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Abel David Jaramillo Largo fue alcalde de Riosucio (Caldas) entre el 2012 y el 2015. Integrante de la etnia Embera Chiamí del Resguardo de San Lorenzo de ese municipio, fue electo en 2018 Representante a la Cámara por ese departamento por el Movimiento Alternativo Indígena y Social (Mais) y en la Circunscripción Indígena. Un proceso penal que se le adelantaba desde comienzos de ese año acaba de aterrizar en la Corte Suprema de Justicia dado que ahora es aforado.
Se trata de un lío por supuestas irregularidades en contratación por el que la Fiscalía le imputó cargos el 22 de marzo de 2018, en diligencia que se adelantó ante el Juzgado Segundo Promiscuo Municipal de Riosucio. El expediente se remonta al 3 de febrero de 2014 cuando Jaramillo, en su rol de alcalde, suscribió con el Consorcio Duque Proyectos -representado por Alejandro Herrera, el contrato C.P. 040-13-2014 para la adecuación de vivienda en las unidades familiares que presentaban altos índices de necesidades básicas insatisfechas en Riosucio.