El bombardeo sobre el campamento de alias Gentil Duarte que fue ejecutado el pasado 2 de marzo en la vereda Buenos Aires, del municipio de Calamar, Guaviare, por las fuerzas militares, generó una álgida discusión que, aunque se ha ido disipando con los días, revivió el grave fenómeno del reclutamiento forzado de menores de edad en Colombia. Con el paso de los días, se ha venido confirmando que, en efecto, para el día del ataque militar, había adolescentes haciendo presencia en la zona del bombardeo. Entre ellos, una joven de 16 años que fue rescatada en las últimas horas por uniformados del Ejército Nacional. (Lea también: ¿Es legítimo bombardear donde hay menores de 18 años? Hablan los expertos)
Según la información que se conoce hasta el momento, la menor fue encontrada en medio de la selva cerca de un afluente, vestida con prendas tipo militar desgastadas, botas de caucho y un brazalete que la identificaba como parte de las disidencias de las Farc. Los militares se encontraron con la adolescente mientras realizaban una revisión a la zona del bombardeo. Al encontrarse con los uniformados, la menor les que no le hicieran daño, que ella se encontraba desarmada y que llevaba muchos días perdida en ese lugar.
Además, la versión que conoce de la adolescente indica que ella logró esquivar las bombas refugiándose en un lugar que le parecía seguro. Explicó que durante el tiempo que llevaba allí logró sobrevivir bebiendo agua de una quebrada y comiendo algunas frutas que encontró. Ante esta situación, los militares trasladaron a la menor en un helicóptero hacia la base militar del municipio de Calamar (Guaviare), donde fue atendida por médicos y enfermeros que supervisaron su estado de salud. La adolescente será entregada este martes 23 de marzo al Instituto de Bienestar Familiar (ICBF), que mantendrá su custodia hasta que cumpla la mayoría de edad.
Según el diario El Tiempo, la menor habría explicado que llevaba tres años en las disidencias porque su padre es integrante de este grupo armado y que él pidió que la reclutaran también a ella. Además, que la noche del bombardeo ella trató de huir junto a alias El Profe y otra adolescente quienes, al parecer, la dejaron abandonada en medio del escape. Cabe recordar que “El Profe” fue capturado en días pasados por hombres del Ejército que lo encontraron deambulando por la zona.
Se trata de Edwin Fernando Arévalo, un hombre identificado como profesor de informática que hacía parte del equipo de “Gentil Duarte” y logró escapar del campamento antes de que se ejecutara el bombardeo. Según lo que explicó ante las autoridades, había llegado hace poco más de cinco meses al lugar, luego de que las disidencias lo contrataran para que impartiera clases de informática a sus hombres. El día del ataque, dijo Arévalo, se alertó al escuchar el sonido de las aeronaves y decidió abandonar el lugar rápidamente, escapando así del bombardeo.
Lo cierto es que el rescate de la adolescente de 16 años es una prueba más de la presencia de menores de edad, víctimas de reclutamiento forzado, en el campamento de uno de los jefes de las disidencias de las Farc más poderosos de la zona a quien se le responsabiliza por una larga lista de crímenes cometidos contra la población civil, militares y policías. De hecho, luego del bombardeo, en una inspección de militares al lugar de los hechos fueron aprehendidas dos menores de edad y, posteriormente, Medicina Legal confirmó la muerte de una adolescente, de apenas 16 años de edad. (Noticia relacionada: “Son máquinas de guerra”: así justificó Diego Molano bombardeo a adolescentes)