubo una reunión en la zona de Ralito, a la que asistieron varios miembros de la cúpula del DAS, entre ellos Fernando Tabares (director de Inteligencia del DAS) y el capitán Jorge Alberto Lagos (jefe de Contrainteligencia), así como otros personajes, “donde expresaron que estaban a disposición para colaborar con la organización”.
Por el escándalo de las ‘chuzadas’ Tabares y Lagos ya fueron condenados a ocho años de prisión.
Ahora, la Fiscalía General de la Nación evaluará la confesión de Don Berna para determinar la veracidad de la misma.
Por El Espectador
